If You Love Me

Capítulo 8 "Aún no es tiempo"

Han sido 15 días muy difíciles, he estado llorando todas las noches cuando recuerdo que he comido más de 3 veces al día, no me gusta que Tom me vea así, me siento estúpida, no le he permitido quedarse después de las 7 de la noche. Era muy insistente en quedarse conmigo mientras esperaba este proceso de agendar mis citas con la terapeuta, las visitas al nutriólogo y el cambio en este estilo de vida. Lo único que ya no detestaba tanto era trotar en el parque, porque Tom siempre iba conmigo, además de llevar a Bobby, iba a mi paso y no me obligaba a sobre esforzarme. Además ya no tenía tanto miedo de cerrar los ojos cada tantos pasos en mi carrera, porque tenía quien me cuidara.

Davina también fué un impulso importante para olvidarme un poco de todo lo que estaba atravesando. La primer semana las reuniones con Dav eran en la Facultad, pero estos últimos días ya nos comenzábamos a citar en lugares públicos, hoy fue la excepción, porque nos veríamos en su casa; lo lindo era que no era para discutir nada acerca de la tesis, si no para pasar un rato conociéndonos un poco más, o eso fué lo que ella mencionó. Estaba sumamente emocionada, y como siempre yo ya me había hecho mil historias con ella, solamente era esperar para ver qué sucedía más tarde.

-Yo digo que te vistas como siempre lo haces, no tienes que pensar mucho en eso -dice Tom desde la sala de mi apartamento.

-Es que me siento muy ansiosa, además me intimida el estilo tan cool que tiene -respondo vistiendome desde mi habitación.

-Pues tú también tienes un estilo muy cool, no sé por que te asusta. Usa lo que tienes y ya vámonos - dice intentando apresurarme.

-Voy a salir y me dices que te parece.

-Que sí, date prisa.

Mis mejores amigas son las botas negras con tacón bajo y grueso, tan cómodas y tan lindas. Una falda guinda y lisa de pana, una blusa negra con encaje en mangas largas y escote en V. Tom tuvo una reacción que no esperaba de alguien que me ve todos los días. Abrió ligeramente la boca mientras me veía de abajo hacia arriba, no pude evitarlo y me ruborice ligeramente.

-Te dije que usaras lo que usaras te quedaría perfecto -dice retomando la compostura.

-Fue complicado pensar positivo con lo que me veía usando, tardé mucho tiempo eligiendo.

-Pero lo valió, fué una excelente decisión. Anda, vamos porque tengo que ir a ver a Zawe.

-Es verdad, lo olvide por completo, con razón querías que me diera prisa, lo siento -me disculpo completamente avergonzada.

-No te preocupes, aunque se hiciera tarde no dejaría que fueras sola, así sé dónde vive.

-Gracias, en serio no sé qué haría sin tí -digo tomándole la mano.

Esa sensación de calidez que rápidamente llega a mi cuerpo con el tacto de su piel contra la mía, se intensifica con cada segundo que va pasando, por eso decidí soltarlo rápidamente.

Es una locura pero a veces creo que lee mi mente, y es en momentos como este donde me hace estar cada vez más segura de ello, pues toma rápidamente su abrigo y las llaves de su auto, parecía estar intentando disipar la tensión.

Como siempre, abre la puerta de la entrada para que yo pueda salir primero.

El inicio del camino a la casa de Davina fué silencioso, pero la tensión que sentía de alguna forma me incomodaba, entonces decidí romper el hielo.

-Ya no he sabido de Zawe.

-Bueno, hemos salido a cenar muy seguido, y estoy empezando a convencerme de que sí es la mujer con la que puedo compartir mi vida. Además ella ha estado mucho más feliz ahora que nos vemos con mayor frecuencia.