Celio, Italia
[POR] -Espero que tenha gostado do almoço, em minutos trago a conta.
[POR] -A massa estava deliciosa, muito obrigada.
Jade se alejó de los comensales hacia la barra donde Cat se encontraba preparando un café para otra mesa.
-La mesa 7 quiere la cuenta y dijeron que les gustó la pasta.
-No sabía que hablabas portugués.
-Se varios idiomas, gajes de seguir al salvador en el exilio.
Dijo la pelinegra con ironía, Cat le sonrió y dejó el café en la barra para imprimir la cuenta.
-Bueno eso ya está en el pasado, ¿Que piensas de sumarte a mi equipo? Nos vendría muy bien tus dotes de lenguaje aquí, hay demasiados turistas.
-Te agradezco la oferta Cat, pero la atención al público no es lo mío, además Emma quiere llevarme con ella a Nueva York hasta que las cosas con Beck estén resueltas.
La puerta de entrada se abrió y una corriente helada atravesó la columna de Jade. Al ver la expresión de Cat supuso que la ninfa también lo había sentido y eso no significaba nada bueno.
-Actúa como una empleada normal y ocúpate sólo de las mesas, yo me encargo del frío.
La pelirroja le susurro mientras le entregaba el café y la cuenta, Jade asintió y se dirigió a la mesa 7.
El frío que había ingresado al local se acercó a la barra ignorando por completo a la pelinegra, al parecer el hechizo de Robbie realmente estaba funcionando.-Buenas tardes señor ¿En qué puedo ayudarle?
-¿Dónde están?
-¿Quiénes señor?
-Artemisa y Maria
-No recuerdo a ningún huésped con esos nombres, déjeme revisar las reservas.
Jade trató de calmar sus nervios mientras limpiaba una mesa a lo lejos, por el rabillo del ojo vio como Cat perdía tiempo en la computadora y el frío se impacientaba cada vez más.
-Lo siento tal vez sea en otro lugar, aquí no veo a ninguna Artemisa o Maria.
-Se que eres una ninfa y trabajas para la diosa de la luna así que si sabes lo que te conviene me dirás dónde están.
-Si sabes que soy y a quien serví alguna vez, entonces deberías saber que hace miles de años que no soy parte de su secta, soy una ninfa libre y no solo eso, nadie sabe de ella, hace décadas que está desaparecida, de verdad es imposible que ella esté aquí y ni siquiera sé quién es esa tal María de la que hablas.
Cat habló con seguridad y firmeza, Jade se quedó sorprendida, de hecho hasta ella misma le creyó de que no sabía nada de lo que estaba hablando el frío.
El demonio se la quedó observando un momento y luego asintió.-Tus palabras suenan muy convincentes pero estoy seguro de que algo ocultas y te estaré vigilando.
-No tengo nada que ocultar si quieres puedes pasar tu mismo y revisar toda la hostería, no encontrarás nada.
-No soy tan estúpido, se que tu esposo es un hechicero y tienen cubierto el lugar con runas para seres cómo yo, además si María estuviera aquí la hubiera detectado, ella no puede esconder su aroma como la diosa. Nos estaremos viendo ninfa.
El frío se dió la vuelta y salió del lugar, Jade siguió limpiando la mesa un poco más hasta estar segura de que se había ido del todo.
Cat seguía en la barra trabajando como si nada hubiera pasado, tampoco estaba segura de que el frío se hubiera conformado con su explicación.
Unos quince minutos después la puerta se volvió a abrir pero esta vez Jade vio a Cat sonreír con alegría.
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A God loves only once - Libro 1
FantasyEmma, La Diosa de La Luna perdio a su gran amor miles de años atras, por decisiones tomadas en su pasado termino viviendo en nuestro mundo como una simple mortal. Un dia inesperado los fantasmas del pasado volvieron para atormentarla, ¿estará en con...