Jeanne
Logré contactar a Charlie para que me recogiera en el aeropuerto. Toda la noche me la pase llorando abrazada a ella, me consoló y alentó.
Mis ojos ardían. Cierta parte de mi quería dejar de estar triste, pero la otra parte quería llorar y estar triste.
Al verme en el espejo esa mañana pude notar lo mal que me veía. Charlie salió por algo de comer pero prometió volver rápido, no quería dejarme sola. Mire mi teléfono e ignore el montón de notificaciones que tenía. No mire ninguna. Más tarde cambiaría mi número. Cerraría todo.
Comí con Charlie en silencio. Ella me ayudó para cambiar el número de mi teléfono y a las únicas personas que les pase el número fue a mi padre, hermano, Helena, abuela y a las chicas. Esa misma tarde llamé a mi hermano y su voz me quebró más.
—Hola...
—Joder Jeanne ¿Cómo pudiste irte así? Papá esta preocupado porque no respondes los mensajes, tu carta lo dejo atónito pero la carta que tu me dejaste, joder.
Hubo un silencio al otro lado de la línea. Yo no podía responder, estaba ahogándome en mis propias lágrimas al escuchar a mi hermano hablar así.
—¿Por qué te fuiste así Jeanne? ¿Por qué? Joder.
—Por la universidad... Te lo dije.
—Quería descartar aquello y llame a tu compañera. Aún te quedaba un día libre, dime que sucedió para que te fueras así.
Respire profundo tratando de tranquilizarme, debía darle una explicación coherente a mi hermano, pero lo único que logré decir fue.
—No le pases mi nuevo número a Félix.
—¿Qué?
—Te lo pido, por favor.
—¿Ahora qué pasó Jeanne? —Su voz se tranquilizó un poco, pero sentía que seguía enojado.
Al final le conté todo y la ira que ya traía consigo mismo explotó.
—¿Él hizo qué? Joder Jeanne.
—No, no hagas nada Jason. Se terminó todo.
—¿Y vas a dejar las cosas así como así?
No respondí. Estaba cansada de derramar lágrimas, estaba cansada de sentirme miserable y lo que menos quería es que mi hermano hiciera algo que se que luego se arrepentiría.
—Si. Por favor que no se entere nadie. Te lo pido. —Se escuchó un suspiro al otro lado del teléfono.
—Está bien.
Colgué y alejé mi teléfono de mi. Charlie entró por la puerta riéndose pero al ver que estaba llorando de nuevo su sonrisa se borró. Ella se acercó y me abrazó.
—¿Por qué está llorando? —Me aleje y limpie mis lágrimas al escucharlo en la entrada de la habitación.
—Que te importa Ethan —respondió su hermana. Él levantó las manos en señal de rendición y se fue.
Sabía que la primera semana sería duro pero acepte que todo pasa por algo y debía acostumbrarme a las cosas malas que me sucedían, debía de aceptarlo.
Dos semanas después
Mi corazón seguía doliéndome al recordar lo que pasó, pero ya me había acostumbrado a aquel dolor.
No me sorprendía que Félix no se hubiera plantado al otro día en mi puerta pidiendo perdón.
Seguí con mi vida, era lo único que me quedaba por hacer.
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Amor sobre hielo
RomanceJeanne pasa un año más interesante que los anteriores. Se da la oportunidad de experimentar algo nuevo en su vida porque esta cansada de la rutina, pero lo que más va a tratar de asimilar es que se enamoro. Ella vive con su hermano Jason junto con s...