__Buen día, conejito- saludó el albino.
Se tomó del cuello contrario y lo atrajo para darle un largo y cariñoso beso.
Había pasado una semana desde que despertó de aquel coma, todo iba mejor ahora que habían conseguido información acerca de los héroes que llegarían, aunque a decir verdad les traería problemas, por lo que decidió hacer un equipo más completo.
__No creo que debamos hacerlo ahora- susurró el albino en su cuello mientras sus manos acariciaban sus muslos- todos nos esperan abajo.
__¿Y por qué no paras?- preguntó y acarició el largo cabello de su pareja.
__¿Cómo podría?, Si ahora mismo te ves muy bien.
Shigaraki subió a sus labios y comenzaron otro beso, está vez uno más salvaje.
__¡Buenos días!- Toga había entrado pateando la puerta y lanzando confetis al aire- eh... ¿Por qué siempre soy yo?
Shigaraki simplemente gruñó y miró a la rubia.
__Ya entendí, ya entendí, perdón... Pero date prisa...
La puerta se cerró y él rió para dejar un casto beso en la mejilla contraría.
__Vamos, debe ser importante si Toga lanzó confetis.
Shigaraki le dió una rápida mirada antes de hundir el entrecejo.
__¿Si sabes que día es hoy?
__¿Martes?
__No, Izu, es quince.
__¡Ah, hoy me pagan!- exclamó con felicidad y el mayor posó su mano en su cabeza.
__¿A caso se te olvidó?
__No lo sé, ¿Que debí olvidar?
__Hoy es tu cumpleaños, Zuzu.
Tomó su teléfono y miró la fecha.
Quince de julio, su cumpleaños.
__Oh... Si...
__¿Pasa algo?- preguntó el mayor y se acurrucó a su lado- el año pasado estabas muy feliz por eso.
__Lo sé... Es solo... Que está vez se siente diferente... No se siente como los otros años...
__Debe ser la situación en la que estamos... No te preocupes, te juro que este va a ser el mejor cumpleaños que puedas tener.
__¿Lo prometes?
__Totalmente- comentó y volvió a besarlo- vamos, tus padres te tienen una sorpresa.
Se levantó y colocó un short antes de salir de la habitación con su pareja.
Más confeti cayó sobre ellos.
ESTÁS LEYENDO
CIEGAMENTE
FanficÉl sólo quería saber porqué lo odiaba, hizo una simple pregunta, nunca imaginó que terminaría así. Lo último que el pecoso recordaba era haber tomado la iniciativa de hablar con su amigo de la infancia, preguntó la razón por la qué lo trataba de tan...