Se había tomado el tiempo de mostrarle las instalaciones al nuevo teniente. Cada lugar y cada zona, desde la más grande hasta la más pequeña, haciéndole un tour bastante duradero.
Christian Makarov se mostraba muy simpático y amigable con Jhonny, cosa que era de su agrado. Pues, quizás podían ser buenos amigos.
Aun que, claro, le era extraño que fuera a reemplazar a Simon por poco tiempo.
Bueno, el general tenía sus razones, así que no dijo nada. No tenía por qué quejarse. Eso y que Shepherd no estaría tan feliz si llegaba a decir comentario alguno.
– Y bien. Por último, ésta será tu habitación según Price. Tienes donde poner tus cosas y también puedes pedir una llave para cerrarla cada vez que no estés.
Ambos hombres habían entrado a aquella habitación, Christian dejando sus cosas sobre aquella cama, observando la misma, al igual que su al rededor, para luego apoyar su cuerpo contra la cómoda de la habitación, cruzado de brazos, sonriente.
– Gracias por guiarme, Soap. Creo que ahora no me perderé en caso de caminar por la zona. – Rieron con suavidad. – Y espero poder ser un buen teniente, para los demás, y sobre todo para ti. Es que, me caíste bien. – Su sonrisa de hizo más grande aún, sobre todo porque Jhonny también había sonreído.
– Tú también me caíste bien, y estoy muy seguro que serás un buen teniente, no hay dudas de eso. Y si bien estoy seguro que los demás estarán felices con tu trabajo, lamentablemente aún no estaré activo. Voy a reintegrarme junto a Simon... – Pensó unos segundos al haberlo llamado así, incluso notó la expresión del otro. No era común decirle su primer nombre al teniente. Nadie le decía así.
– ¿Simon?.
– Sí... Es que, me acostumbré a llamarlo por su primer nombre. Ghost sólo me lo permite a mi, además de a Price, claro, ya sabes, lo del accidente... Y ésas cosas. – Rió algo nervioso, pues, lo que menos quería era levantar sospechas de que tenía un romance con Ghost.
– Oh, ya veo. Supongo que se hicieron buenos amigos luego del accidente. Eso está bien. – Nuevamente sonrió. – Espero que el teniente Riley se sienta satisfecho con con mi trabajo. Tengo entendido por una amiga que Riley ha dejado la vara muy alta, así que, me voy a esforzar por impresionarlo.
– No por nada Ghost es considerado el mejor y es el favorito de Price. – Sonrió ante aquello. Pues, tenía razón al decir que era el mejor y el favorito de Price... Bueno, también era su favorito y había confirmado que podía trabajar a la perfección a su lado. Se complementaban muy bien. – En fin, si quieres te dejo acomodarte y ya luego-...
– ¿Por qué no caminamos juntos por los exteriores?. Y así también me muestras los campos de entrenamiento, y la perrera sobre todo...
Veía aquella sonrisa como si se hubiese ganado la lotería.
Había quedado en ver a Simon, pues pasarían parte del día juntos, tal lo acordado por ambos anoche. En unos veinte minutos tenía que ir a buscarlo, pero, ¿qué tenía de malo salir a caminar con Chris?. Sería un ratito y Simon ni si quiera contaría los minutos. Eso y que estaba ayudando a su nuevo teniente a conocer las instalaciones. No podía negarse y quedar mal delante del otro.
Sin olvidar que le había insistido a Price para hacer alguna actividad y ésta misma se le había adjudicado.
– ¡Está bien, vayamos a los exteriores!. ¡Hay mucho para mostrarte, sin duda!. – Su sonrisa se hizo tan grande como la suya, saliendo ambos de allí mientras conversaban juntos y así podían recorrer los exteriores. Era cierta la parte de que tenía que conocer los exteriores. Tanto los campos de entrenamiento, la perrera, el campo de tiro, las pistas de aterricaje... Sí que era mucho y estaba dispuesto a ayudarlo.
