Parte 335: Golosina Siniestra

40 4 0
                                    

El combate entre Nilah y Zeveda continuaba, siendo un poco de diversión entre tanto intento de asesinato por parte de trolls, chamanes, piojos y dioses.

Aunque Yuumi no pudo evitar notar que la pequeña Annie se dirigía a unos arbustos algo alejados, sola y sin haber dicho nada.

Su instinto le dijo que la siguiese.

"Annie, no te alejes"

"Eres una pesada, Yuumi"

"No soy..."

"¿Qué hubiese pasado si solo tenía que hacer pipí?"

"Pero..."

"Te hubiese pillado infraganti y quedarías marcada para siempre como una gata pervertida y sucia" - le acusó tajantemente

"¡Yo no soy pervertida!"

"Eso díselo al fantasma con el que hacías manitas"

"¡Yo no..."

La gata no podía evitar enojarse, pero sabía que si se salía de sus casillas le estaría dando la victoria de un modo u otro.

Así que simplemente tomó un poco de aire.

"Annie, es muy peligroso que vayas sola"

"Yo soy peligrosa"

"Y por aquí hay muchos peligros"

"Insisto, yo soy peligrosa"

"Dime, ¿qué estabas haciendo?"

"Buscar algo rosa"

"Bus... ¿buscar algo rosa?"

"Sí, me pareció algo rosa moverse... Zeveda tiene cosas rosas en la ropa, ¿y si se trataba de otro demonio haciéndose pasar por Zeveda?"

"Neeko no era un demonio"

"Neeko no era un demonio"

"No me repliques"

"Entonces ayúdame a buscar y deja de quejarte"

"Pero algo rosa... en Freljord..."

"Literalmente acabamos de ver a una tipa muy agresiva vestida con, adivina, rosa"

"¿Pero dos personas que visten el color rosa?"

"Todo es posible"

"Annie..."

"¿Has escuchado eso?"

"No he escuchado nada"

"Parecía una voz que decía que no era... que no era..."

"¡No soy rosado!"

Una especie de pequeño vendaval helado se hizo presente, con una criatura descendiendo de uno de los árboles de un salto.

Era un ser similar a un esqueleto, solo que hecho de hielo, abrigo negro con pieles y brazos y piernas similares a bastones de caramelo.

Y una guadaña hecha de hielo.

"Saaaludooss... jejeje... viajeros..."

"Te lo dije, algo de color rosado"

"Ha dicho morado, Annie, morado, no... rosa..."

"........"

"Disculpe..."

"No, no, continuad... mientras tanto yo solo..."

"¡Uaaarrrhh!"

El atacante usó su Terror Gélido, desplegando una especie de brisa que dejó a ambos campeones con sus pies helados al suelo.

Libro se libró... nunca mejor dicho... y de una embestida pudo liberar a su compañera.

"Annie, ¿estás bien?"

"Tengo los pies helados..."

"Y no será lo único helado, mocosa..."

"¿A quién llamas mocosa?"

Annie usó su Incinerar para derretir el hielo del suelo con cierto enojo.

El ser helado dio un salto para escapar de las llamas, aunque no es que luciese excesivamente preocupado por estas.

"Así que una usuaria de fuego..."

"¿Quién eres tú? Bastón de caramelo parlante"

"Jajaja..."

"¿Te hizo gracia?"

"No, es más bien una condición... verás, estoy enfermo..."

"¿No eres un demonio?"

"Qué va..."

"Annie, no deberías de..."

"Nací en el antiguo Freljord, con un poder mágico muy fuerte, pero un cuerpo demasiado débil para cualquier cosa..."

"¿Ni siquiera jugar?"

"Ni siquiera jugar... y entonces él apareció..."

"........"

"Me permitió... vivir..."

El monstruo de hielo iluminó con un color azulado sus manos, lanzando desde estas una especie de cuervos helados.

Annie destruyó uno de ellos, mientras que otro impactó en el suelo.

El suelo se congeló de forma bastante agresiva, dando una idea de qué hacían.

"¡Annie! ¡Ten cuidado! ¡Si te tocan te..."

"¡Ya lo sé! ¡Déjame pensar! ¡Yuumi!"

"¡Pero!"

"¡Que te calles!"

La pequeña alzó su Escudo Fundido, lo cual acabó con los dos pájaros restantes.

"Tu muerte será hoy, pequeña... a manos de una Golosina muy siniestra..."

"Pues la tuya será a manos de Tibbers"

"¿Tibbers? ¿Qué es un Tibbers?"

Los Viajes de Nautilus Vol.2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora