Parte 217: El Forjador

44 3 1
                                    

Ser... ser forjador me gusta bastante... es tranquilo, puedo trabajar a mi ritmo, con dedicación... no soy un luchador de primera línea... soy más apoyo técnico... o algo así...

He seguido las enseñanzas que dejó escritas el Maestro Doran hace mucho... pero lamentablemente no he alcanzado su nivel ni su...

El pequeño yordle, con lentes similares a las que usaba Yi, se sobresaltó cuando llamaron a su puerta. Estaba muy concentrado.

Más se sorprendió al ver a Yi nada más abrirle.

"Ma... Maestro Yi..."

"Saludos, Lui"

"¿A qué se debe tal honor? Por lo general se mantiene alejado de la armería..."

"Necesito que me acompañes"

"Oh... oh... es por... ya sabe..."

"Sí, hay alguien a quien quiero que conozcas"

A veces pienso que el Maestro Yi tiene demasiada fe en mi...

No me considero alguien torpe en su trabajo, pero... pero no soy Doran y arreglar las lentes del Maestro o que me tome por un experto quizás...

¿No es estimarme demasiado?

Al fin de cuentas pocas veces uno pue... pue...

Se quedó completamente inmóvil en cuanto a vio frente a él a los tres kinkou.

"Shen, este es Lui, nuestro forjador"

"Es un gusto conocerte..."

"Fue él quien encontró el artefacto en cuestión y..."

"........"

"Lui, ¿te encuentras bien?"

"Sa... saludos... Maestro Shen, es un honor conocerle en persona..."

Lui tenía serios problemas de nerviosismo, en especial cuando se trataba de gente que él consideraba importante. Como el Maestro Wuju o el Ojo del Crepúsculo. 

"Yinfeng... Akali... quedaros aquí..."

"¿No quieres que entremos?"

"Podría ser peligroso"

"Es broma, ¿no?"

"........"

"Shen..."

"Akali, no te vendrá mal practicar un poco cómo tener paciencia... quizás Yinfeng pueda enseñarte algo de eso..."

"Eso ha debido de doler"

Akali dirigió su mirada hacia Jun, quien notó en ella cierta molestia por sus palabras.

Por otro lado Lui guió a ambos maestros hasta el corazón del templo, custodiado por diversas puertas y mecanismos místicos.

Y finalmente encontraron... las hoces... unas hoces rojas que emitían una extraña aura...

"Yi... esto es..."

"Sí... recurrí a Lui para que lo examinara y pensó igual que yo..."

"Bueno... quizás errara..."

"No... no erraste" - le animó Yi dándole una palmadita en la cabeza - "Shen, esta de aquí es un arma darkin..."

"Así que había otra en Jonia..."

"Que yo sepa existieron tres... una está en posesión de Kayn, otra junto a Varus y... luego está la que se haya frente a nosotros..."

"Emite un pulso muy fuerte..."

"Sí, pero no tanto como para afectar a mis aprendices"

El Maestro Yi dijo que ese arma influenciaba a otros con deseos de poder y... más cosas... aunque yo no noto nada... a saber por qué...

Quizás no soy el tipo de sujeto que busca...

"Lui..."

"¿Sí? Maestro Yi"

"¿Serías tan amable de describirle a Shen lo mismo que me dijiste?"

"No... no sé si me acordaré del todo..."

"Tómate tu tiempo"

"Pues... son dos hoces, y por su diseño tienen más de dos siglos... probablemente fueron creados en Shurima..."

"Tiene unas marcas..."

"I... idioma Targoniano..."

"........"

"Según... según la información que me dio el Maestro Yi... yo diría que no es una falsificación..."

"Y se encontraba aquí abajo..."

"Antaño estas tierras fueron testigo de muchas batallas de los Wuju" - explicó Yi - "Y entre tantas armas... estas pasaron desapercibidas..."

"Interesante..."

"No podemos dejar que caigan en malas manos"

"Sí... y eso incluye a cierta ninja que conozco..."

En el exterior Jun se encontraba hablando con la joven Yinfeng, mientras que Akali simplemente esperaba a Shen.

Ninguna de las tres se percataron de la presencia de Ren, oculto en la lejanía, pero muy atento a lo que estaban hablando.

Los Viajes de Nautilus Vol.2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora