Capítulo 21

284 26 1
                                    

Sus ojos, estaban muy tristes. Él me sonreía a pesar de que estaba triste. ¿Por qué no soy capaz de hacer lo mismo?..
Otra ridícula lágrima resbala por mi cara - Oh, precioso... - Él se ha vuelto a dar cuenta... - ¿Quieres venir aquí? ¿Quieres un abrazo?- Antes de que pueda hacer algo él se acerca. Lo siento... De verdad quiero un abrazo suyo, perdón.
- Perdón...
Articulo de la mejor manera que puedo. Lo siento.. Discúlpe.
- Lindo..lo siento mucho. Perdóname por no haber preguntado antes, si tan solo lo hubiera hecho... Tú - N-no... Por favor.
El Joven Min se está echando la culpa por mi maldito error. La responsabilidad es toda mía.
Yoongi siempre me abraza para que me sienta mejor. ¿Servirá si yo hago lo mismo?.. En sus ojos puede verse que está triste y molesto.

Aprieto los ojos y muevo mis brazos lentamente hasta que rodeo su figura - P-por favor, no es s-su culpa - Perdón, perdón, perdón, perdón, perdón, perdón, perdón, perdón, perdón, perdón, perdón, perdóneme.
- Vamos a salir mañana - Mañana es sábado... Si ellos se enteran que yo dije algo... - Voy a cancelar mis clases y te voy a llevar a un lugar en donde pueden apoyarnos con esta situación.

El Joven Min alejó sus brazos y sacó su teléfono... Por si acaso yo también alejé los míos, podría ser que ya no quiera tenerme junto a él.
Al final "agendó una cita" con un terapeuta... Ni siquiera sé qué es...pero suena a que será costoso; no entiendo por qué sigue gastando en mí después de todo esto.
Me invitó a dormir con él, pero en su propio cuarto, configuró la puerta para que también se desbloquee con mi huella; me dijo que si me sentía inseguro estando en el cuarto que él me asignó, podía cambiarme al suyo...

No entiendo por qué no me está castigando. Lo engañé, fingí que no pasaba nada cuando cada semana me dejaba tocar por ellos...

Los guardaespaldas siempre se vieron felices por tenerme sumiso...ellos tienen el comportamiento que yo esperaba tuviera el Alfa que me compraría; tuve mucha más suerte, supongo. _Suerte que no mereces, maldita puta_

_________
Desperté con el joven Min llamando mi nombre mientras separaba mechones de mi pelo.
Me bañé junto a él y me vestí con él; hay un poco de mi ropa en su cuarto y un poco de la suya en el otro, no era demasiado práctico tener que salir con prendas arrugadas para volver a cambiarnos cada martes.
Bajé a desayunar después de semanas de solo ir por una comida de vez en cuando.

Cuandi ví a Hana sirviendo la comida, pude darme cuenta de que no le habían dado suficientes píldoras para curar los moretones de los juegos del día anterior; lo ha cubierto con maquillaje, pero no lo hizo completamente bien.
La mayor parte de las veces, si no me usan a mí, la usan a ella y cuando nos llevan a los dos, siempre ruega para que las cosas más sádicas le toquen a ella; de verdad que intenté muchas veces que las cosas fueran mitad y mitad, pero siempre pidió que no me azotaran igual que a ella...
Yo no soy quien ha sufrido.
No puedo quejarme.
No tengo el derecho de hacerlo.
Ahora que lo pienso así, no sé por qué lloré ayer.
Que estúpido.

Una vez terminamos de desayunar, fuimos hasta la entrada para subir a la limusina.
En cuanto se abre la puerta mi cuerpo comienza a temblar. Ahí están ellos, de pie frente a la puerta; tiemblo, pero no soy capaz de dar un paso más al frente. Estoy seguro de que pueden verme, ambos me ven y hablan entre ellos; el pelinegro me señaló.
- Vamos, lindo... ¿Ocurre algo? - Niego. ¿No debería saber que los delaté verdad? No podrían saberlo ¿No? - ¿Estás seguro? - Yoongi comienza a buscar algo con la mirada - S-si - A pesar de que no puedo respirar tranquilo y de que mis manos me lastiman, no debo aumentar el problema para el joven Min.
Camino hasta el vehículo - Amo Min... ¿Va a ir a la academia acompañado esta vez? - No voy a la academia hoy. Vamos, lindo, pasa - El pelinegro se interpuso entre la puerta y yo - Permítanme ir de este lado, por su seguridad.
Sin esperar a una respuesta sube antes que yo.
Mis piernas dudan mucho para entrar, me tengo que sentar a su lado...

_____-Hola, juguetito, hace mucho que no venían ambos a jugar ¿No te parece? - Conseguimos esta sorpresita y para tú deleite, Hanna se ofreció a probarla por ti. Seguro que te encantaría usarla a tí también, pero por el momento, solo podrás ver cómo se usa - Aunque no te vamos a dejar desatendido, claro - Yo voy a usarte, por atrás, para que no tape tu vista al gran espectáculo- ... - Saluda antes de que comencemos, asquerosa mierda - Jo-joven Jimin... buenas tardes... - Amordázala ya, vamos a empezar-_____

En mitad de ese día me confesó algo "¿Sabes que tú eres mi favorito? Me encanta que pueda hacer lo que quiera contigo; ella no aguanta mucho, se pone a gritar en cuanto algo le duele, en cambio tú.... Me excita no saber cuál es tu límite, juguetito." Él, a pesar de que no golpea tanto como el otro, me asusta más.

El joven Min entra después de mí y coloca su brazo al rededor de mis hombros. Al igual que siempre, cierro mis ojos para no ver el camino.

- Llegamos, precioso. Te pido, por favor, que cuando entres, respondas con la verdad todas las preguntas que te hagan ¿Si? - Asiento al tiempo en que abro mis ojos para conectarlos con su preciosa mirada verde - Bien, bonito, vamos.

El guardaespaldas pelinegro me "ayudó" a bajar mientras Yoongi bajaba por el otro lado - ¿Qué es este lugar, juguetito? Debe de ser importante para que el Alfa con principios cancele las clases en la academia... ¿Es acaso acerca de ti? - No me da la voz ni para negar ni para afirmar.
-Vamos, Jimin.
Me agacho en forma de reverencia, pidiendo una disculpa por no contestar y me alejo.

El joven Min explica que solo podemos entrar él y yo a este lugar... "Lo pedí de esa manera para que no tuvieras que dsr explicaciones innecesarias" susurró antes de cruzar una pesada puerta de metal frío y gris.
Dentro solo se veía un extenso cuarto blanco que conectaba a varios corredores. La decoración son solo plantas y ventanas (que muestran aún más plantas). El aroma es parecido al del limón... es como el aroma que se percibe de los omegas sadistas... Recuerdo que en la institución había un grupo específico para ellos y eran muy extraños, no les temían a los golpes de los uniformados, no a menos que fueran tan fuertes como para dejarlos inconscientes...

Al final tú eras mi propósito. Yoonmin omegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora