Por querer probar la suerte, aposté todo lo que tenía.
Tiré los dados, así, probando el amargo sabor del fracaso.
Me desplomé en la temeraria soledad,
y vagué descalzo por senderos apedreados de desesperanza,
Lamentando cada herida en cada paso;
Dejando detrás un rastro de sangre, sudor y lágrimas.
"Si alguna vez confié en su palabra, hoy me arrepiento.
Si alguna vez volví a tomar su mano, hoy me arrepiento.
Si alguna vez dije seguir amándolo, hoy me arrepiento."
El eco es cada vez más fuerte.
Deambulo sin destino alguno,
A penas, y aprecio el sol ocultarse en el horizonte
y la briza salada bailando en mi cabello.
Veo su brillo reflejado en el océano
Tan vivo e incandescente,
Yo, camino hipnotizado por su presencia,
Mientras el mar baña mi cuerpo y alma en su vaivén
Desintoxicando cada parte de mi ser al sus olas romper.
La corriente se ha apoderado de mi ser
Mientras me sumerjo lentamente...
