6:46 de la mañana,
29 de septiembre, es jueves,
Sentado de rodillas en mi cama,
Me pregunto si me extrañas como yo te extraño a ti
He dado vueltas recorriendo mi habitación entera,
En cada rincón buscando alguna señal, alguna respuesta,
Ignoro el celular para fingir que ya no me importas.
Tengo en silencio tus mensajes, por si algún día decides volver y fingir que jamás te esperé.
No entro a redes sociales por no ver lo que compartes,
Sobre todo, no he salido de casa por miedo a encontrarte en la calle.
Aún recuerdo el día que entre lágrimas te recite un pequeño poema que había escrito sobre lo que había empezado a sentir, decía algo así:
"Recuesta tu cabeza en mi pecho, cariño, yo te escucharé y cuidaré del dolor que te atormenta. Recuesta tu cabeza en mis piernas, cariño, yo protegeré toda la luz que aún te queda"
Pues en algún momento del antes y el después llegué a pensar que esto podría ser algo real, resultó ser solo una fantasía que tú alimentaste cada día en cada videollamada de mediodía hasta la media noche del siguiente día.
6:52 de la mañana,
Es 29 de septiembre,
Han pasado casi dos meses,
La pregunta aún vaga por mi mente,
¿Me extrañas como yo te extraño a ti?
Espero y sea un "sí."
