Capítulo 9

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Al llegar al remolque Eddie soltó un par de preguntas a su tío, pero todas fueron ignoradas, el mayor no tenía ganas de hablar y mucho menos de dar explicaciones sobre su vida privada.

-¿por qué tanto misterio? -el castaño insistía-

-Eddie ya te dije que no pienso hablar del tema

-¡es que no entiendo! -su desespero era evidente, Eddie estaba creando un escenario dramático en su cabeza, solo podía pensar en que su tío era un asalta cunas- ¡PODRÍA SER TU HIJA!

-¿qué estás insinuando? -la cara del castaño se empalideció, había explotado sin querer- ¿que un viejo como yo está con una niña como Harper?...¿sí? ¿eso es lo que piensas?

-yo no.. no quería dec...

-¡BASTA EDWARD!

-lo siento -susurro-

-Eddie...-el mayor lo miró con arrepentimiento, no solía gritarlo a menos que fuera necesario- entiendo que tienes muchas preguntas, pero no es el momento, quiero ir a descansar

-entiendo -respondió indiferente-

-regreso en dos días y prometo contarte toda la historia -el castaño asintió- solo no pienses cosas que no son ¿de acuerdo?

-si tío, lo siento, es que todo es confuso

-¿en verdad crees que alguien como Harper se va a fijar en un anciano como yo? -dijo con cierta jocosidad-

-casos se han visto -se miraron como dos amigos cómplices y las carcajadas invadieron el remolque dejando la tensión a un lado-

Con un parte de tranquilidad que le había dado su tío, Eddie pudo ir a la cama más sereno, pero aun así no dejaba de pensar en lo que había ocurrido, la imagen que más se repetía en su mente era la de Harper saltando a los brazos de Wayne, acaso ¿eran celos? pensaba un tanto nervioso, temía despertar algún tipo de sentimiento hacia la pelinegra.

-Estas mal Eddie, muy mal -dijo mirando el techo mientras su mente reproducía imágenes de Harper- ¡Ya basta! sal de mi cabeza Turner

El sueño terminó ganándole a Eddie quien se resistía a dormir por estar pensando en las posibles teorías sobre el extraño lazo que unía a su tío con la pelinegra. Al despertar se levantó para ir a la cocina y preparar algo de desayuno, sabía que Wayne ya se había ido porque le dejo una pequeña nota que decía "regreso en dos días, por favor no te metas en problemas y cuídate muchacho".

De repente el teléfono sonó y le parecía extraño, ese aparato no emitía ningún sonido a menos de que llamaran a Wayne para avisarle que Eddie se había metido en líos o por el contrario la llamada era para indicarle al castaño que algo le había ocurrido a su tío en la planta.

-¿bueno? -respondió con temor-

-hola Ed -el alma le volvió al cuerpo al escuchar aquella dulce voz, no era nada de qué preocuparse-

-¿Chrissy? -agradecía estar solo porque de seguro su tío lo molestaría por estar sonriéndole al teléfono- ¡Hola! ¿cómo estas?

-bien...¿es un poco temprano no? -se escuchaba algo avergonzada- lo siento, es solo que quería saber...

-saber ¿qué?

-si tienes planes hoy es que me gust..

-no tengo nada planeado, ¿qué te gustaría hacer? -respondió por impulso y algo emocionado-

-mis padres no están y no me gusta quedarme sola, así que estaba pensando en ir a la feria ¿te gustaría acompañarme?

-¿a qué hora paso por ti?

Thunder | Eddie MunsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora