Capítulo 60 FINAL

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Nadie le dijo a Harper que el proceso de recuperación de Eddie sería una verdadera tortura. Todos imaginaban que era cuestión de días para que el castaño recordará lo que había pasado en los últimos años, pero no fue así. Su mal humor hacía que la convivencia entre la pareja fuera un caos.

Pocos días después de despertar y mostrar señales de recuperación, Eddie fue dado de alta y de inmediato fue llevado a Nueva York junto con Harper para reencontrarse con Wayne; después de insistir por fin el anciano obtuvo el permiso para reunirse con su muchacho.

La estadía fue corta, pero suficiente para que el mayor compartiera con su sobrino y de paso ayudará en el proceso de recuperación de memoria. Todos pensaron que Eddie le creería a su querido tío, pero la realidad fue otra. Se negaba siquiera a pensar que había podido graduarse y mucho menos que su banda se había desintegrado. Eso no era posible. No para Munson.

Con fotos, anécdotas y una que otra llamada de Gareth y Jeff, fueron las técnicas que utilizó Wayne para lograr que Eddie recordará un poco de su vida; pero todo fue en vano. No lo logró.

-Por lo menos inténtalo -rodó los ojos-

-¿Acaso no ves que no puedo?

-Eddie no seas grosero. Lo digo por tu bien

-Pues no te preocupes por mi, estoy bien

-Solo...solo toma la maldita pelota y haz el ejercicio

-¡Estoy harto de hacerlo!. ¡Me duele!.

-Tienes que recuperar la movilidad de tus manos o es que...¿No quieres volver a tocar la guitarra?

-Si quiero o no, es mi problema. No tuyo.

-Eddie..

-¿Terminamos? -la pelinegra negó con su cabeza pero no quería seguir insistiendo en hacer la terapia- Bien. Quiero estar solo.

Lo que algún día fue un hogar lleno de risas y mucho amor, se convirtió en un ring de box. Munson pasaba los días discutiendo con Harper por el más mínimo detalle, a tal punto de llegar a los gritos y recibir quejas de sus vecinos por los constantes insultos que se escuchaban en el interior de esas cuatro paredes.

Por más que Harper se esforzaba, parecía que todo era en vano. Su paciencia estaba llegando al límite. Al principio entendió que el proceso podría ser difícil, pero nunca imaginó que las palabras que salían de la boca de su querido Eddie la lastimaran como hace un tiempo atrás.

Las noches se convirtieron en largas conversaciones consigo misma sobre cómo podría hacer para que Eddie recordara lo más mínimo que fuera. Se culpaba una y mil veces más por no haberlos acompañado el día del accidente, aunque sabía que su presencia no cambiaría el rumbo de las cosas. Se daba golpes de pecho de solo imaginar que el castaño no cobrará la memoria y siguiera negándose a la idea de saber que Turner llegó a tener el título de "su novia".

Extrañaba sus abrazos, sus caricias, las charlas a media noche y el esfuerzo que hacía Eddie por entender cada palabra que salía de la boca de Harper al momento de explicar la importancia de las estrellas en las galaxias. Tanto era su dolor que le costaba mirar por su telescopio porque eso solo le recordaba las ocurrencias y cientos de carcajadas que le sacaba Munson al decir que lo único que veía era un montón de puntos en el cielo, pero que si pudiera pasar un rotulador por ellos de seguro dibujaría cosas interesantes.

Extendía su mano en busca de su novio, pero al no encontrarlo se despertaba asustada. Aún no se acostumbraba a dormir en el cuarto de huéspedes y mucho menos a sentir tanto frío por la ausencia de calor humano.

Harper intentó hacer todo lo posible para que Eddie recordará, desde contarle cómo había iniciado su amistad, hasta mencionar como estuvo a punto de perder la vida gracias a la golpiza sádica que le propinó su padre. Escuchar esa parte de la historia hizo que el castaño se tensara por completo y una leve luz de esperanza brotó en el corazón de la pelinegra de solo pensar que tal vez Munson estaba recobrando de a poco la memoria. Lastimosamente no fue así.

Thunder | Eddie MunsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora