SASHA #2 [Disponible en físico]

SIETE

Sasha

-¿Estás segura?

-Sí, Sasha. Totalmente segura- contesta poniendo los ojos en blanco.

Joder. ¿Qué voy a hacer? Cinco meses. ¿Cómo lo ha ocultado tanto tiempo? Ni siquiera yo o he notado y la he visto desnuda. Pensé que había engordado un poco.

-¿Pero está bien? No se te nota.

-Sí, el bebé está perfectamente. La doctora dijo que era normal que no se me notara mucho, soy pequeña y hay mujeres a las que les pasa.

-Pero son cinco meses de embarazo. Deberías tener la barriga grande.

-No en mi caso. A algunas mujeres no les crece hasta el final, a otras ni siquiera les llega a crecer. Además, he estado usnado ropa más ancha. Nadie se ha dado cuenta.

Suspiro. Voy a ser padre. Nina está embarazada de mi hijo.

-¿Por qué no lo dijiste cuando te enteraste?

-Porque necesitaba tiempo para procersarlo y pensar en algo.

-¿Pensar en algo? ¿En qué Nina?

-Pensar en cómo escapar antes de que Artem se enterase y...

No termina la frase. Mi piel se eriza.

-¿Y qué?- pregunto con los dientes apretados.

-Y se volviera loco.

-¿Te ha golpeado alguna vez?

Niega con la cabeza.

-No lo ha hecho.

-Pero podría- la interrumpo.

Asiente. Joder. Tengo que sacar a mi hijo y a Nina de esa casa. No es seguro para ellos.

-Voy a pensar en cómo sacaros de Rusia, nos iremos lejos de aquí y esta vez no vas a negarte.

-No lo haré, ahora tengo que pensar en mi hija también.

-¿Hija?- pongo las manos en su pequeño vientre- ¿Es una niña?

Nina sonríe y asiente enérgicamente. Voy a tener una principessa. Una niña.

-Voy a llevarte lejos, piccola. Papá os pondrá a salvo a mamá y a ti- le hablo a mi hija en el vientre de su madre.

Nina acaricia mi cabeza con dulzura. Apoyo mi frente en su abdomen, puedo sentir a mi hija moverse. Le doy un beso, uno largo. ¿Cómo no me di cuenta antes del pequeño bulto? Cazzo. Aquí está mi hija, mi bambina. Y ahora tengo que dejar a las dos mujeres de mi vida en casa de otro hombre, un hombre que no soy yo, una casa que no es mía. Voy a pensar en algo para llevármelas. Una bombilla se enciende en mi cabeza.

-Texas- digo.

-¿Texas?

-Es perfecto, es territorio de los moteros, el MC Grey Wolf. Los lobos no tienen negocios con la bratva ni con la mafia italiana.

-¿No se enfadarán si entramos en su territorio?

Niego con la cabeza. Me pongo de pie, acuno la cara de Nina entre mis manos.

-Es perfecto, conozco al líder. Weston Sandler, vive enn Jefferson, mi tío quiso hacer negocios con él una vez, pero se negó. Cultivan su propia droga, no necesitan de nadie.

Nina asiente.

-Entonces lo haremos, iremos a Texas.

-Joder, te amo. Vamos a ser felices, te lo prometo.