SASHA #2 [Disponible en físico]

NUEVE

Sasha

Estoy comenzando a desesperarme. Nina no contesta a mis mensajes. Llevo una hora esperando en nuestro lugar de siempre, son casi las diez de la mañana, nuestro avión sale en tres horas. Ya deberíamos estar en el aeropuerto. Intento llamar a Nina otra vez, la llamada vuelve a desviarse al buzón de voz. Cazzo. La última vez que no contestó a mis llamadas se había prometido a Sokolov. Abro la puerta del coche y sqlto de él, camino rápido hasta la casa de Artem, me importa una mierda todo. Algo va mal, lo sé. Nina ya debería estar aquí. Pulso el botón del interfono.

-Casa Sokolov, ¿en qué puedo ayudarlo?

-Busco a Nina.

-La señora Sokolov no se encuentra en casa.

El miedo corre por mis venas.

-¿Dónde está?

-Lo siento, señor. No tengo autorización para dar detalles.

-Joder, dime ahora mismo dónde esta o entraré en la puta casa y te arrancaré el corazón del pecho.

-Se-señor, lo siento...

-Dímelo, ahora.

-Está en el hospital. La señora sufrió una caída por las escaleras ayer.

Mi pulso comienza a palpitar, el corazón amenaza con salir por mi boca. Mi mujer, mi hija... Salgo corriendo hacia mi coche, cuando estoy dentro de él, llamo a Alek. Contesta al primer toque.

-Alek, ayúdame.

-¿Qué ocurre? ¿Nina y el bebé están bien?

-No lo sé, cazzo- digo llorando.

-Sasha cálmate, dime qué ha pasado.

-Estaba esperando a Nina para irnos, no ha llegado y he ido a su casa a buscarla. Pero allí tampoco estaba, un empleado me ha dicho que, ayer, Nina se cayó por la escaleras y estaba en el hospital. Necesito saber en qué hospital está.

-Voy a averiguarlo. Te llamo en un momento.

-Gracias, primo. No tardes, por favor.

-Lo haré lo más rápido posible.

Cuelgo la llamada. Los nervios me están devorando, tienen que estar bien. No va a pasarles nada. Por favor, Dios, no lo permitas. Son inocentes, no han hecho ningún mal a nadie. Los minutos siguen pasando muy lentos, no tengo noticias de Alek. Golpeo el volante con la palma de mi mano. Mi móvil suena, mis manos temblorosas atienden la llamada de mi primo.

-Está en una clínica privada, te he enviado la dirección por mensaje.

-Gracias, Alek.

-Tu madre se ha enterado, va hacia el aeropuerto para estar allí contigo. Ha estado discutiendo con tu padre, Sasha... Nunca los he visto discutir así.

-Me importa una mierda, lo único importante ahora es mi mujer y mi hija.

Conecto el móvil con mi coche, la voz de mi primo se oye por los altavoces del vehículo, arranco el motor y piso el acelerador.

-Tu padre también va para allá y tu tío Alessio.

-Mierda, no los quiero aquí. No necesito que me regañen en este preciso momento.

-León y yo vamos con ellos, no te dejaremos solo.

-Gracias a los dos. Te dejo, voy al hospital.