Mix Sahaphap es un dulce y hermoso omega de veinte años, poseedor de una tierna inocencia pero también de un fuerte temperamento. A pesar de que ha tenido varios pretendientes que lo han querido poseer, él nunca ha sentido amor por ningún alfa o bet...
-Claro First, es solo que hacía mucho tiempo que no regresaba aquí y bueno, es raro-Contestó nervioso el omega mirando por la ventanilla del coche.
Dos largos años, ese era el tiempo en el que este había puesto distancia y se había ido de Bangkok, huyendo de la agonía que le suponía no poder olvidarse de Earth.
Finalmente no había vuelto al trabajo de la librería, tras aquel día pues no fue capaz de afrontar su vida como siempre había sido.
De la noche a la mañana, había recogido sus pertenencias, todos sus ahorros y se había subido al primer autobús que lo llevó a la estación de tren y de ahí había acabado en Seúl.
Nada había sido fácil pero aún así, estaba agradecido pues por suerte se había encontrado con First, un guapo alfa de veinticinco años que lo había acogido en su casa tras encontrarlo vagando por la calle.
FLASHBACK
First había salido de su turno doble en el hospital donde trabajaba como médico residente y cuando iba hacia su coche, se había topado con un olor desconocido pero muy atrayente.
El alfa entonces lo rastreó hasta que se encontró al omega caminando en círculos y casi sin fuerzas.
Este se había apiadado de él y tras subirlo a su coche, se lo había llevado a su casa y luego de una relajante ducha y un buen plato de comida, Mix ya estuvo mucho mejor.
A partir de ese día, el alfa había cuidado de él y este había descubierto que ese alfa era un ser bondadoso y amable, al cual había comenzado a querer casi sin darse cuenta, aunque nunca se había olvidado de Mix.
El omega regresaba a Bangkok, porque necesita un certificado de nacimiento, ya que el alfa y él habían decidido casarse pero además de eso, este quería buscar a su padre, que aunque llevaban años sin hablarse, necesita decírselo ya que era la única familia que le quedaba.
Cuando llegaron a su destino, el alfa aparcó su lujoso coche delante de la librería de Zee y entonces Mix se bajó y entró en ella.
Miró y acarició todo a su paso, sonriendo con mucha nostalgia.
-Hola muchacho...¡vaya!, veo que en estos dos años no has cambiado, wow, sigues igual de lindo y tierno- habló el alfa en cuanto miró al sonriente omega.
-Hola Zee, ¿Qué tal has estado?.
-Bien, me he casado.
-Oh que bien, enhorabuena-dijo Mix sonriendo nuevamente-... espero conocerle antes de irme.
Este asintió conforme y entonces echó la mano a una de las revistas de moda de una de las estanterías.
-Se llama Saint, es muy hermoso, de hecho es modelo profesional...mira este es-dijo señalando las fotos de un lindo omega castaño.
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-Oh vaya si que es lindo.
Zee sonrió orgulloso, aunque su sonrisa decayó rápidamente pues estaba algo preocupado, ya que este tenía un dilema interior por decirle o no, las muchas cosas que habían sucedido y no todas eran buenas.
-Mix, cielo, ¿vas a demorarte mucho?...el registro cerrará si no nos damos prisa- Habló entonces el novio alfa entrando al lugar.
-Oh ven First, te presentaré -dijo feliz el omega-...Mira, este es Zee, mi antiguo jefe... Zee este es mi prometido.
-Oh vaya...¿tu prometido?...wow, mu-mucho gusto- exclamó muy sorprendido el librero mientras le estrechaba la mano-...oh va-vaya, así que ahora estás prometido.
-Si-afirmó rápidamente el omega- ...Nos casaremos en un mes aproximadamente.
-Tan solo depende del papeleo-dijo entonces el alfa mirando al omega y sonriendo ampliamente.
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Ante la nueva, Zee decidió no contar nada pues su ex empleado se veía radiante junto a aquel alfa forastero, ya nada parecía quedar del abatido y destrozado omega que recordaba.
Este tenía un nuevo alfa con intenciones de boda y él no era quién para arruinar sus planes, ni tampoco su felicidad.
Finalmente la pareja se despidió, prometiendo verse en otro momento y con más calma antes de regresar de nuevo a Seúl, donde tenían pensado vivir el resto de su vida.
Zee estaba aliviado de saber que la vida había recompensado a su ex-empleado con un nuevo amor, el cual parecía haber sido la salvación para evitar que este terminase muerto de la tristeza que se había llevado a cuestas.
