Lamentablemente su lindo momento con el joven heredero no duro mucho más tiempo ya que sentía su cuerpo más pesado debido a que empezaba a dormir sobre el, así que se vio en la penosa necesidad de despertarlo para que descansará apropiadamente en su Marui, aunque apenas se movió el joven Metkayina le gruño mostrando un poco los dientes para molesta su enojo aunque a Neteyam le pareció tierno.
— Muy aterrador, ahora levántate tienes que dormír -. Dijo mientras le ayudaba a recoger sus presentes y los gustaba en un pequeño saco, aprovechaba para verlos con detenimiento y así hacer un obsequio más bonito para el menor.
Le estaba dando la espalda así que no le estaba presentando mucha atención a Ao'nung ya que aún lucía algo soñoliento así que esperaba a que reaccionará, lo que no esperaba era volver a sentir el peso del chico Metkayina sumando a sus brazos rodear su cuello en un abrazo.
— Eres cálido, quizás pueda utilizarte cómo camastro -. Dijo arrastrando un poco más las palabras debido al sueño que tenía en ese momento.
Neteyam mordió su labio para no soltar algún chillido por sorpresa,su piel contra la del menor se sentía tan cálido que estaba reconsiderando dormir ahí con el pero sería problemático si llegaban a ser encontrados así.
Estuvieron así un buen rato antes que el menor se levantará y tomara el saco con sus presentes, agradeciendo al chico Omatikaya por ayudarlo.— Descansa chico mono nos vemos mañana-. Y con eso se retiró dentro su su cápsula familiar.
— Si, Nos vemos... -.
Solo Eywa conocía la felicidad que sentía en ese momento, empezó a caminar hacia su Marui familiar y estaba seguro que tenía una tonta sonrisa por todo su rostro además que seguramente sus mejillas estaban rojas, si trato de dormir pero aún recordaba la sensación del abrazo con Ao'nung, su emoción simplemente no lo dejaba descansar, iba a ser una noche dura.
Efectivamente no durmió lo suficientemente para ser sinceros, aunque pudo levantarse un poco más tarde debido a que no tenía tareas pendientes por el momento asi que aprovechó la mañana para reunirse con la chica Metkayina, habían acordado en que Tsireya le diría como es que debía tejer su obsequio para Ao'nung.
Ambos chicos caminaron adentrándose en el bosque para encontrar un lugar que fuera tranquilo y que estuviera fuera de la vista del chico Metkayina y de la gente en general, Neteyam deseaba que fuera una sorpresa, quería poder entregárselo de una manera especial.
Empezaron a mirar todas las cuentas y piedras que ambos recolectaron el día anterior, eran bastantes así que lo mas seguro seria que les sobraran algunas cuentas, bueno siempre era mejor que sobrara a que faltara, dentro del saco de la chica ella saco un pedazo de fibra de cuerda de algunos de los arboles de la isla, era bastante resistente además de suaves así que eran perfectas para su regalo.
Había decidido que su regalo seria un collar, así que empezó a revisar algunas de las piedras y perlas para comenzar a elegir algunas que pensó que se verían bien juntas.— Esto luce bien. Ahora tenemos que tejerlos juntos-. Tsireya dijo mientras observaba cómo Neteyam los disponía mejor para ver en qué orden los tendría.
— Está bien, creo que esto esto se vería lindo en el medio-. Dijo mientras le mostraba la caracola de mayor tamaño que la chica le había mostrado y que ambos aseguraron que le gustaría al joven Metkayina.
— Eso se vera muy lindo -. Ella asintió y envolvió lentamente la cuerda alrededor de la parte superior de la carabola. —Entonces comenzaremos allí y agregaremos más a medida que avanzamos-.
— De acuerdo, gracias-. Dijo cuando ella en le entregó la caracola amarrada a la cuerda, envolviéndolo unas cuantas veces más para mantenerlo en su lugar.

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𝐂𝐡𝐨𝐨𝐬𝐞 𝐦𝐞
أدب الهواةEywa le dio una segunda oportunidad de vida a Neteyam y se siente bendecido no hay muchas personas que han logrado atravesar el ojo de la gran madre Eywa y vivir para contarlo, pero ahora había algo que le quitaba el sueño y no era nada mas y nada m...