𝐂𝐡𝐨𝐨𝐬𝐞 𝐦𝐞

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La luz dorada del amanecer se filtraba a través de las hojas de los árboles que rodeaban el hogar de los Omatikaya, iluminando los rostros serios pero serenos de la familia Sully y los tres jóvenes Metkayina. Tras pasar varias semanas junto al clan de la selva, había llegado el momento de despedirse y regresar a las costas de Awa'atlu.

—Bueno, chicos, parece que es hora de partir -. Dijo Jake, rompiendo el silencio con un tono , aunque intentaba mantener su habitual actitud relajada, pero cualquiera que lo conociera bien podía notar el sutil matiz de tristeza en su voz.

Neytiri se mantenía más silenciosa que de costumbre, tenía el mismo sentimiento cuándo tuvieron que irse por primera vez, claro que extrañaba su adorado bosque y quería volver de manera permanente, pero pensaba en sus hijos, ellas ya estaban haciendo sus vidas en Awa'atlu y quién era ella para negarles eso, quizás más adelante, cuando ya no la necesiten ella junto a Jake podrían volver el bosque de manera permanentemente y visitar a sus hijos, no es escuchaba como una mala idea, sus ojos recorriendo los rostros de cada uno de sus hijos. especialmente Neteyam, sabía que su primogénito ya estaba dando grandes pasos en su vida, con su compromiso y el bebé en camino, y su corazón se llenaba de una mezcla de nostalgia y orgullo.

Ao'nung, parado junto a Neteyam, sostenía con nerviosismo una pequeña bolsa (que realmente no era tan pequeña) para su viaje, la gente de la aldea fue muy amable con él cuando se le entregaron, en su mayoría eran frutas, nueces, raíces y algunos pedazos de carne para calmar sus antojos, lo cual estaba muy agradecido, mientras terminaban de empacar algunas cosas sus ojos recorrían el campamento del clan Omatikaya por última vez. Aunque no había nacido en ese lugar, se había vuelto cercano a él junto con el resto de la familia Sully, y ahora, con el bebé en camino, todo parecía ser más significativo.

— Me parece extraño dejar este lugar -. Comentó Ao'nung en voz baja, girando su mirada hacia Neteyam. — A pesar de que no es mi hogar, me he acostumbrado a estar aquí con el resto de el clan -.

Neteyam sonrió, acariciando suavemente la parte baja de la espalda de Ao'nung, un gesto protector y afectuoso. — Puede ser un segundo hogar para nosotros, como tu lo dijiste podríamos hablar de eso después -. Respondió Neteyam. — Y aunque me gustaría "robarte" es momento de regresar, le prometí a tu madre que no tardaríamos mucho -. Ao'nung solo asintió aunque le dio un pequeño golpe en el hombro por su comentario tan descarado, difícilmente su madre les permitió viajar y parecía que Neteyam estaba disfrutando provocarla, eso lo esperaría de Lo'ak pero no de Neteyam. 

Rotxo, que estaba al lado de Tsireya, no podía evitar sonreír de manera un poco burlona pero cariñosa al ver a Neteyam y Ao'nung. — Se ve que no quieres dejar este lugar, 'Nungie -. Bromeó Rotxo, cruzando los brazos sobre el pecho. — Pero no te preocupes, estoy seguro de que Raykim'ite y tus padre estarán ansiosos por saber cómo estás... Y por supuesto, sobre su futuro nieto.

Ao'nung frunció el ceño levemente, aunque con una sonrisa nerviosa en su rostro. — No me hagas pensar en eso  -. Respondió, sintiendo una pequeña oleada de ansiedad al imaginar la reacción de su madre ante la noticia del embarazo, ni siquiera estaba seguro de cómo le diría a su madre mucho menos a su padre. 

— Todo irá bien -. intervino Tsireya, su voz suave pero llena de convicción. — Mamá puede ser severa, pero estoy segura que estará muy feliz y papá también -. Dijo con una sonrisa mientras palmeaba un poco el hombro de su hermano. 

Mientras los jóvenes conversaban, Norm se acercó a Neteyam y Ao'nung con una expresión seria pero amistosa. En sus manos sostenía un dispositivo portátil que había estado usando para monitorear el embarazo de Ao'nung.