Amiga de mi novia

4.6K 374 39
                                    

POV JENNIE

- Lo siento, no pude aguantar más, ya sé que me pidieron ir a descansar, pero no podía ni siquiera dormir. – Mi voz sonaba desesperado, estaba muy preocupada todavía por el estado de Rosie. Cuando me enteré que ella sufrió un accidente, no dude ni un segundo para ir al hospital, estaba con sus padres, pendiente de absolutamente todo, hasta que me mandaron a la casa para descansar, pero a decir vedad, no logré hacerlo.

Ni siquiera pude seguir hablando cuando mis ojos vieron a la persona que jamás pensé volver a ver, bueno, no tan pronto al menos. Pero vamos que existía la posibilidad, era su hermana la que estaba hospitalizada y era obvio que ella vendría, pero me agarró tan desprevenida, que solo pude susurrar su nombre.

- L-Lisa... – Dios mío, es ella, era ella.

Me quedé intacta cuando nuestras miradas se cruzaron, sé que ni siquiera es momento de pensar en esto, pero se veía tan hermosa, como siempre. Era ella, tan igual, pero tan diferente a la vez, no sé era una sensación rara. Pero no esperaba tampoco encontrar a la misma Lisa de antes, ya paso tiempo y ninguna de nosotras éramos las mismas.

- Jennie, no debiste venir tan pronto, apuesto que ni pudiste descansar. – Dijo la Sra. Manobal. Fue cuando volví a la realidad y la miré para negar rápidamente.

- Era peor para mi si seguía en casa. – Respondí y mi miraba de vez en cuando se desviaba hacía Lisa.

- Tampoco Lisa pudo hacerlo y eso que le pedimos que se tomara un poco su tiempo para descansar de su viaje. – Dijo el Sr.

- Me imagino, ha de estar desesperada por saber de Rosé, es entendible. – Concordé y ellos también.

- Iremos a buscar algo de tomar. ¿Quieres algo? – Preguntaron, pero negué agradeciendo. Entonces se fueron dejándome sola con Lalisa.

- Hola. – Salude tímidamente, y para despejar mis nervios lleve mis manos en los bolsillos traseros de mi pantalón.

Lisa me miró fijamente, sus ojos estaban rojos, imagino a causa de las lágrimas, ella ha de estar totalmente destrozada.

- Siento mucho lo que paso. – Volví a hablar yo, ya que ella aún no emitía ni una sola palabra. De pronto sentí sus brazos envolverme en un abrazo fuerte. Al principio no reaccioné, porque no esperé que me fuera a abrazar, pero pronto le pude corresponder.

- ¿Ella va a estar bien, cierto? – Preguntó entre sollozos.

- Va a estarlo amor, por favor no llores. – Respondí por puro impulso, y las ganas de abrazarla para siempre aumentaron.

Estuvimos así por varios minutos hasta que Lisa se separó abruptamente para disculparse. – Lo siento, no debí hacerlo. – Dijo y mi corazón se rompió. Solo me quedó negar para disimular mi dolor.

- Emm... supongo que no es en las mejores circunstancias, pero me alegra de volver a verte. – Comenté tratando de romper el silencio tan incómodo entre nosotras. Además de que me moría de ganas de reclamarle el hecho de haberse ido y de haberme dejado, pero aún no era el momento indicado, ni el lugar, así que me contuve.

- No pensaba hacerlo nunca más, pero debido a las circunstancias, ya sabes. – Sus palabras eran tan cortantes que, me dolían cada vez que salían, pero, por otro lado, amaba volver a escuchar su voz.

- Sí, lo imagino. – Fui corta con mi respuesta, porque pensaba que si seguía con su actitud tan ajena iba a reaccionar y empeoraría la situación.

- ¿Y Yeri vino contigo? – Cuestionó de la nada, no pensé que la fuera a mencionar, supongo que no sabe nada al respecto.

- Ella y yo-

La amo a ella, Lisa - JenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora