Siempre tú

Secreto

Izuku tenía la sensación de que le observaban durante clases y en las prácticas. Corroboró su sospecha cuando Aoyama le susurró al oído.— Conozco tu secreto...

Los días que siguieron volvieron a ser difíciles por el poco tiempo y descanso. Había vuelto a almorzar junto a Shouto y los demás en la cafetería. Iida aún se interponía entre ambos, en parte como cómplice y en parte para que Tsuyu o Uraraka no sospecharan de algún cambio.

Midoriya volvía tarde de su residencia en la agencia de Nighteye. Mirio comenzaba a fungir como un hermano mayor y eso le gustaba. Todo iba bien, aunque no podía negar que se sentía demasiado cansado y a veces estresado. Pero era un gran alivio cuando volvía a su habitación y se enviaba mensajes con Shouto.

"¿Seguro que no puedo ir tampoco esta noche?"

Izuku se sentía mal de rechazarle.

"Tal vez sea absurdo, pero..."
"Tengo la sensación de que alguien me vigila"
"No quisiera exponernos"
"Sólo dame unos días para averiguarlo"

Shouto había notado el estrés en Izuku, aunque no suponía que se tratara de eso. Investigaría al respecto.

Midoriya temía dos opciones, que Aoyama supiera sobre su relación con Todoroki o sobre su conexión con All Might. De ambas formas, sería un desastre. No ayudaba que su habitación fuese la de al lado.

Todoroki comenzó a vigilar a sus compañeros, intentando averiguar quién acosaba a Izuku. Pensó en Uraraka, pero la descartó rápidamente, no debía dejarse llevar por los celos. El resto de sus compañeras no sería capaz. Pensó en Bakugo, pero recordó cuando le golpeó en una de las áreas de prácticas, si deseara atacarle ya lo habría hecho y no creyó que se arriesgaría a más castigos. Mineta era molesto, pero no era tan inteligente ni tendría grandes motivos para vigilar a Midoriya.

Continuó dando vueltas al asunto, pero sin resultado. Tal vez lo mejor sería reunir pistas.

El clima comenzaba a variar al finalizar el verano e iniciar el otoño. Habían días calurosos, con frío o lluvia. Últimamente hacía calor a pesar de llover, incluso con tormenta eléctrica.

Shouto vistió un impermeable que Yaoyorozu había hecho para todos en el grupo y evitaran enfermarse. No lo había usado hasta ahora. A pesar de la lluvia, se atrevió a visitar el balcón de Izuku, quería saber quiénes podrían tener acceso a su habitación. Cuando llegó, observó una silueta dejando algo en el suelo, frente a su balcón. ¿Sería una bomba? ¿Alguna amenaza?

Congeló al intruso al instante, la lluvia ayudó a intensificar su quirk. Llevaba un impermeable idéntico, definitivamente era de su grupo. Frunció el ceño y le retiró la capucha. — ¿Quién eres?

Aoyama le miró con terror, después confusión. Todoroki movió el "paquete extraño" con el pie, era un plato con quesos. Estaba aún más confundida, pero lo pateó hacia los arbustos y Aoyama se quejó. Dijo algo en francés que no comprendió, pero después intentó rogar por su integridad física.— ¡Sólo quería darle un regalo a mi amigo! ¡No me hagas daño!

La tormenta era muy intensa, así que Izuku no escuchaba nada, además de que su residencia fue muy exhausta y durmió como un tronco al llegar.

— Por tu culpa Midoriya ha estado bajo mucho estrés. — Frunció el ceño. Quería corresponder a Izuku lo que él había hecho por ella respecto a Inasa.

Aoyama sonrió esta vez, como sino fuese quien estaba en desventaja. — ¿Te gusta?

Todoroki se sonrojó, pero se inclinó de nuevo furiosa y acercó al rostro de Yuga su puño derecho lleno de escarcha. — Si te atreves a molestarlo de nuevo, no seré tan compasiva contigo.

El rubio tembló y no sólo por el frío del enorme bloque de hielo donde estaba atrapado. Asintió con frenesí y Shouto le descongeló. Ambos se fueron del balcón de Izuku.

Midoriya estaba más tranquilo desde que Aoyama estuvo con un fuerte resfriado. Intentó hablar tranquilamente con él sobre el supuesto secreto que conocía de él. Sólo se trataba de parte de su pasado, sobre el bullying que había recibido de Bakugo. Aunque mintió, en parte quería molestarle por saber que le gustaba a Uraraka y en parte también a él, así que su ofrenda con quesos era una especie de cortejo. Ahora Aoyama sabía otro secreto, definitivamente Todoroki estaba enamorada de él.

Izuku le ofreció ser su amigo, Aoyama aceptó, pero ya no volvería a intentar acercarse por miedo a Todoroki.

Por su parte, Shouto volvió a las clases extra, con mucho menos estrés, pero Inasa parecía querer interrogarle.

Fueron a vestirse, esta vez con sus trajes de héroe. Yoarashi le había interceptado en el pasillo.

— El otro día ya no pude despedirme. Espero que Bakugo no te haya maltrato demasiado.

Shouto evitaba responderle, siempre le irritaba, pero esa última semana estuvo de buen humor, a pesar del asunto de Aoyama.

Cuando llegaron con los demás y esperaron la lección del día, Camie también le interrogó.

— ¿Ya estás saliendo con ese chico? ¡Qué envidia!

Inasa le miró con el ceño fruncido, esperando la negativa de Shouto, pero ella se concentraba en no responder.

Bakugo gruñó. — ¿A quién le importan esas idioteces?

— ¿Sabes que nosotros podríamos salir? Las relaciones entre escuelas no está prohibida. Además es muy romántico, como Romeo y Julieta. — Camie se contoneaba frente a Bakugo y él la empujó.

— ¡Aléjate, esperpento!

A pesar de todo, Shouto logró no hablar al respecto.