Cuaderno

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— Necesito que me cuentes todo.

— ¿Quieres hablar y no entrenar? Con esto no lograrás que tu fuego sea mejor. — Chasqueó la lengua.

Shouto le miró fijamente sin añadir más.

Bufó y buscó entre su mochila deportiva el cuaderno que le había arrebatado a Midoriya.

Comenzó a hojearlo. No era como sus otros cuadernos. Tenía uno que Bakugo había quemado, en él estaban datos de Pro Heroes y algunos de sus compañeros de la clase 1-A. Cuando lo terminó, continuó otro con más datos de sus compañeros y algunos villanos, incluidos a los de La Liga.

Tenía otro exclusivamente sobre ella, el cual sólo miró algunas veces. Tal vez debía encontrarlo, pero sería después.

Ese nuevo cuaderno nunca lo había visto. En sus hojas había información sobre el One For All, sus antecesores, sus dones. Sobre el All For One y la historia familiar de Shigaraki.

Ese día lo emplearon en que Bakugo le explicara todo lo que sabía.

Con ello, entendió demasiado. Huecos en su historia con Izuku, el porqué llegaba cansado sin decirle en concreto lo que ocurría, sus pesadillas y su necesidad por mejorar rápidamente.

De cierta manera se sintió utilizada. ¿Izuku le había usado como una distracción a todos sus problemas?

No... él no era así. Pero tal vez, inconscientemente lo fue.

Y era recíproco, pues ella también escapaba de su tragedia familiar.

Shigaraki, nieto de la maestra de All Might.

De nuevo se repetía esa historia. Esta vez no le sorprendía que Dabi y Shigaraki se encontraran, apoyándose entre sí para vengarse.

— No lo dije antes, pero Tomura Shigaraki me pidió que me uniera a él y lo rechacé. Quería superar a All Might, pero no así. Es lo que Eijiro no entiende. A veces pienso que me mira como a uno de los de La Liga y... de sólo ver su expresión cuando supo lo de Dek... Midoriya...

Se estremeció. Bakugo tenía la cabeza agachada y juró haber visto caer una lágrima hacia el suelo.

— También pude terminar así. Me asusta ver a Toya convertido en Dabi. Habría sido como él. Y me repito en mi cabeza toda la historia de mi familia, pensando en todas las posibilidades si sólo alguna cosa hubiera sido diferente.

Suspiró y le entregó el cuaderno. La letra de Izuku le entristecía. Cargó con tanto y ella pensando en tonterías como si usar o no su quirk... también sus celos.

— Lo hecho está hecho. — Gruñó Bakugo, intentando recomponerse.

Shouto asintió. — ¿Es todo lo que sabes?

— El último entrenamiento que tuvo antes de largarse, fue conmigo. — Se tensó su mandíbula al hablar.— Noté cómo recordaba cuando el imbécil de Shigaraki me atravesó y tú me salvaste de caer, mucho antes de que Midoriya lo hiciera. Le molesta eso aunque no lo diga. Tener que salvarnos y a la vez, depender de nosotros. Así que, puede que se fuera también para aprender a hacer todo por su cuenta.

Suspiró. — Tengo mucho que pensar... ¿Crees que pueda vencer sola a Dabi... sin que alguno de los dos muera?

Katsuki le miró de frente, sin respuesta. Pero le parecía igual de terca que Midoriya y sentía que estaba hablando con la pared.

Todoroki desvió la mirada.

Sin darse cuenta, al ponerse al día, habían transcurrido varias horas. Su cabeza dolía. Terminaron de hablar y ella caminó directamente a la habitación de Izuku. Encendió la luz. Todo se sentía muy diferente.

En esas paredes había ocurrido mucho. Mucho sobre la vida privada de Izuku y mucho sobre la historia de ambos.

Se sentían tan lejanos esos días.

Buscó en el escritorio, bajo la cama y llegó al armario. Habían cajas de cómics, CD's sobre programas de All Might...

Entonces lo encontró.

Una caja metálica. Si estaba sellada, significaba que había algo importante ahí. La abrió usando su hielo, congelando el candado y rompiéndolo. Estaba el cuaderno que buscaba.

Lo leyó en el suelo un rato.

Eran anotaciones sobre los quirks de Todoroki. También una especie de diario... leyó básicamente cómo se había enamorado de ella. No pudo contener las lágrimas.

Descripciones de sus momentos juntos. Más progreso en sus dones. Incluso... su investigación para hacerla sentir bien. Aquello era extraño, pues estaba muy avergonzada y ruborizada mientras lloraba. Una mezcla muy extraña de emociones.

Describió cómo se sintió al verla conviviendo con Eri.

"Tal vez... si logro vivir tanto como All Might, logremos tener una familia."

"Hoy All Might me dijo que los receptores del One For All no viven más de sus 20's. Pero él sigue en pie. ¿Por qué no me lo dijo antes?"

"All Might me contó la historia de su maestra, porqué dejó a su hijo y porqué Shigaraki es así..."

"Lo de Shigaraki sólo me recuerda a Kota. ¿Los héroes no podemos tener familia?"

"Shouto me invitó a su casa con su familia. ¡Estoy muy emocionado! Por fin conoceré a sus hermanos y creo que su padre ya me acepta mucho más."

"No sabía lo de su hermano. Shouchan ha llevado el peso de toda su familia por muchos años. Aún la veo triste."

"Algo ocurrió y Shouto es diferente. Vio el regalo de intercambio que le di a Uraraka-san en Navidad. Ni siquiera sabía qué darle. Sólo compré un Gachapon de All Might y ahora lo lleva a todas partes."

"Souchan está molesta. Espero solucionar lo del One For All y contarle todo. Aún no sé qué hacer."

"A veces pienso que estaría mejor sin mí. No quiero que All For One la alcance. No podría con eso..."

"¿Será mejor alejarme? Realmente no lo quiero, pero..."

Dejó de escribir. No había más en el cuaderno y la última hoja tenía la tinta corrida, como si hubiese llorado al escribir.

De nuevo el papel húmedo. Ella misma derramando lágrimas sobre la misma hoja.

Observó algo caer. Una carta como la del resto de la clase y sin nombre. No se atrevió a dejársela.

Lloró un momento más y devolvió todo a su sitio.

Su cabeza continuaba siendo un lío.

Siempre túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora