Siempre tú

Cometa

Izuku besó la mejilla de Shouto al despertar. Se vistió y salió de su habitación. Le envió un mensaje, diciéndole que la veía en clases y que era muy feliz de estar con ella.

A pesar de eso, no fue capaz de mirarla a los ojos. Se sentía muy avergonzado. En clases hundía el rostro entre sus brazos sobre el pupitre. En comparación a Todoroki, que estaba bastante relajada.

Los demás creían que Izuku no había descansado debido a su residencia. Aunque el ánimo de Shouto era algo extraño. Yaoyorozu estaba feliz, creía que el tiempo junto a Jiro y ella le habían alegrado.

— Deberíamos hacernos manicura. ¿Hoy están libres? — Preguntó Momo al salir de clases. Ninguna de las dos estaban acostumbradas, pero aceptaron. Izuku iría a su residencia y ella no tenía clases extra ese día.

Jiro eligió esmalte púrpura y negro. Shouto escogió un estilo francés, el cual sólo era esmalte transparente con el contorno en blanco, a diferencia de Momo que le había sugerido un tono rojo o vino, así que ella terminó eligiendo el rojo.

Momo acostumbraba pagar, ni Jiro o Shouto se negaron, ya que era bastante insistente al respecto. Había sido una experiencia nueva y aquello les hizo sentir más cercanas, pues de las chicas ellas eran las más reservadas. Sólo conversaban de trivialidades, pero era algo cómodo, sin mencionar a los chicos o hablar de rumores como acostumbraban las demás.

Mirio notaba a Izuku más tranquilo. Esta vez no deseó preguntar para no meterse en problemas como la última vez. Sólo le agradaba saber que se sentía mejor con lo que sea que hubiese ocurrido.

Recibió un mensaje de Shouto, se estremeció al instante. No dio explicaciones a Mirio, pues le había prometido no volverle a molestar con asuntos personales.

Antes de aquel mensaje, Todoroki había vuelto a la estancia. Sentía un dolor de estómago que lo atribuyó a la comida, pero que persistió después. Se molestó al notar que se había quedado sin toallas sanitarias. Al mismo tiempo le había alegrado que aquello no ocurriera delante de Izuku la noche anterior. Era muy cuidadosa en ese aspecto, pero los últimos días había estado bastante distraída. Usó la última y se debatió en si salir de la estancia, pues tampoco tenía algún analgésico para los cólicos que experimentaba.

Lo pensó un momento antes de salir. Uraraka estaba en la habitación de al lado, pero no quería pedirle algo. Con las demás se sentía avergonzada, aunque lo intentó.

— Lo siento, yo sólo uso copa y creo que Tsuyu también, por algo del medio ambiente. — Le explicó Mina. Al menos se ahorró el viaje a su habitación.

— No uso toallas, pero puedo darte un tampón. — Le ofreció Toru, pero aquello no le parecía cómodo y no tenía pensado averiguar cómo utilizarlo, así que le agradeció y se marchó.

Antes de preguntarle a Momo, se detuvo. Sería muy extraño utilizar algo de higiene personal que ella hubiese creado y sabía por parte de ella que tenía prohibido hacer algún tipo de fármaco con su quirk, debido a que podría salir muy mal y dañarle.

Finalizó con Jiro. De sólo acercarse a la puerta escuchó ligeramente el sonido de una guitarra eléctrica. Su habitación también estaba insonorizada como la suya, pero si se acercaba bastante, lograba oír un poco. Pensó que eso debería tenerlo en consideración en su propio cuarto.

Estando a punto de tocar la puerta, escuchó que comenzaba una canción. No sabía que Jiro cantaba, únicamente que sabía usar una gran variedad de instrumentos. Sería descortés interrumpirla, así que intentó aguardar un poco a que terminara.

Ima, shizukana yoru no naka de
Ahora en una noche tranquila

Mukeikaku ni kuruma no hashira seta
Corría en mi auto sin planificación

Hidaridonari, anata no
Hacia la izquierda

Yokogao wo tsuki ga terashita
La luna iluminó tu perfil

Tada, omoide wo saguru you ni
Sin embargo, si buscas recuerdos

Tadoru you ni kotoba wo tsunagi awasereba
Conectando las palabras

Dou shiyou mo naku afurete kuru
Se desbordarán impotentes

Hibi no kioku
Los recuerdos diarios

Pensaba que Jiro tenía una voz muy dulce en comparación a su actitud ruda. La canción era así, su voz armónica entre los sonidos de la guitarra eléctrica.

Iba a intentar tocar la puerta de nuevo, pero la siguiente estrofa le mantuvo helada frente a la habitación.

Anata no soba de ikiru to kimeta sonohi kara
Desde el día que decidí vivir a tu lado

Sukoshi zutsu kawari hajimeta sekai
El mundo comenzó a cambiar poco a poco

Tsuyoku aru you ni yowasa wo kakusu you ni
Ocultando mis debilidades para volverme fuerte

Enjite kita hibi ni
En los días que he estado actuando

Aruhitotsuzen arawareta sonomanazashi ga
La mirada que apareció de repente un día

Shiranakatta koto oshiete kureta
Me dijo lo que no sabía

Mamorubekimono ga areba sore dake de
Si hay algo que proteger, eso es suficiente

Konnanimo tsuyoku narerun da
Para qué te vuelvas fuerte

Inició un solo de guitarra y Shouto estuvo otro momento de pie. Tocó la puerta y Jiro se detuvo de golpe. Se escuchó que abría la puerta y era evidente que no esperaba encontrarse de nuevo a Todoroki ese día.

— Lo siento. ¿Tenía el volumen muy alto? — Preguntó y Shouto negó.

— ¿Cómo se llama la canción?

Shouto no era alguien que escuchara demasiada música. En su casa todo debía ser silencio, a menos que estuviesen mirando las noticias a la hora de la cena. No le desagradaba, aunque muchas letras eran sobre temas que no le interesaban o desconocía. Pero aquella letra le hizo sentirse extraña, pues había pensado de inmediato en Izuku.

Jiro le había hecho pasar a su habitación, sorprendida por la pregunta y aún más por saber que Shouto no era particularmente fan de la música. Le mostró algunos discos de vinil y se ofreció a enviarle más canciones de ese grupo por Chat. Cuando notó que se estaba entusiasmando de más y Shouto continuaba seria, paró.

— ¿Te identificaste con la letra? — Preguntó sin más rodeos. — Se nota en tu expresión. — Tomó el móvil para enviarle el link de inmediato. Shouto supuso que su móvil en su habitación había vibrado. — Yasashii suisei, de Yoasobi. Significa "Cometa", como una estrella hermosa que da esperanza en la noche más oscura.— Hizo una pausa y le miró.— Te gusta alguien, ¿verdad? — Jiro preguntó, pero no esperaba una respuesta verbal, el rostro de Shouto lo decía todo. — Puedes escuchar más canciones de esa banda, si necesitas algo de guía musical, escríbeme.— Todoroki sólo asintió, se sentía muy avergonzada. — También dime, porqué veniste. — Jiro sonrió y Shouto recordó el motivo principal por el que estaba ahí. Para su mala suerte, ella tampoco tenía toallas sanitarias y dijo que ya las había solicitado en la lista de compras en la cocina, pero que cada que les tocaba a alguno de los chicos ir por las compras, lo "olvidaban".

Shouto salió de su habitación, agradeciendo por el nombre de la canción. Tendría que salir de la UA para hacer la compra, pero de nuevo sintió otro cólico. Se hizo un ovillo sobre el tatami de vuelta en su habitación. Observó el móvil en su buró y lo tomó, enviando un mensaje a Izuku.