𝑷𝒓𝒆𝒕𝒆𝒏𝒔𝒊𝒐́𝒏| ˁᴼᴾᴱ

Capítulo 23 : Respuesta firme

—Jungkook solo estás confundiendo todo — Limpie mis lágrimas que salían sin parar, odiaba verme así de vulnerable, pero el problema era que ni yo sabía por qué estaba así.

—Escuchame — Sujeto mis manos — Se que puede ser absurdo para ti, pero no puedes pedirme que deje de sentir esto por ti, porque me niego a hacer eso — Sentí un nudo formarse en mi garganta.

—Y-Yo, no es así— Quería alejarme y pensar, ni siquiera tenía claro lo que sentía por Hoseok como para enredarme aún más con Jungkook. —Sabes que solo es un cariño de hermanos.

—Si fuera así, no me habría importado que me vieras con Jimin, sin embargo siento que perdí una oportunidad de estar contigo, ¿Acaso eso es pensar en cariño de hermanos? — Me miró seriamente —Solo estás usando excusas para no decirme que sientes por mí.

—Quizas tengas razón y sea una cobarde ahora, pero...no no puede ser — Me negaba a lo que pudiera sentir y lastimarlo.

Decidí irme, no era buena idea seguir hablando ahora mismo, con el corazón palpitante y con los sentimientos a flor de piel que pudieran comprometernos y dañar la bonita relación que hemos establecido.

Jungkook.

Mis mejillas ardían por lo calientes que podía sentirlas, debido a la adrenalina que comencé a sentir en el momento en que mis sentimientos fueron expuestos, lo había hecho y no había vuelta atrás, estaba claro lo que sentía y no podía cambiarlo, estaba enamorado de dos personas a la vez y quiza podrían considerarme un loco por qué así lo afirme, pero no podía negar que no podía darme el lujo de perder a ninguno y por alguna razón sentía que la había perdido, y eso me hacía sentir una enorme presión en el pecho, verla irse y dejándome aquí con millones de dudas de que era a ciencia cierta lo que pensaba y sentía me estaban desesperando, quería una respuesta firme y no la tenía, solo tenía la mía y no cambiaría, amaba a Park Jimin y amaba a Yung T/n con todo el corazón.
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En otro lugar.

Seokjin.

Mi mente estaba nublada por la venganza, por el miedo de quedarme jodidamente solo, de que está vez muriera Taehyung, sentía un vacío que no podía llenarse con nada, sentía la terrible necesidad de hacerle tanto daño como fuera posible a los culpables que arrinconaron a Namjoon en una especie de ratonera en la que fue tragado.

Solo él conocía donde estaba el testamento de mis padres, el llegó antes que yo cuando Mino tomó su lugar en la mansión, solo él pudo esconder aquel papel tan importante, había una razón lógica por lo cual lo hizo. Aunque no lo parezca también llegué a pensar egoístamente, mi plan desde un comienzo no fue entregarle a Jungkook su parte, más bien quedarme con todo y darle alguna propiedad a Namjoon y Taehyung, nada justo para ser honesto, pero ¿Quién lo era?.

Necesitaba averiguar en donde lo había escondido y vengarlo, el era todo para mí, aún y con que me hubiera despojado de aquel documento, no causaba ningun tipo de rencor de mi hacia el, el fue un hombre que merecía todo mi respeto, algo que yo no fui.

Entonces los recuerdos atormentaron mi mente y fue que me percate que Namjoon guardaba y atesoraba tanto un baúl negro aterciopelado en su habitación, que quede atónito, el lugar era obvio y jamás me di cuenta de aquello, por supuesto que el papel estaría escondido ahí.

Nada me importaba tenía que hacer lo necesario para conseguir lo que deseaba, me aliaria con quien fuera por cumplirlo.

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Mientras tanto.

T/n.

Conduje por mucho tiempo y al único sitio en el que mi mente y cuerpo me llevaron fue hacia Jung Hoseok, aquel hombre que parecía ser un refugio a todas estas emociones revueltas.

Entre a su casa como si de la mía se tratara esperando porque se apareciera frente a mi.

—¡Oh!, T/n, es muy tarde, ¿Qué haces aquí?

Tan pronto escuché su voz, me acerque a paso veloz para abrazarlo fuertemente.

—Te extrañé — Suspiré en su pecho. — Te extrañe mucho — Recalque.

—Estas muy cariñosa — Me sonrió mostrandome sus hermosos y perfectos dientes.

—¿Que dices? — Lo miré — ¿No puedo serlo?

—Por supuesto que sí nena — Besó mi frente.

—¿Puedo quedarme contigo?

—¿Eso se pregunta?, claro que puedes preciosa — Acarició mi cabello suavemente con sus grandes manos — ¿Que pasa?, se que algo no anda bien.

—No pasa nada, solo quiero estar contigo— Lo abrace nuevamente.

—Vamos princesa, puedes decirme lo que sea.

—Estoy segura.

—Entonces...¿Mis vecinos escucharán como dices mi nombre toda la noche? — Alzó ambas cejas aún sonriéndome.

—¿Qué dices?, Estás loco— Reí.

—Pero loco por ti.

Ambos reímos y me abrazaba, era una linda escena de alguna pareja que aparentaba amarse mucho.

Mi teléfono comenzó a sonar y quise contestar pero Hoseok lo tomó y comenzó a correr por toda la casa.

—Anda ven por el — Su risa alimentaba mi felicidad en estos momentos.

—Estoy cansada — Dije sin aliento minutos después de perseguirlo.

Se acercó y me abrazo hasta caer juntos en la cama de su habitación.

—Puede ser algo importante — Dije tratando aún de recuperar mi celular.

En el fondo deseaba que fuera Jungkook.

—Ven quedemonos así — Me abrazo y yo a él, atesorando el increíble momento que estábamos teniendo.