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Yeonjun estaba en el trabajo, su turno le tocaría solo. Taehyun en reuniones con Heeseung.

Miraba de forma aburrida los mostradores, pudo haber pedido el día libre pero no lo hizo. Estaba ganando buen dinero sólo que, se aburría cuando estaba solo, sacó sus carpetas y comenzó a dibujar.

El muñeco miraba al otro muñeco sentado delicadamente sobre el sofá, tocaba su mejilla sin reacción de parte de éste. Estaba frío, rígido, pero suave, lindo, delicado, un poco afeminado. Tomó una manta y la tiró sobre él, no quería que su amo lo viera. Tampoco podía tirarlo, no era suyo y su amo le había dicho que los regalos no se debían devolver, ni tirar, ni romper con mala intención.

-Desaparece -murmuró hacia el muñeco.

Yeonjun llegó antes de lo esperado, debía ordenar el desastre que había quedado de la noche anterior. Entró y vio al muñeco tapado, simplemente rió bajo buscando con la mirada al muñeco.

-Beomgyu, ya llegué.

-¡Amo! -llegó corriendo y saltó sobre él- Es temprano.

-Debo ordenar, la casa está muy desordenada.

-Amo, ya solucioné lo de mi hermano. Mételo en la caja y lo dejas en una habitación solo.

-Pero mis amigos se van a molestar. Beomgyu ¿Te pone celoso?

-¿Qué es eso?

-Nada bebé, ayúdame.

-Bebé -murmuró asintiendo.

-Es un apodo de cariño.

-¿Amo es uno también?

-Lo dudo -sonrió levemente.

Comenzaron acomodando la mesa en su lugar, habían muchos papeles y adornos aún colgados, de los cuales el muñeco se haría cargo. Moviendo unos de los sofás encontró la piedra que el muñeco había perdido antes. Se aseguró de ponerla en el brazalete vacío que tenía dejándolo sobre la mesa frente al otro muñeco.

-Amo, podrías tirarlo por aquí -salió al balcón.

-Beomgyu, no lo tiraré. Quítate esa idea de la cabeza, no tengo intenciones de nada con él.

-¿Despertará?

-Aún me pregunto cómo despertaste tú, así que dudo que él lo haga.

-Amo ¿Esa es mi piedra?

-Sí pero yo te di la mía, así que ya tienes una.

-No quiero que se la des a él, porque es feo y llegó después -frunció el ceño.

-Ya cálmate, ayúdame a sacar estas cosas.

El muñeco subió a la mesa de centro sacando un par de adornos que estaban muy altos. Pateó el brazalete con intención.

-Beomgyu, ya basta -rió negando.

Tomó el brazalete y lo dejó en el bolsillo de la blusa del otro muñeco, el sofá estaba lleno de cajas y bolsas con basura, no quería que se perdiera otra vez. Tomó al castaño por la cintura para bajarlo. Estaba muy celoso.

-Beomgyu, cambia esa cara -peinó su cabello.

-Amo, estoy cansado.

-Sólo sacaste papeles -rió- Vamos a comer algo.

-¿Podemos ir por helado?

-Está bien, pero llevemos estas bolsas.

Bajó las bolsas del sofá, tomó al otro muñeco y lo acomodó recostándolo delicadamente. Lo cubrió con la manta con la que Beomgyu lo intentaba ocultar. Sabía que era un muñeco pero la idea de que sintieran algo le perturbaba.

Toy (YeonGyu) 🍬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora