Toy (YeonGyu) 🍬

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Luego de haber notado los latidos en el muñeco, se abrazó a él con fuerza. Ahora era cálido, no era un simple muñeco que había tomado vida. Notaba la emoción en su mirada, sabía que fuese lo que estuviera sintiendo, era real.

Beomgyu quizás entendía un poco la emoción de su amo, pero también era algo nuevo. Posó su mano en su pecho sintiendo sus latidos, luego hizo la prueba en el pecho de su amo. También los latidos estaban allí, sólo que algo más rápidos. Se abrazó a su mano y cerró los ojos

-Amo, ahora soy como tú -murmuró sonriendo.

-Siempre lo haz sido -dejó un beso en su mejilla.

Era cierto, para Yeonjun no era un muñeco. Era su compañía, fuese como fuese estaba con él. Razón por la que le había dolido también el hecho de que se fuera del departamento.
Se durmieron al poco rato, el muñeco no soltaba a su amo en ningún momento, a ratos se acurrucaba por el frío.

…

Beomgyu despertó primero, miró a su amo y sonrió. Tocó su pecho confirmando que los latidos sí existían. Sonrió y abrazó a su amo otra vez.
Acariciaba su cuello suavemente con su dedo, subió a su mentón, a sus labios rosados. No podía despegar la vista de su amo, lentamente comenzó a subir su pierna sobre él, se arrastró con sigilo para quedar en su regazo.

Dejó cortos besos en su cuello para despertarlo, cosa que funcionó. Su amo se removió inmediatamente para despertar. Al verlo sonrió algo adormilado.

-Beomgyu, es temprano -murmuró acariciando los cabellos de éste.

-Amo quiero hacerlo -su voz fue ronca.

-Es temprano, en unos minutos debo ir a trabajar -rió.

-Eso no importa -murmuró otra vez.

Su mano fue bajando lentamente por el torso de su amo. El pelinegro no le prestaba atención, tenía sueño. Todo tranquilo hasta que sintió un agarrón en su entrepierna, dio un salto sentándose.

-Amo, tengo ganas -se quejó cuando su mano fue apartada.

-Debes controlar tus ganas ¿Si? Deja que me bañe.

El muñeco se bajó rodando, se quedó en la cama mirándolo. Luego de ver a su amo entrar al baño, salió de la cama rápidamente para ver a su hermano que dormía plácidamente. Le acomodó las mantas cubriendole del frío.

Yeonjun se estaba metiendo a la ducha, había preparado el shampoo, bálsamo y jabón antes de dejar caer el agua y regularla.

Se metió y quedó bajo el chorro del agua, aún estaba pensativo y muy feliz de saber que Beomgyu ya no era ningún muñeco revivido por acción divina.

Escuchó la puerta del cuarto de baño, luego la puerta de la ducha. Sonrió al sentir los brazos del ex muñeco rodearlo.

-Amo, un rato -murmuró.

-Llegaré tarde al trabajo -soltó una suave carcajada y volteó.

-Pero no tardaré mucho, lo prometo.

-Beomgyu -dejó un beso en sus labios- Estamos en la ducha.

-Eso no importa.

Comenzó dejando besos en su cuello que prontamente iban bajando por su torso. El pelinegro ni cuenta se dio cuando ya estaba de rodillas.

-B-Beomgyu qué fue lo... -jadeó.

El nombrado había metido el miembro a su boca, no quiso escucharlo más. Sabía que le reclamaría por lo que sólo lo miraba con cierta lujuria. Terminó cerrando el paso del agua, por más que intentara convencerse de quitar al chico de su entrepierna, no podía, el muñeco se ayudaba con una de sus manos, la otra la posaba en su muslo para no resbalarse. El cuarto estaba en silencio, ambos completamente mojados, sólo se escuchaban los morbosos sonidos de la boca del muñeco y las gotas que caían al agua que se había aposado.