𝕮𝖆𝖗𝖆𝖏𝖔, 𝖘𝖊𝖗𝖆𝖘 𝖒𝖎𝖆 • Carlos Sainz Jr

capitulo 7

Al cabo de unos minutos mi estomago exigía comida, era muy temprano aún, es viernes, y yo solo quería desayunar ya que ayer no lo hice o bueno, solo me comí una manzana. Asi que me levante de mi cama y me encamine a la cocina, baje las escaleras, y me quede en la entrada de esta y si, estaba Sainz ahí ¿desayunando? Da igual, quiza el ya hizo el desayuno.

— ¿Que hay para desayunar?

— Yo voy a desayunar huevos con tocino, y tu no lo se, me da igual — sonrió burlón.

— agh, siempre eres así?

— ¿Así como? — preguntó desconcertado, dejando de comer y posando su vista en mi.

— tan egoísta e idiota, carajo; no sabes cuanto daría por darte unos golpes en tu cara de engreido.

— No lo harías.

— oh créeme que si, solo espero el momento adecuado.

— pues mira, mira como tiemblo — empezó a mover sus manos con un ademán y finalizó soltando una risilla burlona y se puso a comer de nuevo.

Entre a la cocina y empecé a buscar ingredientes para hacerme un desayuno, y creo que haría lo mismo que Carlos agregando un tazón de frutas.

  [...]

Eran las 9:00 am todavía, entraba a clases más tarde, el profesor que nos da fisiología no llegaría y ese era las dos primeras clases, así que tenia tiempo para darme una ducha e ir por un café con Liam, vendrá por mi así que no iré sola.

Busque lo que me podría y lo deje en la cama acomodado, me puse la bata. Ya en el baño me los quite y encendí las llaves de agua, y comencé a lavarme el cabello.

Después de 15 minutos sali, y inicie poniéndome las bragas que eran unas de encaje de color blanco. Hasta que en ese preciso momento la puerta se abre.

— Hey, te buscan en la ...— Carlos se quedó boquiabierto viéndome de pies a cabeza, relamiendoce el labio.

— Carajo Sainz, volteate — le dije, tomando un color carmesí en mis mejillas, y colocandome la bata.

— Si, yo-yo lo siento. Ya me voy — y con esos cerró la puerta.

Solté un suspiro ¿Que diablos acababa de suceder?

Termine de arreglarme y salí de aquella habitación, pero para terminar de joder el día cuando iba a llegar a la puerta de la casa, esta se abre y aparece la novia de Carlos y el tras ella quedandoce ahí besándose.

me aclare la garganta y ellos me vieron.

— Necesito pasar, me permiten.

— Me importa un carajo lo que necesites. — estos se volvieron a besar ignorandome por completo.

— Vete al carajo Sainz, estas en la puta entrada con tu noviecita, no me jodas, voy a pasar. — alce la voz, ha este punto ya estaba enojada, ¿quien se cree este?.

— Vamos a mi habitación hermosa, allá estaremos más cómodos.

Se hicieron un lado y Kathleen me empujó el hombro sin descaro alguno.

Salí de ahí y Liam ya estaba afuera reclinado en su auto.

— ¡Guau!, no sabía que tenías auto, mucho menos que es lindo.