Lucerys Velaryon

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—He notado ciertos comportamientos en ti esposa.

—¿Cómo cuáles esposo?

—¿Crees qué no noté qué Baelon, Aerys y Valerion son castaños? ¿Tanto cómo Lucerys Velaryon?

—Esposo, ellos nacieron hace menos de...

—¿Unas horas? Lo sé. —gruñó Borros Baratheon. —pero mi inquietud sigue. Has sido una perra asquerosa, una zorra como tu madre, una golfa que engendra bastardos.

—Respeta a tu reina. —dijo Saera con seriedad. —¿Por qué creerías qué no son tuyos?

—Sé que ninguno lo es. —gruñó esté tomando su espada con fuerza.

—Ellos son tan tuyos como míos mi amor, baja la espada. —odió llamarlo así y odió humillarse de tal manera. —deja que nuestros pequeños reinen Storm's End.

Borros gruñó asintiendo guardando su espada, Saera suspiró una vez que esté salió de la enorme habitación, guardó silencio ingeniando algún plan.

Miró la enorme pintura en donde sus hijas estaban, Maris, Cassandra, Floris y Ellyn, sus difunta hijas las cuales habían fallecido en los partos, junto a su hijo Royce, el cual también había fallecido en un parto, sus únicos hijos vivos ahora eran Baelon, Aerys y Valerion, los cuales eran los únicos herederos vivos de Storm's End.

—Mi reina. —dijo Tobong entrando. —¿Desea qué le ayudé en algo?

—Descuida, estoy bien.

Había sido entregada a lord Borros Baratheon a sus trece días del nombre, desde ese momento engendrando herederos, Cassandra había sido la primogénita de ambos, falleciendo unas cuantas horas después debido a una extraña fiebre, Maris había sido la segunda, había nacido fallecida, Royce había sido el tercero, había logrado vivir un día entero, falleciendo la madrugada siguiente, Ellyn y Floris habían sido las últimas, ningún heredero de lord Borros había sobrevivido, no hasta que Baelon, Aerys y Valerion habían llegado.

—Mi reina, ha llegado una invitación del palacio.

—No iremos. —murmuró sabiendo la respuesta de su esposo. —no te molestes en contestar, lo envían por cortesía.

El caballero asintió alejándose de a pocos de la castaña, está suspiró tomando un poco de té.

[***]

Reciban un cordial saludo.

La Casa Targaryen ha decidido celebrar un torneo en nombre de la primogénita del futuro rey, la hija de Jacaerys Targaryen y su esposa, Baela Targaryen, sería un honor tenerlos junto a nosotros una vez más, mis lores, recibir a la Casa Baratheon una vez más en nuestros salones.

Saluda, Rhaenyra Targaryen.

—Por favor esposo.

—He dicho que no Saera.

—Por favor, no hemos ido desde hace seis años, iremos y nos devolvemos pronto.

—¿No entiendes?

—Por favor esposo, extraño a mis padres.

—Borros suspiró. —no te quiero cerca de ningún hombre, tú me perteneces.

—No estaré cerca de ninguno, lo juro.

Borros sonrió complacido, besando a la castaña, está hizo un esfuerzo para evitar vomitar, una vez que la soltó, corrió a los aposentos de los menores alistando sus ropas para el carruaje.

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