Worked 36

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Donghyuck no sabía qué había pasado, solo sabía que estaba preocupado, demasiado preocupado. Y lo mismo había pasado con Mark, la llamada de Donghyuck lo asustó mucho, tenía un mal presentimiento. Entrando al hospital y acudió con el equipo con quien trabajó por varios años.

—Hola, Sunny, buen día. —Le dijo a la enfermera de la recepción. —¿Cómo estás? —Saludó.

—Bien, doctor, Mark, es raro verlo por aquí, ¿Decidió regresar? —Preguntó ella con una sonrisa ilusionada, había trabajado con el doctor Mark, sabía que era bueno y un hombre bastante amable.

—No, aún no, busco al doctor Taeyong, al parecer hay una emergencia y es necesario que la atienda. —Explicó.

—Oh, el doctor Taeyong tenía programada una cirugía hace una media hora, no debe de tardar. —Ella explicó.

—¿Y qué hay de los otros doctores? —Mark preguntó buscando con la vista a alguien que pudiera atender al niño que Donghyuck encontró.

—Uh, no hay nadie disponible para cirugía. —Ella mencionó con una mueca. —Tuvieron guardias y emergencias esta la mañana, no hay alguien que pueda...

—¿Hay quirófanos disponibles? —Mark preguntó chasqueando la lengua. —¿Tenemos instrumentistas que puedan apoyarme? ¿O quizá alguien de urgencias? Aunque los niños no son su prioridad...

Mark pareció pensarlo, estaba tratando de encontrar una solución, no quería que ese niño falleciera solo porque no había doctores que pudieran brindarle una operación precisa.

—Doctor, recibimos ordenes de que usted no podría trabajar en el hospital al menos que firmara unas cláusulas en su contrato. —Ella aclaró su garganta. —Hemos escuchado rumores de que los niños que están internados con usted podrían no salir vivos, lo mejor será esperar...

—Tú sabes que eso no es cierto. —Mark dijo frunciendo el ceño. —¿Tienes las clausulas o debo ir a Recursos Humanos a firmarlas?

La mujer sonrió, ella estaba feliz de que el doctor Mark regresara al fin, era como si todo se hubiera acomodado para que Mark pudiera intervenir al niño y vencer sus miedos. Los dioses eran poderosos y a veces era bueno rezarles para que sucedieran los milagros.

Ella sacó varias hojas de contrato que Mark ni siquiera leyó, ella empezó a llamar a todos para poder apartar un quirófano, la especialidad de médico cirujano en pediatría debía valer mucho. Porque el doctor Mark había regresado.

—La ambulancia llegará en un instante...

—La ambulancia llegó es un niño. —Ella dijo levantando el teléfono y escuchando. —Lograron estabilizar, es solo una operación de fractura expuesta en una costilla trasera.

Mark al oírlo no sabía cómo reaccionar. ¿Cómo Donghyuck no había visto esa lesión? 

No, no, vio la camilla y el niño ensangrentado. Los paramédicos lo pasaron a un lado de él mientras se encargaban de arreglar todo lo que había sucedido.

Pero cuando la camilla pasó al lado de Mark, algo resonó dentro de él. Su mano tembló y dudó. Leyó la playera sucia del niño y sus ojos se humedecieron.

Chenle... ¡Tenía que salvarlo!

—Mark. —Donghyuck se paró a su lado. —No sé, solo... Mi hermano. ¿Dónde está?

—Taeyong está en cirugía. —Mark respondió, él ya usaba su bata, cuando entrara se colocaría la protección azul que usaba normalmente. —Lo voy a hacer yo.

Y Donghyuck abrió la boca, su labio tembló y observó al doctor, ah, sintió un dolorcito en el pecho y esas ganas de llorar acumuladas en sus ojos.

—Todo va a salir bien. —Haechan dijo, o se lo repitió a sí mismo. —Sé que podrás salvarlo.

Guardians Worked (Jaeyong/ SungTaro/ Markhyuck)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora