Guardians Worked (Jaeyong/ SungTaro/ Markhyuck)

Worked 58

Ellos habían quedado de verse, Taeyong había estado nervioso ese día durante su turno, Mark le había dicho que era totalmente normal que se sintiera nervioso porque era empezar desde cero, pero que los apoyaba porque sabía que eso iba a terminar así.

Después de hablar por teléfono, Taeyong y YoonOh quedaron de verse.

Y se sintió como una cita muy especial.

Taeyong llegó al restaurante, había sido en la terraza del hotel más caro de la ciudad, y definitivamente tembló cuando vio a YoonOh levantarse de su lugar y darle un enorme ramo de rosas rojas al doctor.

—Me alegra que estés aquí. —YoonOh dijo con suavidad.

—Esto es maravilloso. —Taeyong murmuró con sus ojos brillantes. —La vista es... Y las flores huelen... —Solo pudo sonreír. —Gracias.

YoonOh usó sus modales para ayudar a Taeyong a sentarse frente a él; el doctor dejó las flores en la mesa y observó al actor con cierto sonrojo.

—Te ves precioso.

Taeyong sintió su cara arder.

—Gracias, también tú. ¿Cómo te ha sentido? —Preguntó.

—Estoy bien. —YoonOh soltó un suspiro. No sabía cómo empezar a hablar del hechizo, o de besarse, era un novato en el tema del amor cuando se trataba de sí mismo, aunque no lo pareciera, YoonOh estaba muy nervioso.

—¿Seguro? ¿No has tenido alguna recaída o cansancio? Conseguí un neurocirujano, quizá te puedan hacer unos exámenes antes de...

—Estoy bien, Taeyong. —YoonOh cambió su mirada. —De hecho quiero hablarte sobre eso, sobre lo que pasó y va a pasar entre nosotros; y tengo algo que decirte que quizá haga que pienses que estoy loco... Más de lo que ya crees que estaba.

—Está bien. —Taeyong relamió sus labios. —¿Qué debo saber?

—¿No me juzgarás?

—Probablemente sí, pero en mi cabeza. —Sonrió, bromeaba.

—Necesito que creas todo lo que te diré. —YoonOh murmuró.

—¿Estás metido en un problema? —Taeyong trató de preguntar, aunque sus pensamientos de repente se fueron a los extremos.

YoonOh y Taeyong se miraron por un largo rato hasta que YoonOh negó, miraba a Taeyong como si fuera lo más hermoso que le habría pasado en la vida, sin embargo Taeyong aún sentía nervios, y sinceramente también tenía miedo de lo que YoonOh podría decir.

—Es sobre el beso y quién soy en realidad. —YoonOh mencionó.

Taeyong guardó silencio.

—¿Lo que dijo Sungchan? ¿Qué el beso rompió el hechizo? Debe ser eso... —Bromeó. —Te ves diferente.

YoonOh no sabía cómo tocar el tema sin parecer más loco de lo que Taeyong lo recordaba. Se sentía vulnerable, como si le faltara la confianza. Jamás se había sentido de esa forma. Amar era darle la confianza a la otra persona de lastimarte y confiar en que jamás lo hará.

—Es eso. —YoonOh mencionó. —Estuve dormido por algunos años, tu beso fue el que me "liberó".

—¿En serio me dirás que crees que es cierto? —Taeyong cuestionó.

—Lo es. —YoonOh murmuró. —De hecho los sueños que tenía con Donghyuck son una explicación... Hace dos vidas, Haechan fue mi hijo, lo adopté y lo crie.