Promesas

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Naruto aprovecho el poco tiempo que tenía y me invito a salir... fuera de la casa de las flores como una pareja "normal".
Nuestra primera cita... fuimos por helado, al cine, paseamos por los parques.
Estábamos sentados conversando cosas triviales cuando pasó una señora... me miró de pies a cabeza despectivamente y se dirigió a Naruto.

Señora: que no sabes que es puta?
Tsss aléjate de ella chiquillo es una fuente de enfermedades andante.

Naruto sin pensarlo y como buen impulsivo que era se paro en seguida para decirle unas cuantas cosas a la señora...

Naruto: que se cree vieja bruja, Hinata no es así, vuelva a meterse  con ell..

Hinata: basta Naruto, solo déjalo así

Me paré de la banca y comencé a caminar en dirección a la casa de las flores de donde no debí haber salido.

Naruto: Hey! Hey! HINATA ESPERAME!!!

Naruto corría tras de mi

Hinata: quiero estar sola, por favor...

Apuro un poco más el paso hasta lograr detenerme, me abrazaba u trataba de calmarme

Naruto: sabes que no me importa lo que digan... se lo que eres.
Si nos vamos de acá esto no sucederá... lo prometo.

Esa noche le pedí a madame Tsunade estar libre... y a Naruto que me dejara tranquila lo que quedaba de día para poder pensar.
Mañana era viernes y debía tomar mi decisión.

No se cuantas plegarias envié al cielo esperando que mi madre o Dios bajaran y me dijeran que debía hacer... pero nada, esto es única exclusivamente responsabilidad y decisión mía.

Intente dormir haber si lograba despejar la mente, pero solo conseguí girarme de un lado a otro sin obtener respuesta clara.

El maldito viernes había llegado... Naruto paso temprano por la casa de las flores, aun no me levantaba cuando entraba en mi cuarto.
Traía consigo una maleta gigante, estaba listo para marcharse.

Me senté en la cama acurrucando mis rodillas aun cubiertas por las sábanas de seda.

El sentó a mi lado resignado, me abrazo y beso mi frente.

Naruto: supongo que esto es el adiós

Solo asentí

El se puso a llorar como nunca antes lo había visto, parecía un niño pequeño con su cara empapada en lágrimas.

Naruto: de verdad quería que te fueras conmigo, tenia muchas ganas de intentarlo...

Seguía llorando desconsolado y yo incapaz de emitir una palabra.

Solo atine a abrazarlo yo esta vez... me invadió la pena y me contagio sus lágrimas.

Naruto: entiendo que es difícil para ti tomar esta decisión... es mas, entiendo tu decisión. Pero si tienes aunque sea una mínima alternativa de no llevar la vida que crees estas destinada a llevar, estoy dispuesto a intentar continuar con esto que tenemos a la distancia. Veamos si funciona, si es verdadero esto que sentimos y nos tiene confundidos... puedo volver por ti si estamos seguros.

Seque mis lagrimas y asentí nuevamente, aquellas palabras prometían una alternativa. Ahora esperaba de todo corazón que ambos pudiéramos aclararnos.

Naruto: me tengo que ir

Dios! Porque esto se siente tan triste...
Nos abrazamos, no sabía bien que decir, ni si quiera sabía que sentía.

Naruto: te quiero mi Hinata... digas lo que digas o pienses lo que pienses, te quiero y siempre lo haré porque aunque pasen mil años, no podría olvidar todo lo que pasamos, aunque fueran solo unos días.

Parados al centro de la habitación, angustiados, abrazados, escuchaba sus palabras... sabía que eran ciertas, yo también le quería.

Tomo mi rostro beso la punta de mi nariz y mis labios, me miró a los ojos con intensidad.

Naruto: espero verte pronto, te enviare una carta apenas llegue a Canadá... te quiero.

Me dio otro beso, tomo su maleta y salió por mi puerta.
10 segundo después corría tras él... lo abrace por la espalda fuertemente.

Hinata: yo también te quiero y esperaré, es una promesa.

Pude sentir como sus pulmones se llenaban de aire, tal vez una sonrisa invadió su rostro.

Me gire y volví a mi habitación avergonzada por aquel acto.

💔💔 ay dios! Me va a dar algo...

La Casa De Las FloresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora