Capítulo 5: Nuevos Campistas.

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Percy Jackson, pertenece a Rick Riordan.


La Nueva Luz del Olimpo.

Yo no debía de pensar, que soy especial, solo por ser la hija de Poseidón (y no lo digo, solo por tener hermanos y ahora, tener que esperar hasta que Papá me reconozca), sino porque dos días después de llegar, una pareja de hermanos, llegaron al Campamento: Ella se llamaba Diana y él se llamaba Jacob. Ella tenía el cabello negro y los ojos plateados y él tenía el cabello rojo y los ojos verdiazul.

Me sonrojé al verlos, por recordar mi sueño de la noche anterior a la llegada de ese par: estando en la cama de Artemisa y no necesariamente viendo televisión. Pero al parecer, no fue solo un sueño.

Cuando me vieron, Diana y Jacob me saludaron con gran cariño, haciéndome sospechar aún más, sobre sus progenitores.

Luego de un desayuno nutritivo, junto a Diana y Jacob, comenzamos a buscar aquello en lo que seríamos buenos, para determinar quiénes eran nuestros padres divinos. Así que decidí acelerar las cosas, mostrando mis habilidades en canoa entre los peligrosos rápidos e hice algo de equitación aérea a lomos de un Pegaso.

Por la insistencia de Quirón, Diana y Jacob, hice arquería y para mí asombro, me fue medianamente bien. O era legado de Apolo y hasta ahora lo descubría o en esta línea de tiempo, Orión no se confundió con la admiración de Artemisa hacía él. Diana y Jacob eran definitivamente, maestros en la Arquería, además de que su ascendencia era obvia; pero tampoco es que yo fuera el mejor de todos.

En carreras, la instructora quién era una Ninfa, me dejó comiendo polvo a diferencia de Jacob y Diana, quienes estaban casi a su nivel.

¿Una madre debería de sentirse orgullosa o desanimada de que sus hijos sean más rápidos que ella?

Yo por mi parte, carecía de la habilidad en las vides de Dionisio, ni era tan fuerte como las hijas de Ares, ni contaba con la facilidad del metal como las hijas de Hefesto.

Pero era muy buena en esgrima y la arquería no se me daba tan del asco, como en la línea de tiempo original. (lo cual debía de significar que Orión no intentó abusar sexualmente de Artemisa)

Annabeth nos estuvo enseñando griego antiguo y la dislexia en mí, no era tan fuerte, como en la línea de tiempo pasada. Y echábamos parte de nuestra comida al fuego, como sacrificio a los Dioses.

Clarisse nos enseñaba combate cuerpo a cuerpo y esgrima, pues no queríamos estar cerca de Luke.

Thalía entrenaba también en esgrima conmigo. Pero debo de admitir, que había creído que ella era solo Sōjutsu (arte marcial japonesa de lanza), también me retó en esgrima, varias veces y me asombró que todavía mantuviera sus habilidades de arquería, como bien me demostró en varios retos de arquería, junto a Clarisse.

Me entrené en Hidroquinesis cerca del río del bosque y en la respiración subacuática en el mar, quedaba la forma más rápida de llegar a él, detrás de la cabaña de Poseidón. 


No era una mala experiencia y, aun así, el primer juego de Captura a la Bandera, se acercaba. Por esto, me acerqué a Nyssa y le pagué , para que me construyera un escudo y una armadura para mi contextura delgada. Ella estaba tan emocionada, que cumplió con el reto de forjarla resistente y duradera para mí, en los días anteriores al juego.

Así mismo, intentaría acercarme a mis hijos (porque estoy totalmente segura, de que ese par, son mis hijos con Artemisa): Diana y Jacob.

La Nueva Luz del Olimpo (Percy Jackson x Harem)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora