Es un sueño hecho realidad. Cada día está más seguro que sus orígenes dieron un buen resultado en él.
Podría Mentirle a cualquiera, decirles que bajó directamente del cielo. Que es un trofeo de conquista.De alguna manera lo es.
Sube y baja. Sube. Baja.
Es demasiado pequeño. Demasiado apretado. Tentador. Delicioso, delirante. La tiara en su cabeza se resbaló por culpa de los movimientos. Sin tiempo a recogerla de nuevo. Sesshomaru está demasiado ocupado gimiendo como para notarlo. De todos modos, Inu No Taisho no lo dejará ir.
. . .
La tarde anterior, el gran señor Inu No Taisho llevaba una muda de ropa consigo camino a su habitación.
Como todo dueño y amo no necesitó de anunciarse antes de pasar.Su mascota había pasado todo el día descansando debido a la desenfrenada actividad nocturna que compartieron.
Fue considerado al caminar despacio, sin saber si aquel ser todavía dormía. Se acercó a comprobarlo. Él lucía como una doncella a la que rescatar de un profundo sueño.
Nunca se aburrió de admirar semejante belleza. Aun sin maquillaje, en relajación total. No detuvo su impulso de acariciar ese rostro. Repasando en su mente todas las expresiones que logró poner en él. Sintiéndose orgulloso por eso.
Ha visto su serenidad, su indiferencia, su frialdad, su furia, su odio, su angustia, su tristeza, su desesperación... como también la vergüenza y su pasión reprimida. Anhela más de eso. Aun si fueron varias facetas, Anhela conocer aun más.
Hubo unos ligeros movimientos de parte del durmiente. El mayor no quito su mano de la mejilla del otro. Siguió acariciando esa piel con su pulgar. Sin dañar.
Esos ojitos dorados se tomaron su tiempo para abrirse. La piel blanca se volvió rosada por la calidez. No hay mucho que decir en realidad. Con solo el contacto visual entre ellos es más que suficiente. Armonía. Esa es la definición.
La mejoría en Sesshomaru es notable. Aún si todavía le dolía la parte baja se esmeró por no anunciarlo. En vano sería, por que no podría ocultarle algo así a Inu No Taisho.
─ No me importaría dejarte aquí todo el tiempo necesario. Pero tenemos apariencias que aguardar. Tienes que estar presente en la cena de esta noche. Hacerle saber a Inuyasha que todo está bien.
Sesshomaru no pudo estar en desacuerdo con eso. Estaba sentado con todo el esfuerzo del mundo sobre el borde de la cama en cuanto su amo desplegaba la nueva muda de ropa que había conseguido. No se molestó en ocultar su sorpresa. Por primera vez, Inu No Taisho traía vestimentas masculinas para él.
─ Permitiré esta etiqueta indumentaria en ti por el bien de nuestra fachada, Sesshomaru. Supongo que no se necesita más explicación que la de que empezaron a correr ciertos rumores... sobre tu presencia en el palacio.
─ Entiendo... ngh- ─ sin quererlo un gemido de dolor se había escapado. Se puso de pie con dificultad. ─ No creo que pueda estar sentado tanto tiempo. ─ murmuró.
Sonando tan tierno, Inu No Taisho quería reírse. Sabía que hacerlo no era buena idea, por supuesto que no.
─ Le diré a Fukuro que arregle eso antes de que te vistas. ─ estaba a punto de retirarse para cumplir con lo dicho cuando fue interrumpido.
─ Hay algo que, bueno, es una petición.
─ Te escucho.
─ Es sobre el collar. Si pudiera no llevarlo puesto esta noche. Hasta hace poco me enteré que Inuyasha sabe que esto se usa como castigo o que significa que le pertenezco. Y él piensa que lo uso por esa razón. No es bueno que aparezca con el collar si quiere hacer creer a Inuyasha lo contrario.
![](https://img.wattpad.com/cover/299410841-288-k410962.jpg)
ESTÁS LEYENDO
• El Cruel Príncipe Del Oeste •
Fanfiction》Cuando todo esté mal, puede ponerse peor.《 ___________________________________ ▪︎ Donde Sesshomaru es el centro de atención. El tema de conversación. Un mágico hechizo sobre él. Una enfermiza obsesión. Y como lo usará en contra de sus victimarios...