Midnight Rain

Capítulo 11

Narra Lesath.

El día anterior al partido, el viento se convirtió en un huracán y la lluvia cayó con más fuerza que nunca.
Estaba tan oscuro dentro de los corredores y las aulas que se encendieron más antorchas y faroles.
Pansy y yo íbamos corriendo hacia la sala común.
-Van a jugar contra Hufflepuff.- dijimos al mismo tiempo.
-¿Quién?- dijo Blaise.
-¿Cómo que quién?- respondió Pansy. -Gryffindor, genio.-
-¿Hufflepuff? Joder, ganará Gryffindor.- dijo molesto el rubio.
-De hecho puede que no, Malfoy. Tienen un nuevo buscador, quien es su capitán, Cedric Diggory.- dijo Regulus.
-¿Cedric Diggory?- preguntó.
-Sí... el guapo y alto de Cedric Diggory.- dije con una sonrisa.
-Tan fuerte y atractivo.- siguió Pansy con cada de embobada.
-¿Cómo saben quién es?-
-Pues porque ya lo conocimos.- respondió la pelinegra.
-¿¡Lo conocieron sin mí!?- dijo Blaise ofendido.
-No quisiste venir a la cocina, nos lo encontramos y fue tan amable.-
-Amable fue conmigo, contigo fue coqueto Ari.-
-¿Te coqueteó?- dijeron molestos mis hermanos.
-¿Por qué te coquetea? ¿Quién se cree?- dijo también Malfoy molesto.
-A ustedes que les importa si lo hizo o no.- me crucé de brazos.
-Realmente no nos importa, sólo queríamos vernos como hermanos tóxicos.-
-Pero no nos ha gustado.- dijo Tom encogiéndose de hombros.
-¡Disculpa! ¡Sí importa, Lesath ! Es dos años mayor que tú. Si es sangre pura, pero...- se quedó pensativo un momento. -¡Maldita sea! Es perfecto, pero sigue siendo mayor que tú.- fue lo último que dijo porque agarro sus cosas y se fue.
Pansy y Blaise empezaron a reírse a carcajadas.
-¿Qué le pasa?- preguntó Mattheo confundido.
-Nada, solo es Malfoy siendo Malfoy.- respondió Blaise.
-Bueno, creó qué hay que irnos hacia la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras.- dijo Tom agarrando su mochila.
-¿Mi mochila?- pregunté buscándola.
-Se la llevó el rubio molesto.- dijo Regulus quien agarró mi mano para avanzar.
Llegamos al aula y Draco estaba sentado con Crabbe.
Cuando se dio cuenta que habíamos llegado, su mirada se dirigió a las manos agarradas de Regulus y yo.
-Tú mochila está detrás de mí, para que te sientes.- dijo en un tono molesto y siguió hablando con Crabbe.
-Celoso.- susurró Pansy pasando a mi lado.
Regulus y yo nos sentamos detrás de Malfoy y Crabbe.
Todos estábamos platicando cuando se escuchó la puerta abrirse de ella salió ¿Snape? con un movimiento de varita cerró las contraventanas y se paró enfrente.
Snape tenía un brillo de satisfacción en sus ojos y una muy pequeña sonrisa.
-Bueno, estoy haciendo esta asignatura porque...- empezó mi tío a hablar, sin embargo, la puerta se abrió apresuradamente.
-Lamento llegar tarde, profesor...- Harry se quedó completamente mudo al ver que era Snape y no Lupin quien estaba dando clase.
-La clase ha comenzado hace diez minutos, Potter. Así que creo que descontaremos a Gryffindor diez puntos, siéntate.- ordenó Snape, pero Potter no se movió.
*Y se fue su "buen humor" gracias Harry por llegar tarde.*
-¿Dónde está el profesor Lupin?-
-Lo estaba explicando antes de que usted me interrumpiera. No se encuentra bien para dar clase hoy. Creo que te he dicho que te sientes.- Snape formo una media sonrisa diabólica.
-¿Qué le ocurre?- preguntó Harry perteneciendo donde estaba.
A Snape le brillaron los ojos.
-Nada que ponga en peligro su vida. Cinco puntos menos para Gryffindor y si te tengo que decir que te sientes de nuevo serán cincuenta.-
Harry se fue despacio hacía la mesa de mi lado y se sentó.
-Puedo ver que el profesor no ha dejado ninguna información acerca de los temas que han estudiado hasta ahora.- Hermione levantó la mano con rapidez.
Regulus y yo solo pasamos las manos por la cara.
-Hemos estudiado a los boggarts, gorros rojos y los grindylows, estábamos a punto de comenzar.- decía Granger con rapidez pero, Snape la corto.
-Cállate. No te he preguntado. Solo comentaba la falta de organización del profesor Lupin.- dijo fríamente Snape.
-Es el mejor profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras que hemos tenido.- dijo Dean Thomas con atrevimiento.
*Qué no lo mate aquí.* •Qué no lo mate aquí.•
En ese momento Snape puso el gesto más amenazador.
*¡Dios! ¡Corran!*
-Son tan fáciles de convencer, Lupin apenas y les exige esfuerzo... Yo daría por hecho que los de primer curso son ya capaces de manejarse con los gorros rojos y los grindylows. Hoy veremos, los hombres lobos.- le vi hojear con cuidado el libro de texto hasta llegar al último capítulo.
-Lo hace a propósito. Quiere que alguien se dé cuenta de Lupin y que lo expulsen de Hogwarts.- me susurró Regulus.
Lo mire sorprendida.
-¿Cómo lo sabes?-
-Cuando investigaba lo tuyo, me quede leyendo de los hombres lobos, luego recordé su boggart, era luna llena, así que el rompecabezas se armó solo.-
-¿Y cómo sabías que yo sabía?- pregunté mirándolo encantada por lo listo que era.
-Fue sencillo. El día que regresamos de hogsmade olías a acónito, y sítiate que habías ayudado a Snape con algo. Podías a verlo ayudado a hacer cualquier poción, claro, pero bueno, eres realmente buena en varias cosas.- dijo nervioso el chico de ojos grises. -Además de que dijiste que le llevaron algo a Lupin ese día.-
Me limite a sonreírle ante lo que había dicho.
-¡Ahora, abran todos el libro en la página 394! Todos. Ya.- ordenó Snape.
Todos abrimos los libros.
-¿Quién de ustedes puede decirme cómo podemos distinguir entre el hombre lino y el lobo auténtico?- preguntó Snape a la clase, que quedó en silencio.
MTodos excepto Regulus, Tom, Hermione y yo, teníamos las manos levantadas. Bueno aunque Granger siempre la tenía arriba ¿dormiría así?
-¿Nadie? ¿Solo ellos? ¿Es que el profesor Lupin no les ha enseñado ni siquiera la distinción básica entre...?- Parvati cortó al profesor .
-Ya se lo hemos dicho. No hemos llegado a los hombres lobos. Estamos todavía por...- la valentía de Parvati fue acallada por un gruñido de Snape.
•Alguien de los de Gryffindor terminará muerto si seguían así.•
-¡Silencio! Bueno, bueno... nunca creí que encontraría una clase de tercero que ni siquiera fuera capaz de reconocer a un hombre lobo. Me encargaré de informar al profesor Dumbledore de lo atrasados que están todos.-
Levanté la mano junto con Reggie y Tom.
-Por favor, profesor. El hombre lobo difiere del verdadero lobo en varios detalles, el hocico del hombre lobo...- dijo Granger con la mano alzada, sin embargo Snape la corto a mitad de la explicación.
Y solo la corto porque no le dio la palabra.
-Es la segunda vez que hablas sin que te corresponda, señorita Granger. Cinco puntos menos para Gryffindor por ser una sabelotodo insufrible.- dijo fríamente Snape, quien remarcó las dos últimas palabras que destrozaron a la chica.
Vi que la cara de Hermione se había puesto colorada, bajo la mano con la mirada en el suelo, con los ojos llenos de lagrimas.
Todo Gryffindor fulminaba a Snape,mis amigos, incluso Draco estábamos en shock, ya que nunca nos imaginamos que él fuera a llamarla así.
Ya había escuchado que algunos le llamaban así, ya fuera en broma o en serio, incluso Pansy y yo le decíamos así de broma, nos habíamos hecho amigas, pero Ron era el que más le decía de esa forma y estaba con los puños apretados bajo la mesa, furioso.
-¡Lesath Aradia Riddle Blackwood!- grito Snape y salí de mi trance.
-Mande.- respondí desorientada.
-Te estoy diciendo que me digas las diferencias.- dijo con los brazos cruzados.
-Ah, si. Lo que Hermione decía estaba bien, aunque la verdadera razón es por el comportamiento, el lobo verdadero no es muy agresivo y un lobo no atacaría a un humano, excepto en algunas circunstancias. En cambio el hombre lobo, ataca a los humanos casi instantáneamente, y bueno suele ser un peligro para otras criaturas.-
-¡Bien contestando! No esperaba menos de ti, Lesath. Diez puntos para Slytherin.- dijo orgulloso.
Yo mire a Hermione, quien me miraba, le di una sonrisa y le dije "lo siento" con los labios, ella solo me devolvió la sonrisa cabizbaja.
-Ahora, escribirán una redacción de dos pergaminos sobre las maneras de reconocer y matar a un hombre lobo. Para el lunes en la mañana. Ya es hora de que alguien meta en cintura a esta clase. Ahora saquen todos su tarea, pasaré a revisarla.-
-Pero mañana es el partido, señor.- dijo Harry sacando la tarea.
*¡QUÉ NINGÚN GRYFFINDOR SABE QUEDARSE CALLADO!*
-Entonces le sugiero que tenga mucho cuidado, señor Potter.- le dijo Snape acercándose aterradoramente a Harry. -Sí se lastima un hueso, no será una excusa.-
-¡Todos la tarea, ya!- volvió a levantar la voz.
Mientras revisaba a los de la primera fila de la izquierda, Draco hacía dos figuritas de papel.
-¿Había tarea de Lupin?- preguntó preocupada Pansy.
-¿Hiciste todas las tareas menos está cierto?- dijo divertido Mattheo.
-Puede ser.- dijo preocupada.
Agarre mi mochila y de ahí saqué dos pergaminos.
-Sabía que se te había olvidado, así que te hice la tuya.- dije pasándole el pergamino. -Ten.-
-¡AAAH!- grito de la emoción.
-¡PARKINSON!- regaño Snape.
-Lo siento, encontré mi tarea, no la olvide en el cuarto.- dijo apenada y Snape solo negó.
-¡Gracias! Si estuvieras sentada a mi lado, ¡te besaría!- exclamo feliz.
Yo reí nerviosa y los chicos la miraron con el ceño fruncido.
-¡Ay, por dios! No me miren así, si pudieran también lo harían. Menos ustedes, son sus hermanos.- dijo dándose la vuelta.
Cuando Snape leyó la tarea de Pansy, la miró con el ceño fruncido y luego su mirada se dirigió a mi.
No me podía decir nada, cambie la letra, así que ni me vea.
-Bien hecho, Señorita Parkinson. Un nueve.- dijo negando la cabeza.
-¡Nueve!- dije indignada porque ese trabajo era digno de un diez.
-Riddle ¿Algún problema?- dijo mirándome con las cejas alzadas.
*¡LO SABE, ACTÚA RÁPIDO!*
-¡No! Solo estoy emocionada por ella. Felicidades Pans.- dije nerviosa.
-Tú tarea.- me pidió extendiendo su mano y se la pase con una sonrisa.
En lo que miraba mi tarea, vi a Malfoy soplarle a Potter una grulla de origami, el cual el chico de lentes atrapó, cuando regresé la vista vi que venía uno hacía mí, lo tomé antes de que Snape me lo quitara.
-Buen trabajo, Aradia. Un diez.- dijo dándome una sonrisa. -Regulus, el tuyo.-
Abrí la grulla y vi un dibujo de mi, mirando las estrellas... es hermoso.
Mire a Draco sonriendo y él ya estaba mirándome, no pude evitar sentir mariposas en él estómago. Le dije gracias moviendo los labios y él me dio una sonrisa.
Regresé la vista al dibujo y me di cuenta de que esté se movía, cambiando de la constelación Casiopea a la de Draco.
El timbre sonó por fin, y todos empezaron a guardar sus cosas, guarde el dibujo con sumo cuidado.
Todos salimos y me quede esperando al rubio en la puerta.
-¿No vienes?- me dijo Pansy quien venía con Regulus.
-Debo hablar con Malfoy.-
-¡Ah! Entiendo, vamos Reg.- dijo jalando a Regulus.
Parece ser que Draco le preguntaba algo a Snape porque tardo en salir.
Tenía los ojos cerrados cuando siendo que pasan por mi lado, los abro y Draco había salido con Crabbe y Goyle quienes estaban a cada lado del rubio.
-¡Malfoy!- exclamé llamando su atención.
El chico volteó y en cuanto me vio su expresión cambió.
-Adelántense.- les dijo y se me acercó.
En cuanto vi que estaban lejos, me lancé a el chico abrazándolo, él tardo en reaccionar pero terminó devolviéndome el abrazo.
-Gracias, Draco.-
-¿De qué?- dijo separándose.
-No te hagas. Por el dibujo, es realmente hermoso.-
-¿Dibujo?- dijo confundido. -Yo nunca te hice ningún dibujo, debió ser Regulus, con quien venias agarrada de la mano.-
-¡Dios! ¿Te molestaste?- dije cruzándome de brazos. -No deberías molestarte Draco.-
-¡No me... Bueno un poco, a mi nunca me agarras de la mano, Les.- me reclamo mientras se cruzaba también de brazos.
-Es que contigo... bueno si ese es el problema.- dije tomándolo de la mano.
Y en cuanto la agarre sentí un cosquilleo y de nuestras manos unidas salió un destello verde, ambos no soltamos.
-¿Qué fue eso?- dijo Draco asombrado.
-No tengo idea.- dije también asombrada.
-Dame tu mano de nuevo.- me pido y se la di.
Esta vez no salió ningún destello.
-Qué raro.- dije viendo nuestras manos entrelazadas.
-Bastante. Bueno, vámonos.- dijo jalándome para nuestra siguiente clase.

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Estaba en el piso moviendo mis manos evitando que Draco cayera. La escoba de Potter se dirigió hacia el busque prohibido mientras el chico caía desde unos veinte metros de altura, si dejaba de proteger a alguno de los chicos temía de que cayeran, pero no me perdonaría si Potter salía herido.
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Antes de ir al gran comedor para desayunar antes del partido de Quidditch, Draco me había detenido para contarme su plan.
-¿¡Estás loco!?- fue lo que dije después de que terminara de hablar.
-Cállate.- me dijo tapándome la boca.
-¿Cómo vamos hacer eso estúpido? ¿Sabes lo que ocasionaríamos? Se puede caer.- dije molesta quitando su mano de mi boca.
-Hey, no puedes echarte para atrás, hicimos un trato. Además te necesito de verdad.- dijo el rubio.
Lo mire y estaba haciéndome ojos de cachorro. Él sabía que no puedo negarme si hace esa cara.
-Agh, bien, lo haré Draco.-
-¡Sí! Eres increíble. Vámonos a desayunar.- y me jalo de la mano.
-Idiota.- dije molesta.