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Jungkook:

Cuando salí de la oficina me fui directamente al departamento, Ara había trabajado hasta tarde y decidí ahorrarnos el paso de cocinar, cuando llegue la encontré acostada en el sofá, a su lado está mí perro acostado, cuando siente un ruido se pone en alerta. Y  mientras ella ve algún documental en el televisor. Se distrae.

-Tranquilo campeón. -mueve su cola. -Hola. - digo dejando las cosas sobre la mesa y me quito el abrigo, lo cuelgo en el perchero.

-Hola...

Una mueca de dolor se instala en su rostro y mi preocupación se apodera de mis sentidos.

-¿Que pasa amor? -sintiendome un poco raro al verla así, me acerco a ella, tomo su cara y hago que me mire.

-Nada. Estoy con la regla.

Intento no alarmarme, pues a pesar de que tengo una relación estrecha con las mujeres nunca he tenido que hacerme cargo de ninguna chica en este estado.

Aunque le encuentro una diferencia a ello, quiero estar para ella en todo lo que necesite, no puedo sentir más que una fuerte predisposición muy fuerte para ayudarla en todo.

-¿Te duele algo? ¿Puedo hacer algo para ayudarte? - bajo mi cara hasta dejarla a la misma altura que la suya, diciéndole con la mirada que no quiero que sienta vergüenza de ello.

-Me duelen los pechos - baja la mirada a la zona y me doy cuenta de que no lleva puesto sujetador.

Maldita sea.

-Quédate aqui - hago que descanse, su cabeza se apoya en mis muslos mientras que el resto de su cuerpo se apoya en el sofá.

-¿Vemos una peli? - ofrece.

-Si, la que tú quieras.

Cierro mis ojos por un momento, no puedo sexualizar este momento, no lleva sujetador por razones obvias, sus pechos duelen y tiene más sensibilidad, eso es lo único que me tiene que importar, su bienestar.

-Pareces una piltrafa humana. - mi comentario le saca una sonrisa antes de tumbarse de lado y ver la película que ha elegido, y yo como siempre no puedo concentrarme en la película.

-Gracias. - hace una mueca.

De la nada se incorpora, la observó y sale corriendo al baño. Me levanto tras ella y me quedo fuera. Luego de unos segundos decido golpear la puerta.

-¿Ara estás bien?

-Dame un momento. - me grita.

-Esta bien.

Rebuscó en mi teléfono algo para aliviar los dolores menstruales, una bolsita de agua tibia, té de manzanilla o hierbas, recostarse en posición fetal. camino a la cocina a preparar un té, mientras caliento agua para la pequeña bolsita. También pongo unos chocolates y dulces.

Cuando vuelvo a la sala ella está recostada en el sillón, se incorpora cuando me ve aparecer y una hermosa sonrisa se planta en sus labios.

-¿Que es todo esto? - me siento a su lado y pongo la pequeña bolsa con agua tibia en su abdomen.

Me mira nerviosa. -Remedios caseros para aliviar el dolor.

Una sonrisita se apodera de sus labios. Me siento detrás de ella, coloco una manta envolviendo nuestros cuerpos y la abrazo por la cintura, apoyo mis manos sobre la bolsa de agua caliente.

-¿Te molesta si duermo un poco? -murmura con voz adormilada.

- Tú tranquila.

Continuo viendo la película elegida, mi teléfono vibra en mi bolsillo y con un poco de dificultad lo saco de allí.

Yoongi Hyung me llama, se me hace extraña su llamada ya que hasta hace un momento estábamos en la oficina, me pongo de pie con cuidado de no despertar a Yaz de su siesta y camino al balcón del departamento.

-¿Hyung?

-Jungkook... - dice un poco eufórico. -Acabo de descubrir que nuevamente se están desviando los fondos de la empresa y la fundación hacia una cuenta bancaria que no está registrada en la empresa.

Todo tipo de insulto se cruza por mi mente. -¿Estas seguro?

-Si, es el mismo procedimiento que el de las anteriores.

La cuestión era simple, pero lo hacían con tanta discreción que se hacía imposible dudar de alguien.

-¿En donde estas? - le pregunte.

-Ya estoy en casa, Hoseok esta conmigo y aseguro el perímetro. - me quedé tranquilo porque Hobi se encargaba de su seguridad, pero de todas formas estaba intranquilo.

-Enviame todo lo que tengas, necesitamos tener varias copias por si lo borran como paso antes.

-Ya te lo envio, ten cuidado.

-Tu también.

Corte la llamada y me dedique a preparar la cena que había traído, tenia mi mente en todo lo ocurrido otra vez, aunque no tenía certeza sabia que MinHo tenia algo que ver con todo esto. Sentí unos gritos en la sala y salí corriendo, Ara estaba teniendo una pesadilla, y lloraba aún dormida. Me acerque a ella y la acune hasta que se calmo. 

-Tranquila amor, estoy aquí.

Se incorporó y me abrazó con fuerza, mientras lloraba, odio verla llorar y sufrir, si pudiera le evitaría todo dolor, pero no puedo y eso me pone más furioso.

-¿Que ocurrió? - pregunte mientras le acariciaba la espalda. -¿Quieres contarme?

Sollozo. -El sueño o más bien pesadilla, era que mi hermana estaba en peligro. ¿Estará bien?

Maldita sea. Odio este tipo de sueños, a veces suelen ser reales.

-Acabo de hablar con Yoongi por un tema de la empresa, y estábamos hablando con Tae por mensaje me aseguro que estaba bien y Hobi se encargó de su seguridad. - la miré a los ojos. -Te prometo que Mysie está bien.

El alivio se apoderó de su rostro. -Te creo.

Senti que sus tripas rugieron y sonrió avergonzada. Las mías también, era hora de cenar.

-¿Quieres comer?

-Si muero de hambre. -me aseguro.

Nos acomodamos en el sillón, mientras cenábamos en silencio, y decidí ponerla al tanto de las novedades, ella merece saber lo que está ocurriendo.

Tuvimos una video llamada con su hermana y mí amigo. Y vimos que tenían un cachorrito. Todos se veían bien.

***

Holis...

Nos leemos. Besos mil Vale 💜

Él es un chico malo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora