7

1.9K 195 14
                                    

Kara PV

Estaba mirando mi correo porque había recibido la investigación de L-Corp, han sido rápidos porque aún no habíamos firmado contrato ni nada. Pero me dispuse a leerlo e imprimí dos copias, uno para Winn y el otro para mamá Eliza. Ya que va a ser la jefa del proyecto.

Me descargué el archivo pdf y envíe la orden de impresión a la impresora de mi secretaria.

Cuando iba a disponerme a leer, recibí una llamada.

—¿Diga?

Señorita In-Ze, hay una llamada para usted de un orfanato llamada Santa Grania. —dijo la telefonista.

—Pasamela.

Bien.

—Kara In-Ze, ¿qué puedo hacer por el orfanato?

Señorita In-Ze, soy la madre superiora, necesito que venga aquí, tenemos que hablar con usted.

—¿Ha pasado algo con la niña? ¿He hecho mal al enviarle el regalo? —pregunté preocupada.

No, nada de eso y Nirelle está bien. Solo necesitamos hablar con usted, es importante.

—De acuerdo, iré ahora mismo. ¿Le parece?

—Sí, cuanto antes mejor.

—Bien. Hasta ahora. —colgué extrañada no sé qué pasaba y menos que querían de mi.

Cogí mis cosas y volví a salir de la oficina.

—Diana, si llama la señorita Luthor, dale mi número personal.

—Entendido.

Cogí los documentos y fui al laboratorio, le pasé uno a Winn y después fui hablar con mis madres.

—Toma mamá, Lena me ha pasado el dossier del proyecto.

—Vaya que rápido. Gracias. —dijo mientras le echaba un ojo.

—Tengo que irme, he recibido la llamada de un orfanato.

—¿Orfanato? —preguntó extrañada.

Le expliqué lo que había pasado hace unas horas, por supuesto no le dije sobre sus regalos.

—Ve a ver lo que quieren.

—Me ha llamado la madre superiora, quiere hablar conmigo y es importante.

—Ve.

—Sí.

—Llévate a Alex.

—De acuerdo. —fui a buscar a mi hermana, y le conté un poco por encima lo que sabía y lo que me había pedido mamá.

—Por supuesto que voy contigo. —se quitó la bata y cogió sus cosas.

Nos fuimos al garaje y cogí de nuevo el coche.

Activé el gps y escribí Orfanato de la Santa Grania y se puso a buscar, cuando ya tenía la dirección, nos fuimos para allá.

Cuando llegamos, vi un edificio oscuro, daba algo de miedo por fuera. Subimos las escaleras y llamamos el timbre.

Nos abrieron y nos dejaron pasar, me presenté y nos acompañaron al despacho de la directora del orfanato, la madre superiora.

No entendía lo que estaba pasando y menos que varias monjas me mirasen y otras me guiaran el camino.

La que iba delante llamó y se escuchó un pase, abrió la puerta y Alex y yo entramos.

—¿Señorita In-Ze?

Familia SupercorpDonde viven las historias. Descúbrelo ahora