Necesito sexo

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Narra-normal

- ¡¿QUÉ CARAJOS ESTÁ PASANDO AQUÍ?! - La voz iracunda de Azulin retumbó por todos lados.

- Hermanito! Hermano c-cálmate, si? No pasa na-

- TÚ CÁLLATE GORDI! Y TÚ.- Apuntó justo a Achuchones.- Maldito desgraciado, SERÁ MEJOR QUE TE VAYAS AHORA MISMO O TE SACARÉ LOS MALDITOS ÓRGANOS-

- yo.. Y-yo- Miró a Gordi, por fin habían tenido un avance, y en cierto modo él tenía razón, debía ser un hombre.

Se puso delante de Gordi protegiéndolo de Azulin, infló su pecho y arqueó su espalda tanto como pudo para demostrar altura, mas el gesto tierno a ojos del peli Rosa no sirvió de nada pues Azulin se abalanzó sobre él y comenzó a golpearle en la cara.

Los golpes eran severos, potentes, poderosos, a lo lejos se veía a Coco, quien había seguido el olor de Azulin, guiándose además por los fuertes ruidos.

Durante la golpiza Achuchones miró hacia un lado y vió una piedra a su alcance, rápidamente la tomó y golpeó al peli azul con ella en la cabeza, haciéndolo sangrar. Este mareado no se percata ni del peli verde que lo golpeó hasta dejarlo contra un árbol, ni de Coco que ya había llegado a escena.

Quizás dejarlo recostado en el árbol era suficiente, pero Achuchones quería venganza por las palizas, asique tomó una roca más grande e ignorando las súplicas de Gordi, la levantó directo hacia la cara de Azulin.

- QUÉ ESTÁ PASA-

- ¡NO! NO PERMITIRÉ QUE LO TOQUES!! - Alguien tacleó con fuerza a Achuchones antes de que Coco terminara de hablar, dejándolo a unos cuantos metros de distancia por la increíble fuerza.

Achuchones en el suelo fue recibido con una navaja en su cuello impidiéndole moverse.

- Escuche soldado, no permitiré esta brusquedad, si vuelvo a ver que siquiera le toca un pelo, me encargaré personalmente de usted.

- Tú... Yo.. Te recuerdo.. - Dijo Gordi, asombrado hasta las orejas.

- Tú ahg.. Tú.. Eres el imbécil que sólo se sabe disculpar khg- Agregó Azulin entre quejidos mientras Gordi lo levantaba del suelo.

- Vaya! Si se acuerda de mi, soldado Azulin- Su ojos se iluminaron y rápidamente volteó a ver al otro.

- Si bueno, te metiste otra vez en mi camino, perra, asique será mejor que te alejes-

- Si soldado, me iré en cuanto pueda cerciorarme de que está bien- Se acercó hasta el más pequeño para estar a centímetros de poder tocar su cabeza.

- Disculpa, soldado, pero yo estoy a cargo de esta tropa, yo me encargaré, usted vaya a hacer sus asuntos- Coco tomó a tiempo la muñeca del contrario, impidiendo que tocara al peli azul, y al igual que usaba su altura para interponerse entre ambos.

El misterioso osito lo miro de arriba hacia abajo, criticandole con una mirada seria.

- Para su información, soy el Cabo Pompón, y llevo más tiempo aquí que usted asique no me vuelva a hablar así- Con rapidez soltó su muñeca- Y además, en la brusquedad de cómo se trataron, me imagino que esta no es la primera vez, asique si no sabe manejar situaciones pesadas, le diré que conozco muy de cerca a su superior.

Dejó de mirarlo fijamente, y su cara de seriedad y su expresión cínica se fueron al instante en que se giró para ver al peli azul que estaba asombrado por esa valentía, quizás hasta un poco intimidado, pero no iba a admitirlo.

- Para cualquier cosa, soldado Azulin, busqueme y haré lo que sea por ayudarle.- Sonrió dulcemente y seguido de despedirse del peli rosa, se fue por la entrada a ese pequeño lago, esa entrada que no fue ni de lejos el lugar por donde apareció.

El fumador está ciertamente desconcertado, además de Azulin, nadie nunca lo había desafiado,  y ciertamente el tonito usado por el "Cabo Pompón" no le gustaba para nada. Fue devuelta hasta la enfermería y procedió a usar las duchas internas del lugar. Una vez estuvo debajo de la relajante agua pudo aliviarse un poco. Al salir y colocarse nuevamente su ropa se dió cuenta de un dulce pastel perfectamente colocado encima de su cama. Era claro; el mismo pastel de la otra vez, ese olor tan adictivo. Al principio estaba dudoso, ¿y si era por eso que se había enfermado?, pero por otro lado después de la escena de esa tarde, quería desestresarse un poco. Comenzó a darle mascadas pequeñas para poder disfrutarlo más. Ahora el dulce toque de arándanos con avellanas había sido cambiado por arándanos con Limón y menta. Era más fresco, más limpio, casi podía sentir que estuvo fabricado para sanarse.

Al final, observa la nota en el fondo del envoltorio, decía;

" P̻a̻r̻a̻ m̻i̻ d̻u̻l̻c̻e̻ C̻o̻c̻o̻.:̻

L̻a̻m̻e̻n̻t̻o̻ m̻u̻c̻h̻o̻ l̻o̻ q̻u̻e̻ t̻e̻ s̻u̻c̻e̻d̻i̻ó̻,̻ e̻s̻ u̻n̻a̻ p̻e̻n̻a̻ q̻u̻e̻ h̻a̻y̻a̻s̻ e̻n̻f̻e̻r̻m̻a̻d̻o̻,̻ p̻e̻r̻o̻ n̻o̻ t̻e̻ p̻r̻e̻o̻c̻u̻p̻e̻s̻,̻ e̻s̻t̻o̻ t̻e̻ a̻y̻u̻d̻a̻r̻á̻ a̻ q̻u̻e̻ t̻e̻ s̻i̻e̻n̻t̻a̻s̻ m̻e̻j̻o̻r̻ ♡.̻

A̻t̻t̻e̻:̻ U̻n̻ a̻d̻m̻i̻r̻a̻d̻o̻r̻.̻ "̻

El gesto le parece parcialmente tierno, pues si supiera quién es el osito, estaría más a gusto. Entonces cuando pensaba en "a gusto" lo recordó de inmediato, la conversación en la mañana con el Sargento que había olvidado por un momento.

Flashback.

- Debe recuperarse lo antes posible, escuchó, soldado? Si quiere ir a ver a su esposa el fin de semana deberá estar listo, de lo contrario permanecerá en cama.

- ¿Ir a verla, dice?

- Exacto, como un gesto de la institución en caso de que mueran en batalla, se les da permiso para visitar a sus familias dos días antes de partir. Esto estaba predestinado para más adelante, sin embargo no hay respuesta del Escuadrón búho, asique es prioridad ir cuanto antes a la guerra.

- Lo...lo entiendo sargento..gracias.

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La cabeza comienza a palpitar le otra vez, quizás se había forzado demasiado para recordar, se recostó en la cama y trató de calmarse, más su cuerpo estaba llegando a una temperatura muy alta, no podía pronunciar palabra y jadeaba estrepitosamente, su cuerpo ardía como nunca. Entonces, cuando pensé que podía estabilizarse, miró a su parte inferior del cuerpo, dándose cuenta de que su miembro estaba erecto, duro como piedra.















დდლლᰔᰔᩚʚʚʚෆლლდდღღღღღ

Lamento no poder lanzar caps antes, en serio estoy súper ocupada :(

ೄྀAmo cuando dices mi nombre desesperadoೄྀ. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora