- A mi no me puedes engañar Shinichi - mencionó la castaña de ojos violetas al pequeño.
- ¿De qué habla Kimi-neechan? - pregunto el pequeño de lentes nervioso por las sospechas de la chica. Kimi sonrió.
- no soy Ran, a mi no me engañaras ni me logra...
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Capitulo 92 del manga
Narrador omnisciente
Kimi entro a la gran casa junto a los jóvenes detectives y Ran caminando a su lado.
- Bienvenida a casa, señora - dijo el mayordomo de aquel hogar.
- ¿Y mi esposo? - pregunto la mujer quitándose los lentes.
- El señor... Creo que aun esta en su despacho del segundo piso - explico el mayordomo de la familia Tsugimura con una sonrisa amable - ¿Y estos señores?
- ¿Nosotros? Pues... - Kogoro trataba de pensar una buena excusa.
- Es un viejo amigo, el señor Mouri - le presento.
- ¿Les sirvo algún refrigerio? - Le pregunto a la señora, Kimi observaba el lugar con cierto interés. Le recordaba a la mansión de los Kudo , con la diferencia que esa era mejor que esta.
- Si - contesto con simpleza.
- Ah, hola madre - saludo la joven nuera tomando por sorpresa a la señora. Esta reacción fue notada por Kimi, "No parece querer que este aquí, pero... Pero nos fue a buscar para investigarla, de ser así esto debería ser bueno para ella" - estoy de visita.
- Ah, es la chica de la foto... - murmuro Kogoro, tanto Kimi como Heiji le taparon la boca a Kogoro para que no hablara de más. Kimi al sentir la mano del detective del oeste lo miro con enfado, como se atrevía él a ponerle una mano encima a Kogoro, no le gustaba lo grosero que podía llegar a ser el chico.
- ¿Qué haces tu aquí? - pregunto extrañada la señora. Su hijo se acerco detrás de la joven nuera poniendo una mano en su hombro dejándola incomoda.
- La he invitado yo - dijo el hijo - ¡Ya que padre se niega a conocerla, la he traído a casa! - afirmo el chico - Y aun así, se ha encerrado en su despacho y no quiere saber nada de nosotros.
"Uy, que incomodo" pensó Kimi viendo a la joven, "un drama familiar".
- Madre, ¿Estos señores son amigos tuyos? - pregunto la nuera dándose cuenta de la presencia de los Mouri y los jóvenes detectives.
- ¡¡Yo no soy tu madre!! ¡Y no te tomes esas libertades en mi casa! ¡¡No te metas en mis asuntos!! - le regaño la señora dirigiéndolos a las escaleras. "Nos aleja del supuesto objetivo" - Vamos por aquí.
- Tiene muchos humos para ser la segunda esposa - murmuro el hijo con un ligero enfado - ¿Hum? - "Yo conozco a esas personas" pensó viendo a Kimi y Kogoro.
Kimi con observo con enfado como el pequeño seguía moqueando pero fue distraída al ver un hombre mayor en el piso de arriba.
- Hola, padre - lo saludo la señora a su suegro - no sabia que estuviese en casa.
- ¿Pero que dices, Kimie? - pregunto el anciano - has sido ti quien me ha llamado para que te enseñe el calco de mi ultima pescado - explico y con una sonrisa saco una manta con el pescado calcado - ¿Que te parece? Soy bueno pescando, ¿Eh?
- ¡Ja, ja, ja! Claro... Lo había olvidado - dijo con cierta incomodidad - Tenga la bondad de esperarme en la sala japonesa... Enseguida estaré con usted - menciono pasado de largo.
- ¿Esta usted segura de cumplir esa promesa? - pregunto Kogoro viendo al anciano bajar las escaleras.
- Es igual, se olvidara de lo que le he dicho en cinco minutos - explico con exasperación - esta perdiendo la memoria, pobrecito - dijo sin ninguna pena por el hombre.
Kimi seguía observando el lugar, no veía nada "raro".
- Ya estamos aquí, querido - dijo tocando la puerta - ¿Me oyes? Que raro... - susurro con extrañeza - ... Quizá no esta aquí... - dicho eso saco una llave para abrir la puerta mostrando a un hombre que parecía dormir, Kimi observo la habitación. Tenía un mal presentimiento, y este fue correspondido justo cuando el hombre cayo muerto.
Lo siguiente fue que la familia se acercó a la escena del crimen y la policía llegó poco después. Cuando estaban investigando Kimi, Conan y el detective del Oeste se golpearon la cabeza por lo que antes de que Heiji lo regañara Kimi le había pedido a Ran que cuidara por ella a Conan, luego le devolvería el favor.
Por un momento Kimi pudo ver ciertos comportamientos parecidos al joven Kudo en el detective del Oeste.
- Se parece a Shinichi - susurro, ese comentario fue escuchado por el pequeño detective que antes de poder decir algo estornudo. "Es un caso de envenenamiento... Murió en silencio así que sería lo común".
En cuanto se comprobó que la puerta no había sido forzada y que la llave se encontraba en el bolsillo interior de su ajustado pantalón.
Kimi durante todo el rato observo alrededor de la oficina desde los libros que se encontraban en la mesa los cuales no tenían relación entre si, hasta los discos de música clásica. Sobretodo la foto del matrimonio de hace 20 años. "Oh dioses, el culpable es--" los pensamientos de Kimi fueron cortados justamente cuando escuchó un golpe.
Conan había caído de lleno al piso y como si fuese su único objetivo corrió a levantarlo.
- ¡Ran! ¡Llama a un médico y esperalo en la entrada! - Kimi volteó rápidamente al mayordomo - ¿Hay alguna habitación que pueda usar? - este solo contesto un "si" para guiarla fuera de la habitación.
- Espera - dijo Heiji tomándola del brazo. Un escalofrío recorrió al detective del Oeste cuando Kimi le dedicó una mirada tan escalofriante.
- Ya resolví el caso, así que aunque digas tu hipótesis sabré refutarla o apoyarla - finalizó logrando que el moreno la suelte. Pasaron a la habitación que señaló el mayordomo y le quitó el suéter. "Necesito agua fría" pensó Kimi antes de levantarse.
- ¡No! - Conan tomo la mano de Kimi antes de que le diera un ataque de tos y se tomará el pecho con desesperación. "¿Que puedo hacer?" Kimi se sentía desesperada y fue cuando se le ocurrió algo. "Un baño de agua fría".
Kimi le comenzó a quitar la ropa pero el pequeño detective se removía con desesperación, su cuerpo comenzaba a crecer de una forma tan dolorosa de ver.
- ... ¿Shinichi?
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