- A mi no me puedes engañar Shinichi - mencionó la castaña de ojos violetas al pequeño.
- ¿De qué habla Kimi-neechan? - pregunto el pequeño de lentes nervioso por las sospechas de la chica. Kimi sonrió.
- no soy Ran, a mi no me engañaras ni me logra...
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- ¿Qué? ¿Pero que están diciendo?
- Y no solo de ti, sino también de Kimi, Mouri y de los demás que entraron contigo al despacho - Shinichi.
- Porque al señor Isao Tsugimura lo asesinaron ante nuestros propios ojos - Kimi.
- ¿Delante de nosotros?
- Ah, entonces...
- El culpable lo asesino cuando entraron al despacho. Y la persona que estuvo más cerca de la víctima en ese momento...
- ¡Fue usted, señora Tsugimura! - señaló Kimi a la mujer.
- ¿Ehhh? ¿Que la señora mato al señor? - pregunto el mayordomo.
- No puede ser - dijo con temor la nuera.
- entonces cuando entramos la víctima estaba viva...
- Sí, sólo estaba anestesiada por algún producto que le había dado su esposa. La señora le clavó la aguja disimuladamente, Lo hizo sin que nadie se diese cuenta, y como la anestesia y el veneno era muy potentes, la víctima murió de inmediato sin llegar a despertar - Explicó Shinichi aun sosteniéndose de la cintura de Kimi.
- Para asegurarse la señora había dejado preparado lo de la ópera y los libros - finalizó Kimi dándole un respiro al de ojos azules.
- Así que, si podemos demostrar que hay rastros de somnífero o anestesia en la víctima...
- no es tan fácil... lo curioso es que todos hayamos pensado que el asesinato era anterior a nuestra llegada... y si se descubriesen en el cadáver restos de anestesia podría pensarse que el asesino lo hizo para que la víctima no pudiera defenderse - explicó Heiji - así que, en este caso... el asesino no sólo pretendía acabar con su víctima, si no también engañar a los testigos y a la policía. ¡Este es un falso caso de asesinato en una habitación cerrada! ¿Están de acuerdo, Agase, Kudo?
- Si... - respondió el detective del Este.
- Pues presenta tus pruebas. ¡Nadie vio a la señora sacar la aguja envenenada!
- Así es, ella se encargó de que nadie le viera hacerlo - continuó Kudo - la sacó junto con su llave.
- ¿Con la llave?
- Hospedero de la señora es el mismo tipo que el de la víctima... así que también puede abrirse. ¡Señora, enséñanos su llavero! Y dentro del llavero...
- Compromiso - dijo el inspector tomando la llave para revisarla sorprendiéndose al encontrar un hueco.
- Sí, es el lugar donde escondía la aguja. Lo hizo para poder sacarla rápidamente a la entrar al despacho - explicó Kimi - por eso este llavero representa una prueba de cargo contra ella... ¡Es la prueba definitiva de su culpabilidad!
- Pero ¿Y el motivo? - pregunto el inspector - ¿Por qué ibas a enseñar a su marido?
- Hoy en cuanto al motivo, si no nos equivocamos... - dijo Shinichi tomando una foto del estante - resulta evidente al ver esta fotografía.
