La universidad pasó y fue el momento de reírse en las caras de las personas que apostaron que terminarían antes de graduarse, pero no, cada vez la pareja se veía más enamorada al punto de que parecía que ambos estaban a punto de explotar de amor y aunque decían "estar más enamorados de nunca" la próxima vez que fueran vistos sería un nivel extra de amor que hacia a cualquiera sentirse empalagado
Más que nada porque muy poca gente creyó que alguien como Lee Taeyong del edificio de negocios haya caído rendido por el chico que recién había llegado de Tailandia a medio semestre Chittaphon Leechaiyapornkul, y la razón es sencilla, son polos totalmente opuestos, mientras el castaño es hijo de mami y toma hasta que su intestino este a punto de explotar, el pelinegro prefiere más pasar tiempo en casa viendo series o trabajando en el negocio de sus papás
La época favorita de Ten llegó, la temporada de cerezos, así que Taeyong pidió un día libre en la empresa para poder llevar a su novio en una cita, por suerte la empresa en donde trabajaba le pertenecía a sus padres, así que conseguir permisos no era complicado
El pelinegro se montó con la misma sonrisa encantadora de siempre en el auto y le regaló un beso en la mejilla, se acomodó y procedió a contarle que estuvo cocinando un pay de fresas con su madre para el picnic, y aunque a el no le gusten las frutas, sabe que ese postre es el favorito de su Taeyong, así que haría un esfuerzo en comerlo, porque le encanta ver como sus oscuras pupilas se dilatan al probar ese pay y darle besitos limpiando la jalea de fresa que queda de restante en sus labios
Al bajarse del carro, Ten quedó hipnotizado por lo hermosos que eran los árboles de cerezo, su corazón latió tan rápido de felicidad al punto que realmente pensó que le daría una taquicardia de no ser que Taeyong tomó su mano y se asomó para posicionarse justo enfrente de el y decir tiernamente — Tesoro, nos vamos? — haciendo que el menor regresara a tierra y empezaran a caminar por en medio de los gigantes árboles
De repente se queda parado y empezó a rebuscar algo en la bolsa de su pantalón ¿Tal vez quiere tomarle una foto? No sería una sorpresa que fuera así, ya que no era un misterio que amaba tomarle fotos en todos los ángulos, así que guiñó un ojo mientras hacía una V con los dedos de la mano y se quedó en esa posición hasta que su brazo se canso y se dio cuenta que no estaba sacando su celular sino que una pequeña caja de madera brillante
El castaño se hincó y miro desde abajo a su novio mientras tomaba la caja con las dos manos y la movía inconscientemente debido al notable nerviosismo
—Cada día a tu lado es un regalo que atesoro con todo mi corazón, desde el momento en que nuestros caminos se cruzaron, mi vida cambió por completo. Tu presencia ilumina mis días y tu amor llena mi corazón de felicidad. Eres la persona que siempre había soñado tener a mi lado, y cada instante juntos es mágico. Tu sonrisa es el sol que ilumina mi mundo. Cada vez que tus labios se encuentran con los míos, siento que el tiempo se detiene y solo existimos tu y yo. Mi amor por ti crece más y más cada día. Eres la razón por la que mi corazón late con fuerza, y no puedo imaginar mi vida sin ti. Te amo con todo mi ser, y siempre te amaré, más allá de las palabras mi tesoro —
Ten al escuchar esto brinco a los brazos de su novio llenándole la cara de besos y una que otra lagrima cayendo de la felicidad, para rápidamente separase de su cuello y poner su suave y delgada mano izquierda — Claro que si — dijo por lo que con una brillante sonrisa su ahora prometido deslizo aquel anillo de un color dorado brillante por su dedo anular
Después de eso los dos chicos enamorados caminaron tomados de la mano debajo del largo y hermoso camino de cerezos.