Despertó en una cama de hospital y vio a Taeyong hablando con lo que parecía ser un doctor y sus padres en la puerta, logró escuchar a su esposo llorando mientras decía que se había caído de las escaleras
Su familia entro y al ver a su agresor se sentó en la cama — Mamá el me hizo esto — exclamó señalándolo
— Te caíste de las escaleras querido — tomó la mano de su hijo y la besó
¿Se cayó? De ninguna manera, sabe que se golpeó en la cabeza pero fue por los golpes de Taeyong, de eso estaba seguro, sus padres dijeron que tienen que regresar al restaurante así que los dejarían solos, en absoluto, no se quedaría solo con este psicópata
— No papá, no me dejen con él — grito y se desgarro la garganta de nuevo — Mamá —
— Ten, te hubieras muerto si tu esposo no te traía aquí rápido, deberías agradecerle — dijo su padre firmemente
Miro desesperado a su madre rogándole con la mirada que no lo dejara, pero no fue suficiente porque aún así se fueron
Quedaron en silencio hasta que el castaño habló — Me dijo el doctor que te darían de alta en la noche, me quedaré aquí contigo así que no te preocupes — tomó la mano de su esposo para besarla pero el la retiro antes
— Tú me hiciste esto — se tocó las heridas quejándose suavecito por el dolor
— ¿Por qué te aferras? ¿Cómo te haría esto? —
— Lo hiciste, hiciste que me comiera a mi gato —
— ¿Gato? Mi tesoro te caíste de las escaleras, nunca hemos tenido una mascota — sacó un celular del bolsillo empezó a marcar algunos números
— ¿A quién le hablas? —
— Al psicólogo, parece que tuviste una pesadilla y lo confundes con la realidad —
¿Estaba confundiendo la realidad? No, el recordaba vívidamente como fue obligado a comer aquel pay, aún sentía su espalda a punto se ser quebrada contra la pared, eso no era un sueño, era la realidad, su realidad
