Pasó un mes hasta que quien solía una vez ser el guapo Lee Taeyong termino siendo solo un torso con cabeza, sus brazos y piernas habían sido cortadas, cada día maldecía el haber abierto los ojos de nuevo y rezaba por morir
Al ver aquel pedazo de ser vivo Ten sintió que probablemente se había pasado un poco pero todavía faltaba el gran final por lo que se empezó a preparar para darle a Taeyong lo que más ansiaba, es decir, el divorcio
Aunque se divorciara de su querido esposo, con todas las altas y bajas de verdad no podía odiarle, aquel hombre fue el que le hizo feliz durante mucho tiempo, conoció lo que era el amor y aprendió sobre él
Buscó los papeles de divorcio que ya estaban firmados por Taeyong y los firmó con lágrimas en sus ojos, lágrimas que limpió al enseñarle la firma mientras decía — Aunque legalmente estemos divorciados ahora siempre estaremos juntos mi amor —
A lo que Taeyong débilmente respondió con una sonrisa — Sí mi tesoro —
Se arregló y salió al registro civil a presentar los papeles, por fin el castaño había conseguido lo que más quería pero ¿A qué costo? De que el serviría ahora, no podía ni moverse, apenas podía hablar, se sentía una basura humana, bueno no solo se sentía sino que también lo era ¿Si quiera Jaehyun lo seguiría queriendo si lo viera así? ¿Sus amigos seguirían ahí? Eran muy buenas preguntas pero las respuestas eran más que obvias, se dio cuenta que estaba totalmente solo, se casó sin duda con un psicópata
Cuando Ten llegó corrió hacia la jaula y lo cargó para colocarlo en la barra de la cocina — Hagamos por última vez tu postre favorito — exclamó mientras sacaba fresas y galletas
Le cocinó el pay de fresa que tanto le gustaba a su ahora ex esposo y se lo dio de comer, de nuevo Taeyong sintió aquellos preciosos sabores que le hacían recordar su tiempo de universidad junto a Ten, lo hacían recordar su primer beso, la cara que hizo el pelinegro cuando se le confesó y todas esas escapadas después de clase para tener relaciones en los asientos traseros de su coche
Pero sobre todo recordaba aquel día que fueron a ver los cerezos que tanto amaba Ten, el siempre supo que Ten odiaba las frutas pero amaba como siempre compartían este mismo pay, ¿Cuándo fue que todo terminó así? No sabe fue que su corazón cambió pero se lamenta haberlo hecho, se arrepiente de todo lo malo que hizo ¿Pero de qué sirve lamentarse ahora?
Para el Ten era la estrella más brillante de todas y si pudiera regresar al pasado sin duda intentaría arreglar toda la relación
Sus lágrimas caían mientras terminaba su pay y miro al rubio quien también tenía los ojos llorosos — Perdón por todo, de verdad te amo y te amaré siempre — fueron las palabras que hicieron que los ojos del menor expulsaran las lágrimas con fuerza
—Si me amaras no me hubieras hecho todo eso —
— Lo sé fui un idiota pero en verdad te adoro —
— Haré mi pay ahora... de lo que más me gusta — dijo mientras se acercaba con un cuchillo de carnicero y lo posaba sobre el cuello del castaño
Antes de hacer un corte le dio un profundo beso que fue correspondido, el último beso de amor, un amor verdadero que los hizo recordar todos y cada uno de los momentos que vivieron juntos tal como si todo hubiese sido una película, al separar sus labios Taeyong murmuró — Te espero en el infierno mi tesoro — antes de que Ten presionara con fuerza y separara la cabeza del cuerpo de su ex esposo provocándole una muerte inmediata
Sus lágrimas caían por sus mejillas sin parar, pensó que ya no sentía nada por el pero estaba equivocado, sin duda lo seguía amando, cuando le dijo que estaba loco tal vez tenía razón, como sea tomó el lindo cuerpo de su esposo y lo cocino en un pay al igual que el lo había hecho en el pasado con su querido Leon
Después de un rato cortó un pedazo y se sentó en el comedor donde alguna vez el amor de su vida se sentó animoso delante de él, todavía lo veía ahí, veía al castaño feliz de que estarían juntos para siempre, feliz de que su querido tesoro más preciado estaba a punto de dar el primer bocado de un pay hecho de su cosa favorita del mundo o sea Taeyong
Un rato después cosió la cabeza de su ex marido a un muñeco gigante de oso que le había regalado en su primer aniversario y le puso un traje para después meterlo a un ataúd y anunciar oficialmente el deceso de Taeyong
Le pagó a un médico para decir que la causa de muerte había sido un problema de corazón que le provocó un paro cardíaco
Pensó que sería bueno para Tae que personas que quiso en vida comieran del pay así que cortó 5 pedazos
Dos se los obsequió a los padres del castaño que lo ingirieron llorando bajo la mentira de que lo habían cocinado juntos antes del paro cardíaco y lo mismo hizo con quienes fueron sus mejores amigos Johnny y Doyoung
Faltaba una rebanada, la llevó al complejo de departamentos que tenía marcado el teléfono de su ex esposo como la casa de su amante, se dirigió al departamento 127 y tocó la puerta unas tres veces hasta que el hombre rubio de las fotos atendió
— ¿Quién eres? —
— ¿Eres Jaehyun cierto? —
— Depende de quien pregunte —
Suspiro y contestó — Soy el esposo de Taeyong —
Jaehyun se sorprendió y asustado intento cerrar la puerta de su hogar pero el menor logró meter su pie para evitarlo
— Sé todo lo de ustedes y no vengo a reclamar —
— Entonces ¿Qué quieres ? — preguntó mientras abría lentamente la puerta
El teñido le contó sobre el fallecimiento de Taeyong y le obsequió el pedazo de pay
Ahora por fin era libre pero el recuerdo de todo lo que vivió junto a su querido Yong lo atormentaba cada noche, Decidió aceptar el hecho de que jamás entendería la relación que tuvo con él, así que con el dinero que había ahorrado y lo que consiguió al vender su casa decidió irse de Corea junto a sus padres para iniciar desde 0
En Corea dejo todo lo que alguna vez le perteneció menos su anillo, no podría dejarlo, no podría traicionar a Tae, cuando llegaron a China no tardo mucho en encontrar una galería en donde consiguió trabajo y luego descubrió que era de Kun, aveces puede recordar todo lo pasado con Taeyong pero decidió que solo guardaría los momentos lindos en su corazón y los malos los dejaría en el pasado
Después de haberse reencontrado con su amigo este se le confesó pero ¿Realmente después de todo podía ser capaz de amar a alguien de nuevo?
— Me he estado aguantando todos mis sentimientos desde la universidad, por favor dame una oportunidad — decía el chico de cabello azul
En un inicio Ten estaba lleno de dudas y problemas pero la compañía de Kun lo ayudaba de salir de ese laberinto sin salida así que, sí, decidió darle una oportunidad para salir sin saber que estaba a punto de entrar a una relación que parecía ser una canción romántica que se reproduce sin parar, una relación que lo impulsaba a dejar de hacer cuadros grises, una relación que lo hizo darse cuenta de que el amor no siempre duele
FIN
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