𝐎𝐏𝐏𝐎𝐒𝐈𝐓𝐄 𝐒𝐏𝐄𝐄𝐃𝐒 || Han Lue

IX

— Esperen, alto, alto... La policía dice que se activo la alarma en la central de la interpol.

Esa fueron las palabras que necesito todo el equipo para ponerse en marcha. Brian lideraba el equipo esta vez mientras que Dom se había quedado con Hobbs a esperar a Shaw.

Era por eso que ahora Lessa se encontraba conduciendo el vehículo que les habían otorgado a cada uno de ellos, no era el más rápido, sin embargo, era funcional, por lo que ninguno se quejo, además de Roman, claro. — Han, ¿qué tan lejos está la interpol?

— A dos manzanas. — Este contesto, mirando a su lado un segundo para ver el perfil serio de Lessa, sonriendo un segundo, este decidió no acelerar más y seguir a su ritmo, preparándose para cuando llegaran al edificio.

— Oigan, no quiero sacarles este tema tan de repente pero... ¿Sí se dieron cuenta de que somos los únicos idiotas corriendo hacia la interpol? Según yo, es un edificio custodiado por más de la mitad de los militares aquí ¿Por qué no tenemos a la policía siguiendonos el trasero? — Lessa preguntó, pareciendole extraña toda esa situación.

— Gracias, eres la única persona que parece razonar como yo, este es un maldito pueblo fantasma. — Tej aseguró, estando de acuerdo con el razonar de la menor, todo eso le parecía sumamente extraño.

— La interpol está adelante. — Han informó, y no basto ni un segundo después de eso para que los autos comenzarán a ser atacados, haciendo que estos se detuvieran.

Lessa suspiro, tomando la metralleta del asiento trasero antes de cargarla, sin salir del auto, esta abrió la puerta, disparando de inmediato por el pequeño espacio entre la puerta y el cuerpo del auto. Los ojos de esta lograron ver a una rubia en un auto bastante extraño, parecía de esos que usaban en carreras, fue por eso que se distrajo un segundo, tratando de recordar donde es que había visto ese tipo de autos antes.

Sin embargo, dejó ese tema de lado al escuchar a Brian decir algo sobre irse, eso hizo a la chica querer guardar su arma, sin embargo, sus ojos pasaron hacia lo alto del edificio, viendo como había un hombre con un francotirador en el lugar, pasando su mirada hacia el objetivo de este, su corazón dio un brinco, soltando el arma, esta salió lo más rápido que pudo del auto, corriendo hacia el más alto, quien seguía apuntándole a un hombre que había quedado en el lugar.

Sin pensarlo mucho, esta salto hacia él, empujándolo fuera del alcance de la bala, llevándolo consigo hasta que estuvieron detrás del auto del mismo, suspirando, esta lo abrazo mientras escuchaba las demás balas golpear el hierro del automóvil. Cuando todo se acabó, la chica trago, mirando por la cabeza del asiático, está logró ver como el hombre salia de su vista, cerrando los ojos un segundo, Lessa poso su frente sobre la coronilla del asiático, soltando un suspiro de alivio.

— Nunca bajes la guardia, Han... — Esta pidió, dejando un beso sobre el cabello de este antes de empujarlo suavemente para que ambos pudieran levantarse, este lo hizo, pero Lessa no pudo, sintiendo un gran dolor en su cadera, esta bajo su mano a ese lugar, una sensación húmeda llegó a su tacto, abriendo los ojos, esta logró ver su mano cubierta en color rojo vino, no queriendo asustar al asiático, esta intento pararse una vez más, sin embargo, el jadeo de dolor sólo hizo que Han dejara de prestar atención a su alrededor para ver a la chica aún en el suelo.

Sin pensarlo dos veces, este corrió a ella, poniéndose de rodillas una vez que la vio con una mueca en su rostro, tocando su mano en su cadera, este sintió algo caliente tocar sus dedos, viendo al lugar, este sintió como su corazón bombeaba más rápido al ver el color rojo de la sangre entre sus dedos. — Lessa...

— No te preocupes, estoy bien, solo... Ayúdame a levantarme por favor. — Esta pidió, Han no lo dudo ni un segundo, tomándola por los brazos, tratando de no hacer movimientos bruscos para no lastimarla.