Normies - Wenclair

Capítulo 18

— Yo las dejo solas.—susurra Isabel mientras trata de escabullirse fuera de la habitación. 

Enid no sabe que decir, la sorpresa es tanta que la ha dejado sin palabras, y sin fuerzas para mover algún musculo de su cuerpo, mira a la morena, su postura erguida y la mirada fija sobre ella como si esperara que dijera alguna palabra, pero la rubia no lo hace.

— Debí avisar al venir, perdona.—se disculpa la morena sin moverse de su posición pero al ver que no recibe respuesta, agrega— ¿Supiste lo de Maddie Ziegler?—pregunta con el afán de llegar al punto sin la necesidad de ser tan directa, pero Enid la mira confundida— La bailarina.—aclara.

— Maddie, claro, no sé nada nuevo de ella.—responde esta vez Enid en casi un susurro— ¿Por qué lo preguntas?—cada vez entiende menos la presencia de la morena en su habitación, y mucho menos porqué menciona a la bailarina de la escuela, trata de pensar lo mas rápido que puede y unir puntos, pero le es imposible, la situación era completamente rara. 

— Tuvo un infortunio con su ex novio.—para otra sorpresa de la rubia, la morena se sienta en una de las sillas de su escritorio aun manteniendo el torso totalmente erguido y aquella mirada fija y fría que no veía en ella hace mucho— Siéntate, por favor.—ordena y la rubia obedece como si su vida dependiera de ello. 

— No entiendo nada.—responde Enid ya sentada mirando a la morena— Lo siento, solo pensé que no querías verme y ahora...

— Y ahora estoy aquí, que sorpresa.—responde en tono sarcástico y suelta una risita que Enid sabe que no es precisamente de felicidad— No quiero ser grosera Enid, pero, puedes limitarte a escuchar, por favor.—otra frase en tono de orden, ese tipo de cosas que tanto había detestado la rubia durante su relación ahora se hacían presente y ella desde su subconsciente, sabía que se lo merecía.

— Escucho.—es lo único que sale de sus labios, ve como la morena toma una gran bocanada de aire antes de empezar a hablar, si no la conociera tan bien se tragaría la fachada que se ha armado, pero sabe que detrás de la mascara esta la niña con un corazón de oro que tanto ha lastimado.

— Bien.—respira hondo— Si bien dices que no sabes lo sucedido con Maddie...

— No lo sé, no he ido a la escuela.—interrumpe la rubia.

— Yo hablo, tu escuchas ¿de acuerdo?—cuestiona la morena otra vez con el tono que Enid detestaba pero asiente ligeramente haciendo que la morena se disponga a hablar de nuevo— El asunto es que el bastardo que tenía como novio a publicado un video intimo con ella, y como es la sociedad y la gente tan injusta, en vez de voltear y recriminarlo a él lo han hecho con ella, haciendo que el departamento de danza la separe completamente del grupo, ¿injusto, no?

— No sabía nada de eso.—dice la rubia sincera— Jack no se veía del tipo de persona que haría algo así.—dice mas para si que para la morena quien enarca una ceja. 

— No entiendo si ves las similitudes entre Jack y tu, y entre toda la situación.—suspira— Dado el último año que hemos compartido y aunque de tu parte todo se tratase de una mentira, claramente de la mía no, las cosas que te dije que son importantes para mi, realmente lo son...

— Las cosas que yo te dije también son...

— Enid, yo hablo, tu escuchas.—dice la morena— No vine aquí a hablar sobre que fue mentira o que fue verdad de las tantas cosas que dijiste.—mira a su alrededor— El departamento de escritura es importante para mi, pero como es esta sociedad y lo tan relevante que es ver a alguien en un momento tan intimo, puede que me echen a mi también si llegas a publicar el video que tienes.—trata de mantener el mismo tono sereno pero le es casi imposible. 

— Yo jamás haría algo así...

— Hay muchas cosas que claramente pensé que nunca harías.—asegura— De hecho sobre pasaste el limite de lo que creí que alguien podría hacer.—suspira entrecortadamente— El hecho de que me mentiste por un año a la cara, de que te burlabas de mi con tus amigos, de la humillación pública a la que me sometiste...—traga en seco— Borra el video, quiero ver que lo borres y no quedé rastro de que alguna vez lo hayas grabado.

— Lo haré.—asegura la rubia, y aunque las palabras de la morena la hayan herido al punto de tener las lagrimas a punto de estallar se dirige hasta un pequeño contenedor de donde saca la cámara con la que grabó aquel día, la enciende mientras ve como de reojo la morena se ha levando y se ha acercado lentamente hasta ella— Mira.—dice entregándole el aparato a la morena quien la ve confundida— Es toda tuya, dentro esta la tarjeta, siempre se puede recuperar si la elimino desde la cámara, no lo haría, pero sé que tienes todo el derecho de pensar que si, llévatela y deshazte de ella como mejor lo veas conveniente.

— Gracias.—dice la morena guardando el aparato dentro de su mochila— Te compraré otra.—asegura viendo como la rubia baja la cabeza— Te llegará por correo, debo irme.—dice sin mas empezando a caminar hasta la puerta hasta que siente como una mano sobre su brazo la detiene— ¿Qué?—pregunta tragando saliva.

— Sé que no es el momento, pero...—la voz de la rubia se entre corta haciendo que la morena bote un gran suspiro— De verdad lo siento, yo no sé de que manera pedirte perdón, no sé como remediar toda la mierda que he hecho, no sé por donde empezar, solo quiero decirte que estoy arrepentida, que pienso todos los días en tirarme del abismo por lo que te he causado, que me doy asco por las mañanas al verme al espejo, pienso en que no soy...

— Enid, no es el momento.—dice la morena—  Regresa a la escuela, vas muy mal como para que te des el lujo de faltar.—dice cortante.

— Mer, por favor.—suplica— No actúes de esa manera.—un sollozo se hace presente en la habitación. 

— ¿De cual manera?—pregunta— ¿Esperas que llore o que idea tienes en mente para poder cumplirla? 

— No quiero que llores.—asegura Enid— Yo solo quiero que me escuches.

— Entonces déjame que me vaya.—la voz de la morena ha salido mas débil de lo que imaginaba y la rubia lo nota, no sabe bien que es lo que esta haciendo pero sabe que es la única oportunidad que tiene con ella, y si no la aprovecha probablemente no vuelva a hablar con ella nunca mas— No es el momento y no sé realmente cuando lo será, pero por ahora solo déjame en paz.—los pensamientos de Enid se ven rápidamente cortados por la respuesta de la morena, se queda quieta con las lagrimas corriendo por las mejillas pero sin decir palabra y ni siquiera emitir sonido— Enid, suéltame.—ordena la morena y la rubia la suelta al instante, se voltea rápidamente y sale lo mas rápido que puede de esa casa, casi corriendo, llevándose por lado a la hermana de la rubia quien parecía resguardar la puerta.

Hola, nuevo cap, espero les guste y comenten que tal les parece como van los personajes.

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