Abel no esperaba que Gabriel se convirtiera en alguien tan importante en su vida, mucho menos porque no se imaginaba que se enamoraría de él del modo en que lo hizo.
Los sentimientos de Gabriel fueron notorios, y por eso decidieron comenzar una rela...
Tú y yo sabemos bien lo que viene ahora. El mes de septiembre donde ocurrió mi gran caída. Si de verdad tuviste la benevolencia de concederme estas últimas palabras convertidas en un texto, y has llegado hasta este punto, Gabriel, espero que de verdad puedas continuarlo porque está por terminar.
Entiendo muy bien que puede ser muy duro para ti leerlo. Porque está siendo igual de duro para mí escribirlo. Una parte de mí se rehúsa a seguir porque conoce lo que viene y no quiere aceptarlo, pero otra parte, más fuerte y más impetuosa. Me grita que debo tratar de enmendar mis errores y es así como podría lograrlo.
El siguiente capítulo de esta historia hablará de ese fatídico día, y de los eventos ocurridos que ocasionaron que tú y yo nos distanciáramos después de una relación como la que tuvimos. Como te lo dije tantas veces antes, no espero ser absuelto de mis culpas porque sería completamente impensable, tan sólo espero que logres comprender todo lo que sucedió dentro de mi mente. Te pido que me juzgues, no por lo que hice, sino por lo que me hizo llegar hasta un punto tan ruin; y si, aún después de leer todo esto, sigues pensando que soy un idiota y no quieres verme, prometo que me alejaré de ti porque lo comprenderé completamente.
Te pido que recuerdes quién soy y quién debí ser, y que, con las palabras que te dije antes sobre esos problemas que tanto me perseguían, tal vez, si esto fuese leído por un tercero, probablemente conocería el final porque podría ser algo predecible, pero esto es tuyo y mío, y tú y yo sabemos qué es lo que sucedió.
Quiero dejar muy claro que estoy más que arrepentido de lo que sucedió, y que sé que actué como un inmaduro estúpido, pero puedo decir que la peor característica de mí es que no sé tomar decisiones, y que esa, por lo menos en el momento, me pareció la más correcta.
No estoy culpando a nadie más que a mí de lo que hice, no quiero que se malentienda y que pienses que soy sólo una víctima de mis circunstancias, porque en realidad soy un victimario contra ti.
El mes de septiembre llegó, y también la fecha de nuestros seis meses juntos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
