Oigan pues al final sí quedé en esa sinfónica.
Mi director me volvió a amar.
Por primera vez en todo el mes me habló bien y me trató como a una persona y no como un fantasma invisible.
Pero no me regresó mi puesto de principal y sigo deprimida.
Hoy en los scouts volví a ser una perra odiosa e hice llorar a mi mejor amiga. Mis amigos me odian y les caí mal y ya me regañaron 3 veces desde que llegué hoy, y mañana me van a regañar otra vez por incompetente.
Ni siquiera soy tan buena como lo aparento y digo ser, ya demostré ser un asco y una farsante.
Me dí cuenta que mis navajas y cuchillos estaban desafilados, los afile un poco con una navaja que me prestaron con bastante filo y después me corté en el baño por la culpa.
Al fin pude sacarme algo de sangre, normalmente no logro sacar nada rojo.
Espero que me arda por días y me recuerde lo pendeja e inútil que soy.
Soy demasiado reemplazable, odio esto.
Ojalá se me baje la presión mañana y esté al borde del desmayo y nadie se de cuenta para poder sufrir sola todo lo que merezco sin que nadie me intente ayudar. No merezco ser querida.
Pero la cerda asquerosa comió demasiado el día de hoy y ayer, y lo único que va a lograr va a ser subir 10 kilos y deformarme entera más de lo que nací.
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Diario De Una Pendeja Triste Y Dramática
No FicciónHola estoy deprimida Odio la terapia Diviértanse viéndome perder la cordura con el paso del tiempo
