Mi Mayor Obsesión (JD Pantoja & Kim Loaiza) [COMPLETA]

Capítulo 11

*Al Día Siguiente*

*Narra Juan*

Lo de anoche siempre va a quedar en mi memoria. Kimberly es la chica que siempre había soñado. Me estaba despertando, pero sentía la cama vacía, rápido abrí los ojos, y efectivamente estaba sólo en la cama.

—Kimberly —dije un poco fuerte por si estaba en el baño, pero no obtuve respuesta —mierda —me levanté de la cama y me vestí.

Inspeccione el baño pero no había nadie, me acerqué a la puerta para salir de la habitación, pero me sorprendí al ver que estaba sin llave, por inconsciente me toqué las bolsas de mi pantalón, si tenía mis llaves.

Abrí la puerta enojado, pero me sorprendí al verla, en sus manos llevaba un plato con comida y un vaso con agua.

—Entra —me hice a un lado y ella pasó, cerré la puerta con llave.

—Sé que estas enojado por lo que pasó, pero... —la interrumpí.

—Quién te dejó salir? —yo estaba serio.

—Tu amigo, le pregunté si me podía dejar ir a traer algo de comer, ya que tú estabas dormido y no te quería despertar —ella sonrió, pero al segundo dejó de hacerlo —estuvo mal... verdad? —me preguntó algo preocupada.

—Si, pero no lo vuelvas a hacer, a menos que me hayas avisado —suspiré —y qué traes ahí? —cambié de tema viendo el plato.

—Una señora muy amable estaba en la cocina, me sorprendió por lo que me preguntó, pero luego me dio este plato y me dijo que es tu favorito —me lo entregó.

—Qué te preguntó? —agarré el plato.

—Que si yo soy tu novia —volvió a sonreír.

—Y le dijiste que si? —le pregunté sentándome a su lado.

—Ella no me dejó responder —me hizo ojitos.

—Esta bien —no pude evitar soltar una media sonrisa.

—Pero... estuvo muy mal que salí sin tu permiso, perdón —la voltee a ver.

—Te perdono, si me dices quien fue quien te dejó salir —le sonreí, pero por dentro me estaba muriendo del enojo que sentía.

—Estatura promedia, trigueño, barbudo, ojos gris, pelo negro —ella se calló un momento y luego soltó un suspiro —es la único que recuerdo —terminó de hablar.

—Gracias Kim —sé perfectamente de quien es, en ese momento se me quitó el hambre —toma —le entregué el plato.

—No vas... vas... —no dejé que terminara de hablar.

—No quiero que estés involucrada con lo que yo hago —solté un gran suspiro —quédate aquí, ya voy a regresar —toqué el pomo de la puerta, pero me detuve al escuchar su voz de nuevo.

—Quiero dormir en tu habitación Juan —escuché que dijo, miré de reojo que se estaba acercando a mi.

—Lo haré cuando regrese —sin esperar su respuesta salí de la habitación.

Saqué mi celular, le escribí a Francisco y a Ricardo, nos veríamos en el sótano. De tan enojado que estaba, sentía que iba a escupir fuego y que me iba a salir humo por las orejas. Llegué al lugar antes mencionado.

—Eres un idiota!! —escuché la voz de Francisco en el sótano, así que entré.

—Jefe —habló Ricardo.

—Por que? —le dije al idiota que ayudó a Kim.

—Jefe.... yo no.... sabía... —Francisco lo interrumpió dándole un golpe en la cara.

—Sabes que no me gusta dar segundas oportunidades —dije revisando si mi pistola tenía balas, luego la recargué y le quité el seguro.

—Jefe... no... mire.... por favor —el idiota ya estaba llorando.

—Eso hubieras pensando antes de cometer esa estupidez —apunté directo a su frente —últimas palabras —solté un suspiro.

—Jefe... —no lo dejé hablar y le di dos tiros en la frente.

Resonó por todo el sótano, Ricardo, Francisco y yo nos manchamos de sangre. Ellos se llevaron el cuerpo antes de que siguiera manchando, luego llegaron unas sirvientes a limpiar.

Guardé mi arma y regresé a la habitación donde se encontraba Kimberly, ella al verme, se preocupó.

—Tienes... —señaló mi camisa.

—Ya sé, vamos —tomé su mano.

—A dónde? —ella aún seguía algo asustada.

—A mi habitación —llegamos a dicho lugar

(....)