LIBRO 1
¿Amar? ¿Que es amar? Unos piensan que el amor es aquello que te salva cuando estás jodido , es tu ancla o tu remo para remar en un océano demaciado grande , pero gracias a tu remo llegarías seguro, ¿Eso es el amor? ¿Sentirte seguro o segura...
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NARRADOR OMNISCIENTE.
el caos aún prevalece en el lugar, la castaña aún no ha despertado el médico a disposición se encuentra revisando cada cierto tiempo, esperando que recupere el conocimiento.
En la biblioteca de casa se encuentra un pelinegro todo abrumado y desalineado el cual no ha salido de la habitación desde hace horas, su humor no es el mejor nadie es capaz de interrumpir su momento de enojo.
El Don de la mafia italiana se encuentra de baja, todo es un caos en casa de seguridad, el jefe de seguridad se encuentra qun buscando sin descanso al culpable de la emboscada hacia la mujer del Don, cada pista que encuentran los lleva a un camino sin salida, todo fue perfectamente planeado y eso frustra a Méndez.
Lo que parecía ser un respiro de tanto caos se convirtió en una bomba en la cual corre el tiempo sin saber en qué mmento detonara.
Han pasado diez horas desde el momento del acontecimiento, el sol empieza a salir los rayos impactan con el rostro del pelinegro el cual se encuentra con ojeras en sus ojos los cuales demuestra que no ha dormido nada, la habitación se encuentra toda desarreglada, hay libros en todas partes, vidrios rotos y sillas en el suelo.
Su respiración se encuentra aún pesada, las punzadas que se roducen en su cabeza significa una sola cosa, lo cual causa que suelte un gruñido.
—Mierda— pronuncia, mientras se toca la cabeza.
Nadie se ha atrevido a entrar después de que le informa sobre el cambio previsto en reunión con los Turcos, el miedo que les haga algo es evidente al momento que intentan convencerse de entrar.
El toque de la puerta hace que Alessandro salga de su burbuja.
Vuelvena tocar y no responde, pasan unos segundos y vuelven a repetir la acción nuevamente no responde.
La puerta se abre haciendo presencia la persona frente a Alessandro el cual ignora su presencia.
Un carraspeo hace que Alessandro levante la mirada y lo observe.
—Señor— habla con temblor en la voz— la Junta es en una hora con diez minutos.
Alessandro suelta un suspiro pesado y revisa la hora de su reloj.
—Cancelar—. Vuelve su vista hacia la nada.
Un nuevo carraspeo se escucha.
—No es posible señor— intenta explicar— los turcos exigen reunirse con usted, si no pasa van a romper alianza con usted y van a ser negocios y alianza con los Petov.
Lo último causa que Alessandro se cabree, él nunca ha perdido y no va a perder una alianza y negocios para que vayan con los Petrov.
—¿Así que amenazan con hacer alianza con los Petrov?— pregunta mientras suelta una risa burlona.
