OJITOS LINDOS ━❝ Will Graham I

Capítulo quince.

Parecía ser una mañana de enero bastante amigable, la rutina se retomaba, estaba en su auto escuchando música esperando a que Will saliera de su casa para luego marcharse a Quantico.

Su mano tomó el botón del volumen de la radio y lo bajó viendo como Will salía de la casa y cerraba con llave para luego subir al auto. Alex sonrió cuando vio a Will subir al duro temblando del frío.

-Buenos días, Graham. - Y volvía a esa clase de informalidad que a Will tanto le gustaba.

-Buenos días, Alex. - Will miró rápidamente al hombre y sonrió de vuelta.

El camino a la ciudad fue tranquilo, Will dejó de temblar cuando Alex prendió la calefacción del auto y unos minutos más, cercano a una tienda Will habló.

-amm, ¿puedes parar aquí? - Alex miró a su izquierda y vio la tienda.

-Claro. - Contestó a la par que daba vuelta para luego estacionarse.

-Voy y vengo rápido, necesito café para despertar. -Will habló mientras se quitaba el cinturón de seguridad. -¿Gustas algo? - Will preguntó y haciendo el máximo esfuerzo lo miró. Sintió que se derretía cuando al hacerlo Alex también lo miraba fijamente y sonriendo, una vez que sus miradas chocaron Alex la desvió rápidamente.

-¿Podrías comprarme un chocolate caliente? -Alex preguntó mientras sentía la sangre subía hasta sus orejas.

Will sonrió con ternura ante la petición y el nerviosismo de Alex. -Claro. -

Will bajó del auto con el corazón latiendo a mil ¿que había sido esa interacción?

Una vez dentro de la tienda se calmó un poco, tomó los vasos para café y comenzó a servirse el suyo y prepararlo, después sirvió el chocolate caliente de Alex, también tomó unas galletas y algunas cosas más para su hora de comer a eso de las dos de la tarde.

Salió de la tienda con las cosas y una vez más dentro del auto le tendió su vaso a Alex. Will sintió tantas cosas en ese momento, la manera en que Alex sonreía, como sus ojos se iluminaban y tomaba el vaso entre sus manos hizo que su corazón se volcará por completo.

Will estaba más que enamorado.

-Muchas gracias. - Alex no dudó en destapar el vaso y comenzar a soplarle para después tomar un trago. -Me encanta. -

-No hay de que. - Will sonrió viendo la escena. Alex parecía un niño pequeño.

De ahí, el camino a Quantico fue más tranquilo, incluso Alex pudo decir que lo disfrutó.

-¿Hoy asistirá a su cita con el Doctor Lecter? - Alex preguntó repentinamente mientras buscaba un espacio en el estacionamiento.

-Creo que si, en todo caso te mandaré mensaje. - Will respondió

-Oh, sobre eso. - Will no pudo evitar sentir una punzada en el corazón de los nervios que esas simples palabras le causaron. - Talvez un compañero mío lo lleve hoy. - Alex respondió naturalmente mientras se estacionaba.

Will quedó en blanco ¿De qué carajos hablaba?

-¿A-a que te refieres? - No pudo evitar tartamudear, su corazón comenzaba a latir con fuerza, pero esta vez del miedo.

-Saldré de la ciudad unos días, un compañero mío será su guardaespaldas por esta semana solamente. - Alex sonrió un poco y se giró a ver a Will. Alex no supo explicar lo que sintió cuando Will frunció el ceño y evadiendo su propia regla de no mirar a los ojos, lo hizo.

-¿Por qué? - La pregunta desconcertó a Alex. -Digo ¿a dónde vas tantos días? -

Alex estaba atónito. - Yo... tengo asuntos familiares que atender, saldré al aeropuerto esta tarde. - Alex miraba confundido a Will. ¿Por qué se sentía así? ¿Por qué Will lo miraba así?