Hoy tengo clases

Capítulo 4. Cuando ya te atrae tu alumna.

Keller Foxter

Resulta que la chica con la que me topé el otro día es Kirah Meller una estudiante sobresaliente de arquitectura y a la cual le daré clases por el primer semestre.

¿Cómo se esto? Estaba viendo los expedientes de alumnos de nuevo ingreso y la reconocí de inmediato, no pude evitar ojear una que otra cosa y descubrir su alergia a las fresas, así que sí cuando llegue al salón ya la conocía alguito, lo que hizo que no me sorprendieran cuando la vi.

Había llegado tarde por culpa Melissa quién me retraso de camino al trabajo. Pero ya estaba aquí y antes de que se dieran cuenta de mi presencia analice a mi clase, había muchas personas más jóvenes que yo, otros a los que seguro les llevaba solo dos o un año. Cuando la ubique estaba vestida con una falda parecida a la de la primera vez que la vi, pero más suelta y un jersey crema con letras de la universidad, se la había visto a muchas personas pero a ella le quedaba diferente, no sabría cómo explicarlo.

De pronto todos se callaron, dándome cuenta de que ya se sabía de mi llegada. Decidí entrar al aula.

-Buen día, empezemos -fueron mis palabras.

-Soy Keller Foxter -escribí mi nombre en la pizarra de marcador- seré su profesor de matemáticas y física inicial, materia que solo tendrán este semestre, espero que pongan atención y puedan salir bien nutridos de estas clases.

Mis alumnos me miraban atentos a cada palabra, pero yo solo podía intentar evitar dirigirle una mirada a ella, quería ver su reacción.

Di una pequeña explicación sobre las ecuaciones cuadráticas con las que empezaríamos.

De pronto no pude evitarlo más y la vi, no mejor dicho, la observé.

Cuando sentí que ella desviaría la mirada dije:

-Señorita, a la pizarra.

Primero puso cara de confusión, luego como de quién se decide a hacer algo.

La observé todo el tiempo, mientras bajaba las escaleras, llegaba frente a mí, tomaba el marcador, giraba hacia la pizarra y empezaba resolviendo uno de los problemas. Cuando terminó enuncio un: "listo".

Escuchar su voz, me sacó una pequeña sonrisa.

-«Ademas de inteligente tiene buen guarda ropa» -pense, o eso creía que hice, cuando vi el rubor en sus mejillas y el silencio del salón supe que había hablado en voz lo suficiente alta.

-Lo siento señorita -musité, ella se largó rápido a su asiento y la clase continuo.

. . .

Salí del salón de clases y me dirigí al salón de maestros, tenía unos cuarenta minutos libres, al entrar al salón me senté en uno de los sofás para corregir los ejercicios de esta mañana.

El sofá se hundió justo a mi lado y alguien suspiro. Decidí voltear con sigilo mi mirada, me di cuánta que se encontraba una chica como de mi edad que al parecer tambien era maestra si no ¿Que haría aquí?

Cuando se dio cuenta de mi presencia mencionó un:

-Buen día.

-Buen día -respondí.

-¿Eres nuevo?

-Sí.

Yo no soy sociable así que, si quería sacarme palabras iba a tener que esforzarse.

Ella lo noto y prefirió irse por otro lado.

-¿Quieres café?

Me sorprendí con su pregunta, si algo además de que no era sociable era que yo tenía adicción por el café.

-Si, claro -la mire, tenía el cabello rojo envuelto en un moño desaliñado, un vestido floreado le acompañaba junto a unos lentes finos de pasta café.

Compartimos un café en silencio pero ya no me desagradaba tanto por ofrecerme el café. Me largué cuando paso mi tiempo libre.

Llegó la hora de salir, me dirigí al parqueo, iba mirando las llaves de mi auto cuando... La observé de lejos con un chico.

-No.

Escuché como respondía ella a algo que él le decía.

-Sube al auto.

Me acerqué un poco más para escuchar.

-Que no -ya la había atrapado del antebrazo y halaba a su auto.

-¡Kirah! -le llamé.

Él chico se detuvo rápido y se alejó algo de ella.

Al llegar la agarre de la cintura y le di un beso en la cien.

-Cielo ¿Él es? -pregunte, la sacaría de este apuro.

-¿Eh?

Dijo, le guiñé un ojo y ella comprendió lo que hacía, sentir su piel era cálido a pesar de la ropa que nos separaba.

-Mi ex, amor.

-¿Te está molestando?

-La verdad no, ya no lo hace.

-¿Ya te vas? -le pregunté al muchacho que me puso mala cara.

-Aja -contesto.

Dio media vuelta, se montó en su auto y tan fácil como vino se fue.

-Gracias.

-Tranquila, he salvado a chicas de esta manera antes, los tíos se quedan tranquilos con esto.

Una chica que no había visto pero que por su vestimenta supuse estudiaba medicina, se acercó, extendiéndome la mano.

-Profesor...

-Keller, Keller Foxter.

-Keller -le guiño un ojo a su amiga, pero me hice el que no lo noto- Margo, mejor amiga de esta hermosura ¿No es así?

Si que sí.

-Disculpe a mi amiga, ya, ya nos vamos -tartamudea un poco Kirah ya sonrojada.

Se dieron media vuelta y me quedé solo en el estacionamiento.

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¿Les gustó el cap? A mi me encantó! Las actualizaciones serán los viernes ya que subir los martes de me complica un poco.

El próximo capítulo será el viernes de la semana ya entrante, espero me entiendan.

Gracias por tanto apoyo a esta historia!!! Ya somos más de 600 lecturas en menos de tres capítulos!!!

Muchísimas gracias, besitos de fuego. 💋🔥