Teníamos que poner ideas de un puesto y ser los ganadores de recaudar más fondos, habiendo leído tantos libros y visto tantas películas sabemos que estands no hacer, no quedó de otra que buscar el mejor y más fácil para dos amigos que no tiene cabeza para otra cosa que no sean sus amigos y los problemas que tenían.
Irvin pensó en copiar ideas de las películas que su novia lo hizo ver, no obstante tenía sus desventajas esas ideas, era un completo desorden de estands que estaban ocupados o no tenían nada bueno en hacerlos.
—¿Y porque no hacemos cabinas del paraíso?
—¿Qué significa? Sabes que el presupuesto es alto, pero traer arena a la ciudad, creo que es...
—Ya entendí. Solo que no me comprendes, no me refiero a un paraíso tal cual. Sino que habra cuatro cabinas y todos tendrán sus cinco minutos en el paraíso. Como el juego.
—Eso ... no es una mala idea, solo necesitamos a cuatro personas dispuestas a estar dentro —dejo caer mi mentón sobre mi mano del brazo que permanece recargado de la mesa mientras observo a todos lados.
—¿Y por qué no tú? Eres soltera, nadie sabrá que eres tú y solo tendremos que buscar a otra chica y dos chicos.
—¡¿Yo?! —me levanto de golpe sorprendida y de alguna manera me pongo nerviosa al pensar en estar ahí— Aun si acepto, faltaría gente...
—También esta Graham. Si no acepta esta bien, Johan aceptara y conozco a la amiga de mi novia, ella puede ser otra. Solo nos faltaría un chico y conozco a uno que le permiten venir, seria bueno que hablaras con él. —esa mirada que me muestra Irvin es más que obvia que se refiere a mi hermano.
—Veré que puedo hacer...
Me levante de la mesa viendo a Graham pasar a mi lado y eso me hizo detenerme para girar a la dirección donde se dirigía, por su risa burlona y la cara de Irvin es claro que no acepto ser parte de nuestro estand. Frote mi frente varías veces con la mano pensando si sería buena idea que mi hermano fuera, no tiene novia por lo que se y es improbable que rechace hacerlo.
Sentada en las bancas del campo exterior de la escuela con la luz del sol pegando directamente a un costado no dejo de observar el teléfono, que señal espero para marcar el número y pedírselo. Mi mente da vueltas; espere que fuera más tiempo el que tardaríamos en volver a encontrarnos y ahora necesito su ayuda. Estando a punto de marcar, realmente a solo un centímetro de presionar su contacto una llamada entra, Irvin encontró una solución más efectiva y algo engañosa para mi gusto.
Un chico de la escuela que nadie noto durante tanto tiempo quiso estar dentro, Irvin creyó que era buena idea porque después de todo nadie vería su cara o la de ninguno en las cabinas. Acepte con tal de no llamar a mi hermano y hacer lo que ya es incomodo aun más, se que en algún futuro estaré lista, solo que no es este.
Seguimos planeando el estand durante las horas de salida de clases, aunque Irvin ayudó demasiado aun así se concentro en ayudar a su novia también. Los directivos no comentaron nada acerca de hacerlo sobre esto, quiero creer que no era su mayor problema en estos tiempos. Por primera vez en la escuela L.O.V.E. brillaria su nombre; durante años siempre se hizo algo con relación a vender comida o mostrar proyectos, definitivamente fue algo bueno hacer esto ahora.
Todos estuvieron emocionados, quisiera decir que yo también, no obstante, la idea de que besaría a varios chicos giro en mi cabeza dio vueltas, porque debe molestarme la idea de un simple beso. No es la primera vez que doy uno. Quiero creer que es culpa de que será el primer cumpleaños donde todo se sienta distinto, será un día antes del evento.
Y por supuesto, nadie lo sabe, no será una sorpresa que este año no lo celebre con todo lo que a pasado no tengo cabeza ni tampoco tiempo en lidiar con algo tan simple como mi cumpleaños. La siguiente semana me encargue sola del estand y el lugar que nos tocó, organizar fue más difícil de lo que pensé al ser uno de los lugares que más espacio necesitaría.
Los últimos tres días era de preparar, nada se deja al final en esta escuela, todo tiene su tiempo y poco de amor, tal vez por eso se llama L.O.V.E. al final de todo. Poniendo los retoques a las pegatinas de decoración de las cajas me di cuenta que faltaban, así que le pedí a Irvin que fuera por ellas. Sin que estuviera me puse a ver que más necesita nuestro estand para ser lo más llamativo posible en la noche. No puedo evitar voltear a los demás de cada equipo y notar que Graham la pasa genial con su chica de la semana, no quisiera decirles así a todas, es solo que se lo ganaron.
Desde que sucedió hace un mes lo de sus amigos se a comportado cerrado con Irvin que incluso en las noches los escucho discutir porque él llega tarde o solo lleva a chicas a... esas cosas. Lo evite desde que me hizo enfurecer lo que dijo de mí. Nuestras vidas nunca estuvieron en la misma zona, no se porque me molesta aún verlo.
Su cabeza se endereza cruzando con mi mirada y lo evito regresando a las cabinas, dándome cuenta que una parte de la decoración del puesto principal se había caído, me estire saltando varias veces y no logré alcanzarlo; no soy alguien que se rinda fácil así que seguí intentando, no espere que mi camisa se enredara en una parte y al caer del salto se rompería el escote.
Mi primer reacción fue cubrirme, un chico de otro equipo se dio cuenta y silbo mientras decía la típica frase de hombre machista, no se porque eso me molestó si es normal que varios chicos sean así. Lo ignore sosteniendo con fuerza mi camisa rota del escote para juntar las mitades lo más posible. Sentí impotencia durante un tiempo que mis piernas no reaccionaban y todos comenzaron a creer que era un acto de exhibición hasta que una camisa cayó sobre mí espalda y al escuchar su voz me sentí protegida.
—¡Sí tanto les gusta ver, miren lo que nunca tendrán, idiotas! —Graham luce molesto mientras me abraza entre sus brazos y puedo percibir el aroma de su perfume impregnado en su pecho.
Todos miran a Graham que se muestra sin camiseta que me ignoran a mí, eso me de la confianza de empujarlo y salir corriendo de ahí. Camino al dormitorio me encontré con Irvin, me pregunto si me encuentro bien; no porque este llorando, sino esa cara de avergonzada que no oculte un poco.
Le pedí que continuará porque sucedió un accidente. No le di detalles y mejor me marché, se muy bien que Graham se encargara de eso. Solo quiero llegar al dormitorio y aventar todos mis pensamientos del quinto piso como si fuera tan fácil. Graham es el idiota más grande que conozco, es imposible que me pueda gustar alguien como él y sea más eso que el hecho de que todos me vieron si camisa lo que me de vergüenza.
ESTÁS LEYENDO
Enemigos Del Amor
Teen FictionUna relación depende de un hilo muy ligero, se puede trozar tan fácil o se pueden caer de él. A veces también se necesita saber si estas listo o no para estar con alguien. Erin no odia la escuela, pero si hay dos razones por las que desearía dejarla...