Enemigos Del Amor

▪︎Capítulo 6▪︎

Resultó ser Irvin al ver que su amigo tardaba tanto, ambos le abrimos metiendolo dentro y diciéndole lo que pasaba. Se comenzó a reir hasta que se detuvo y nos planeo ayudar, me tomó del hombro para salir como si fuéramos los mejores amigos del mundo. Al llegar a los dormitorios me pidió que no me preocupara por Nolan, él se encargaría de llevarle algo de ropa.

No se porque eso me decepcionó un poco, ¿tanto deseo volver a ver ese cuerpo desnudo? Que tonterías piensa mi cabeza, y porque tengo la sería costumbre de besar a las personas en los peores momentos, Erin Carey Lee, no volverás a besar a nadie al menos que quieras algo serio con esa persona. Repito una y otra vez lo mismo hasta creérmelo yo misma.

Volviendo a Johan, ese idiota pagara por lo que intento hacer, no soy una tonta que puede engañar para ser la burla de la escuela por salir de los baños de chicas, parece que en serio me seguirá el apodo de "La Loca De L.O.V.E." hasta mi último día de clases aquí. La noche llego y por dormir toda la tarde ya no tenía sueño, así que espere a que Dakota se durmiera, lo cual hace temprano por sus horarios.

Me dirigí afuera de los dormitorios y estando en el camino de piedra me quite los zapatos para caminar en el pasto. Me tire viendo el cielo, realmente no sé porqué hago esto a mitad de la noche, pero se ve totalmente hermoso. Al día siguiente tenia que guardar mis cosas para el campamento y en vez de dormir me encuentro mirando las estrellas que rodean a la luna.

Pensando un largo rato me levante sacudiendo mi pijama y regresando a dentro; la mañana siguiente asistí a clases prestando atención a todo e ignorando a Johan junto a sus idiotas amigos que giraban a verme riendo.

—Tenía razón, solo se burlan de ti —susurra Graham con una sonrisa diciéndome lo obvio.

Me molesta que tenga razón, pero me pongo mis audífonos anotando lo de la pizarra. En el almuerzo no puse un pie en la cafetería, no porque tuviera vergüenza de dar la cara, sino que al pensar que hay ratas me hace no querer comer ahí. Preparé un sándwich en mi dormitorio y me lo comí mientras guardaba mi mochila para el día siguiente.

Terminando de hacer todo, Dakota regreso más temprano de lo usual, la iba a saludar, pero me detuve al escuchar la voz de otra persona que resultó ser Colleen. Creí que ambas terminaron por como lloró Dakota antes. No quería escuchar eso, así que me puse mis audífonos y me recosté en mi cama durante un largo rato hasta que me quede dormida.

No pasaron muchos minuto cuando varias voces me despertaron y al salir eran los chicos junto con Dakota riéndose de una película que veían juntos. Todos voltearon a verme y el único en burlarse fue Graham, no entendí hasta que Irvin apunto mi cabello todo despeinado. Tome un cojín del sofá y se lo lance a la cara a Graham antes de salir corriendo dentro de mi habitación.

Nolan toca a la puerta preguntando si puede pasar y sentándome en mi cama le doy el pase, su sonrisa me tranquiliza hasta que menciona lo de la última vez en el baño.

—Me gustas... —mi cara de sorpresa lo pone nervioso y se pone a tartamudear— No. Bueno, sí. Erin, puedes decir algo.

—Nolan, no me interesas. Lo del beso fue accidente. Tus tontos ojos azules y tus labios azules ... —«solo me hicieron recordar el estúpido sabor dulce de los labios de Graham, carajo, porque pienso en él ahora»

—¿Entonces porqué no lo intentas una vez más? Así me respondes mejor...

No vi cuando Nolan se acerco tanto por estar pensando en Graham. Sus ojos eran lindos, pero recordé los verdes de ese idiota y su cabello con nada de gel a diferencia de Nolan que usa un poco. Me hago hacia atrás evitandolo, sin más opción cierro mis ojos y la voz del odioso de Graham por primera vez me salva.

—¡No puede ser! —se burla llamando a Dakota e Irvin— Sí lo harán al menos que no sea aquí con todos nosotros afuera.

—¡¿Qué?! ¡No! —empujó a Nolan poniéndome de pie y mirando molesta a Graham— Somos adolescentes, torpe. Que tu seas un amante del amor y esas cosas, yo no...

—¿Amor? No puede ser. Eso ni siquiera existe, chica loca. Créeme que me da más asco que usar ...

—¿Perfume? Con razón tienes un olor asqueroso —sonrió sarcásticamente.

—Al menos no huelo a fresas como una bebé.

—¡Es mi olor natural, idiota! —le lanzó una almohada y el cierra la puerta rápido.

—¿Sabes a que huele? —pregunta Dakota alzando la ceja.

—La vez que... ¡solo olvidenlo! —se escucha la puerta del dormitorio cerrarse con fuerza.

—Ese idiota... —mencionó en voz baja para mí.

—Erin. ¿Podemos volver a nuestra conversación?

—Nolan. Eres lindo, pero realmente no quiero algo serio. No te conozco mucho y...

—Entiendo. No debes explicar, yo... haré todo lo posible por conquistarte en un futuro un poco lejano —dice acercándose a mí para tomar los costados de mi cabeza con sus manos y darme un beso en la frente.

Nolan se marchó de la habitación y sin saber que hacer me recosté en mi cama para dormir e intentar olvidar todo lo sucedido, que parte de que no me gusta no entendió, ¿será que no se lo dije directamente? La mañana siguiente, Dakota me despertó diciendo que era momento de alistarse para salir al autobús camino al campamento.

Todos nos encontrábamos afuera esperando la orden del profesor para entrar al autobús, no quise pelear por entrar, así que deje que todos entraran para dirigirme dentro y tener la opción de sentarme junto a Nolan. Realmente no quería sentarme junto a él, se volvió muy incómodo desde lo de anoche.

Camine por el pasillo del autobús hasta que una mano me empujó hacia un asiento, agradecí por ayudarme y al escuchar la voz, Graham me sonrió sarcásticamente dándome unas palmaditas en la cabeza.

—¿Qué? ¿Tú? ¿Por qué me ayudas? Eres Graham...

—No entiendo. En fin. Lo hice porque solo le harás mal a mi amigo, no por ti —se pone sus audífonos recostandose en el asiento con los ojos cerrados— Dormiré, así que no hables.

—Sí que eres un... gracias... —abro mi mochila buscando mis audífonos y recuerdo dejarlos en mi cama.

Suspirando mientras presionaba mi mochila, un audífono se muestra frente a mí, Graham se encuentra siendo amable conmigo, eso sí que es realmente extraño. Por instinto lo tomó poniéndolo en mi oído, son las músicas que me gustan, al ver a sus manos es un reproductor nuevo, era fácil notarlo.

Mi cabeza me decía que no, pero mi corazón creyó que tal vez era posible que Graham hizo un reproductor con mis músicas favoritas realmente. Una mueca de felicidad se dibujo en mi rostro y cerré los ojos para relajarme.

'Graham volteo a ver a Erin sonriendo, al darse cuenta hizo una cara de asquerosidad y giro a la ventana ignorando el hecho de que por un momento no le desagrado Erin y su cara. Aunque el sabor menta de sus labios aún seguían en su cabeza y odiaba pensar en eso'.